Biblia paralela

# Reina-Valera revisada 1909 close Moderna 1929 close
1 BENDICE, alma mía, á Jehová. Jehová, Dios mío, mucho te has engrandecido; Haste vestido de gloria y de magnificencia. ¡BENDICE, oh alma mía, a Jehová! Jehová, Dios mío, tú eres muy grande; te has revestido de gloria y de majestad.
2 El que se cubre de luz como de vestidura, Que extiende los cielos como una cortina; Aquel eres que se cubre de luz como de una vestidura; que extiende los cielos como una cortina;
3 Que establece sus aposentos entre las aguas; El que pone las nubes por su carroza, El que anda sobre las alas del viento; que entabla sus cámaras con aguas; que pone las nubes por su carroza; que anda sobre las alas del viento;
4 El que hace á sus ángeles espíritus, Sus ministros al fuego flameante. que hace los vientos sus mensajeros, los flamigeros rayos sus ministros.
5 Él fundó la tierra sobre sus basas; No será jamás removida. Él fundó la tierra sobre sus basas; no será jamás removida.
6 Con el abismo, como con vestido, la cubriste; Sobre los montes estaban las aguas. La cubrió con el mar profundo, como con un vestido; sobre las montañas estaban las aguas.
7 Á tu reprensión huyeron; Al sonido de tu trueno se apresuraron; A tu reprensión huyeron; a la voz de tu trueno se apresuraron
8 Subieron los montes, descendieron los valles, Al lugar que tú les fundaste. (elevándose las montañas, bajando los valles) a este lugar que fundaste para ellos.
9 Pusísteles término, el cual no traspasarán; Ni volverán á cubrir la tierra. Pusísteles término que no pueden traspasar, ni volverán más a cubrir la tierra.
10 Tú eres el que envías las fuentes por los arroyos; Van entre los montes. Aquel eres que envía fuentes en los valles: entre las colinas se van corriendo.
11 Abrevan á todas las bestias del campo: Quebrantan su sed los asnos montaraces. Dan de beber a todas las bestias del campo: los asnos monteses apagan su sed.
12 Junto á aquellos habitarán las aves de los cielos; Entre las ramas dan voces. A sus orillas habitan las aves del cielo; gorjean entre las ramas.
13 El que riega los montes desde sus aposentos: Del fruto de sus obras se sacia la tierra. Aquel eres que riega las colinas desde sus cámaras; la tierra se harta del fruto de tus obras;
14 El que hace producir el heno para las bestias, Y la hierba para el servicio del hombre; Sacando el pan de la tierra. Aquel que hace producir la hierba para las bestias, y las plantas en que trabaje el hombre, para sacar pan de la tierra;
15 Y el vino que alegra el corazón del hombre, Y el aceite que hace lucir el rostro, Y el pan que sustenta el corazón del hombre. y el vino que alegra el corazón del hombre, el aceite para hacer relucir su rostro, y el pan que fortalece el corazón del hombre.
16 Llénanse de jugo los árboles de Jehová, Los cedros del Líbano que él plantó. Los árboles de Jehová están llenos de vigor; los cedros del Líbano que él plantó.
17 Allí anidan las aves; En las hayas hace su casa la cigüeña. Allí anidan las aves, la cigüeña tiene en los abetos su casa.
18 Los montes altos para las cabras monteses; Las peñas, madrigueras para los conejos. Las altas montañas son para las cabras monteses; los peñascos sirven de refugio para los damanes.
19 Hizo la luna para los tiempos: El sol conoce su ocaso. Constituyó la luna para repartir los tiempos: el sol conoce su ocaso.
20 Pone las tinieblas, y es la noche: En ella corretean todas las bestias de la selva. Traes las tinieblas, y se hace noche; en ella se ponen en movimiento todas las bestias de la selva.
21 Los leoncillos braman á la presa, Y para buscar de Dios su comida. Los leoncillos rugen tras la presa, y buscan de Dios su alimento.
22 Sale el sol, recógense, Y échanse en sus cuevas. Se levanta el sol; ellos se recogen, y se echan en sus cuevas.
23 Sale el hombre á su hacienda, Y á su labranza hasta la tarde. Sale el hombre a su obra y a sus labores hasta la tarde.
24 ¡Cuán muchas son tus obras, oh Jehová! Hiciste todas ellas con sabiduría: La tierra está llena de tus beneficios. ¡Cuán multiformes son tus obras, oh Jehová; con sabiduría las has hecho todas! ¡la tierra está llena de tus riquezas!
25 Asimismo esta gran mar y ancha de términos: En ella pescados sin número, Animales pequeños y grandes. ¡He allí el grande y anchuroso mar, en donde se mueven seres innumerables, animales así pequeños como grandes!
26 Allí andan navíos; Allí este leviathán que hiciste para que jugase en ella. Allí transitan las naves, y aquel leviatán que hiciste para juguetear en él.
27 Todos ellos esperan en ti, Para que les des su comida á su tiempo. Todos ellos esperan en ti, para que les des su alimento a su tiempo.
28 Les das, recogen; Abres tu mano, hártanse de bien. Tú les das, ellos recogen; abres tu mano, se hartan de bien.
29 Escondes tu rostro, túrbanse: Les quitas el espíritu, dejan de ser, Y tórnanse en su polvo. Escondes tu rostro, se turban; les quitas el aliento, expiran, y vuelven a su polvo.
30 Envías tu espíritu, críanse: Y renuevas la haz de la tierra. Envías tu aliento, son creados, y renuevas la haz de la tierra.
31 Sea la gloria de Jehová para siempre; Alégrese Jehová en sus obras; ¡Sea la gloria de Jehová para siempre! ¡regocíjese Jehová en sus obras!
32 El cual mira á la tierra, y ella tiembla; Toca los montes, y humean. el cual mira a la tierra, y ella tiembla; toca los montes, y humean.
33 Á Jehová cantaré en mi vida: Á mi Dios salmearé mientras viviere. ¡Cantaré a Jehová en toda mi vida; a mi Dios tañeré salmos mientras yo tenga ser!
34 Serme ha suave hablar de él: Yo me alegraré en Jehová. Dulce será mi meditación en él: yo me alegraré en Jehová.
35 Sean consumidos de la tierra los pecadores, Y los impíos dejen de ser. Bendice, alma mía, á Jehová. Aleluya. ¡Sean los pecadores consumidos de sobre la tierra, y los inicuos dejen de ser! ¡Bendice, oh alma mía, a Jehová! ¡Aleluya!
navigate_before Salmo 103 Salmo 105 navigate_next
arrow_upward Arriba