Biblia paralela

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Oración del pobre, cuando estuviere angustiado, y delante de Jehová derramare su lamento. Oración de un afligido, cuando desfallece, y derrama delante de Jehová su querella.
1 JEHOVÁ, oye mi oración, Y venga mi clamor á ti. ¡OYE, oh Jehová, mi oración; llegue mi clamor a ti!
2 No escondas de mí tu rostro: en el día de mi angustia Inclina á mí tu oído; El día que te invocare, apresúrate á responderme. ¡No escondas de mí tu rostro en el día de mi angustia! ¡inclina a mí tu oído! ¡en el día que te invoque, apresúrate a responderme!
3 Porque mis días se han consumido como humo; Y mis huesos cual tizón están quemados. Porque como humo se consumen mis días, y mis huesos arden como leña seca.
4 Mi corazón fué herido, y secóse como la hierba; Por lo cual me olvidé de comer mi pan. Herido como hierba está mi corazón, y se ha secado, de modo que me olvido de comer mi pan.
5 Por la voz de mi gemido Mis huesos se han pegado á mi carne. A causa de la voz de mi gemido, mis huesos se han pegado a mi carne.
6 Soy semejante al pelícano del desierto; Soy como el búho de las soledades. Soy como el pelícano del desierto; soy como el buho de las ruinas.
7 Velo, y soy Como el pájaro solitario sobre el tejado. Velo, y soy como gorrión solitario sobre el tejado.
8 Cada día me afrentan mis enemigos; Los que se enfurecen contra mí, hanse contra mí conjurado. Cada día me afrentan mis enemigos; y mis enfurecidos adversarios juran por mí.
9 Por lo que como la ceniza á manera de pan, Y mi bebida mezclo con lloro, He comido, pues, ceniza como pan, y he mezclado mi bebida con lloro,
10 Á causa de tu enojo y de tu ira; Pues me alzaste, y me has arrojado. a causa de tu enojo y de tu ira; porque me has alzado, y me has arrojado.
11 Mis días son como la sombra que se va; Y heme secado como la hierba. Mis días son como la sombra que declina; y yo, cual hierba, me he secado.
12 Mas tú, Jehová, permanecerás para siempre, Y tu memoria para generación y generación. Tú empero, oh Jehová, para siempre reinarás; y tu memoria durará de siglo en siglo.
13 Tú levantándote, tendrás misericordia de Sión; Porque el tiempo de tener misericordia de ella, porque el plazo es llegado. Te levantarás, y tendrás piedad de Sión; porque es tiempo de favorecerla, porque el plazo va llegando:
14 Porque tus siervos aman sus piedras, Y del polvo de ella tienen compasión. porque tus siervos aman sus piedras, y miran con afecto hasta su mismo polvo.
15 Entonces temerán las gentes el nombre de Jehová, Y todos los reyes de la tierra tu gloria; Así temerán las naciones el nombre de Jehová, y todos los reyes de la tierra tu gloria.
16 Por cuanto Jehová habrá edificado á Sión, Y en su gloria será visto; Porque Jehová habrá edificado a Sión; habrá aparecido en su gloria.
17 Habrá mirado á la oración de los solitarios, Y no habrá desechado el ruego de ellos. Habrá vuelto el rostro para escuchar la oración de los desamparados: pues no ha despreciado su oración.
18 Escribirse ha esto para la generación venidera: Y el pueblo que se criará, alabará á JAH. Esto será escrito para la postrera generación; y pueblos no creados aún alabarán a Jehová.
19 Porque miró de lo alto de su santuario; Jehová miró de los cielos á la tierra, Porque se ha inclinado desde su excelso santuario; Jehová ha mirado desde el cielo a la tierra;
20 Para oír el gemido de los presos, Para soltar á los sentenciados á muerte; para oír el gemido de los presos, y para soltar a los sentenciados a muerte;
21 Porque cuenten en Sión el nombre de Jehová, Y su alabanza en Jerusalem, para que publiquen en Sión el nombre de Jehová, y su alabanza en Jerusalem;
22 Cuando los pueblos se congregaren en uno, Y los reinos, para servir á Jehová. cuando los pueblos se congregaren en uno, y los reinos, para servir a Jehová.
23 Él afligió mi fuerza en el camino; Acortó mis días. Empero él ha debilitado mi fuerza en el camino; ha acortado mis días.
24 Dije: Dios mío, no me cortes en el medio de mis días: Por generación de generaciones son tus años. Digo: ¡Dios mío, no me lleves en la mitad de mis días; eternos son tus años!
25 Tú fundaste la tierra antiguamente, Y los cielos son obra de tus manos. En el principio fundaste la tierra, y los cielos son obra de tus manos:
26 Ellos perecerán, y tú permanecerás; Y todos ellos como un vestido se envejecerán; Como una ropa de vestir los mudarás, y serán mudados: ellos perecerán, más tú permanecerás; y todos ellos, como una vestidura, se gastarán; los mudarás como un manto, y serán mudados:
27 Mas tú eres el mismo, Y tus años no se acabarán. tú empero eres el mismo, y tus años nunca se acabarán.
28 Los hijos de tus siervos habitarán, Y su simiente será afirmada delante de ti. Los hijos de tus siervos habitarán seguros, y su linaje será estable delante de ti.
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