Biblia paralela
# | Moderna 1929 actualizada 2020 | Moderna 1929 | Reina-Valera revisada 1960 | Reina-Valera revisada 1909 |
---|---|---|---|---|
1 | MÁS vale un bocado de pan seco, y tranquilidad con él, que casa de banquetear continuo, donde reina la discordia. | Mejor es un bocado seco, y en paz, Que casa de contiendas llena de provisiones. |
MEJOR es un bocado seco, y en paz, Que la casa de contienda llena de víctimas. | |
2 | El siervo que se maneja bien tendrá dominio sobre el hijo que causa vergüenza, y en medio de los hermanos tendrá parte en la herencia. | El siervo prudente se enseñoreará del hijo que deshonra, Y con los hermanos compartirá la herencia. |
El siervo prudente se enseñoreará del hijo que deshonra, Y entre los hermanos partirá la herencia. | |
3 | El crisol es para la plata, y el hornillo para el oro; mas Jehová prueba los corazones. | El crisol para la plata, y la hornaza para el oro; Pero Jehová prueba los corazones. |
El crisol para la plata, y la hornaza para el oro: Mas Jehová prueba los corazones. | |
4 | El malhechor atiende a los labios inicuos, y el embustero presta oídos a la lengua maligna. | El malo está atento al labio inicuo; Y el mentiroso escucha la lengua detractora. |
El malo está atento al labio inicuo; Y el mentiroso escucha á la lengua detractora. | |
5 | Quien se mofa del pobre vitupera a su Hacedor; y aquel que se alegra de la calamidad ajena, no quedará sin castigo. | El que escarnece al pobre afrenta a su Hacedor; Y el que se alegra de la calamidad no quedará sin castigo. |
El que escarnece al pobre, afrenta á su Hacedor: Y el que se alegra en la calamidad, no quedará sin castigo. | |
6 | La corona de los ancianos son los hijos de los hijos; y la gloria de los hijos son sus padres. | Corona de los viejos son los nietos, Y la honra de los hijos, sus padres. |
Corona de los viejos son los hijos de los hijos; Y la honra de los hijos, sus padres. | |
7 | Al insensato no le está bien una lengua facunda; ni menos al príncipe una lengua mentirosa. | No conviene al necio la altilocuencia; ¡Cuánto menos al príncipe el labio mentiroso! |
No conviene al necio la altilocuencia: ¡Cuánto menos al príncipe el labio mentiroso! | |
8 | Piedra preciosa es la dádiva a los ojos de su dueño; a dondequiera que gira, tiene éxito. | Piedra preciosa es el soborno para el que lo practica; Adondequiera que se vuelve, halla prosperidad. |
Piedra preciosa es el cohecho en ojos de sus dueños: Á donde quiera que se vuelve, da prosperidad. | |
9 | El que cubre una transgresión busca la amistad; pero aquel que sigue mentando el asunto, separa de sí al amigo más íntimo. | El que cubre la falta busca amistad; Mas el que la divulga, aparta al amigo. |
El que cubre la prevaricación, busca amistad: Mas el que reitera la palabra, aparta al amigo. | |
10 | Una reprensión hace más mella en el hombre entendido, que cien azotes en el insensato. | La reprensión aprovecha al entendido, Más que cien azotes al necio. |
Aprovecha la reprensión en el entendido, Más que si cien veces hiriese en el necio. | |
11 | El inicuo no busca más que rebelión; por tanto un mensajero cruel será enviado contra él. | El rebelde no busca sino el mal, Y mensajero cruel será enviado contra él. |
El rebelde no busca sino mal; Y mensajero cruel será contra él enviado. | |
12 | Mejor es el encontrarse alguno con una osa a quien le han robado los cachorros, que no con un insensato metido en sus sandeces. | Mejor es encontrarse con una osa a la cual han robado sus cachorros, Que con un fatuo en su necedad. |
Mejor es se encuentre un hombre con una osa á la cual han robado sus cachorros, Que con un fatuo en su necedad. | |
13 | Aquel que devuelve el mal por el bien, de su casa nunca se apartará el mal. | El que da mal por bien, No se apartará el mal de su casa. |
El que da mal por bien, No se apartará el mal de su casa. | |
14 | El comienzo de la discordia es como el soltarse las aguas; déjese, pues, la disputa, antes que se cante la riña. | El que comienza la discordia es como quien suelta las aguas; Deja, pues, la contienda, antes que se enrede. |
El que comienza la pendencia es como quien suelta las aguas: Deja pues la porfía, antes que se enmarañe. | |
15 | El que justifica al malo, y el que condena al justo, ambos a dos son abominación a Jehová | El que justifica al impío, y el que condena al justo, Ambos son igualmente abominación a Jehová. |
El que justifica al impío, y el que condena al justo, Ambos á dos son abominación á Jehová. | |
16 | ¿Por qué se pone el precio en mano del insensato, para comprar la sabiduría, si no tiene buen sentido? | ¿De qué sirve el precio en la mano del necio para comprar sabiduría, No teniendo entendimiento? |
¿De qué sirve el precio en la mano del necio para comprar sabiduría, No teniendo entendimiento? | |
17 | El amigo ama en todo tiempo, y el hermano es nacido para la adversidad. | En todo tiempo ama el amigo, Y es como un hermano en tiempo de angustia. |
En todo tiempo ama el amigo; Y el hermano para la angustia es nacido. | |
18 | Un hombre falto de buen sentido, da presto la mano, y sale por fiador en presencia de su amigo. | El hombre falto de entendimiento presta fianzas, Y sale por fiador en presencia de su amigo. |
El hombre falto de entendimiento toca la mano, Fiando á otro delante de su amigo. | |
19 | Quien ama la discordia ama la transgresión: y el que ensalza su portada busca la destrucción. | El que ama la disputa, ama la transgresión; Y el que abre demasiado la puerta busca su ruina. |
La prevaricación ama el que ama pleito; Y el que alza su portada, quebrantamiento busca. | |
20 | El falaz de corazón nunca hallará el bien; y el doloso de lengua caerá en el mal. | El perverso de corazón nunca hallará el bien, Y el que revuelve con su lengua caerá en el mal. |
El perverso de corazón nunca hallará bien: Y el que revuelve con su lengua, caerá en mal. | |
21 | Quien engendra a un insensato es para pesar suyo, y el padre del insensato no tiene alegría. | El que engendra al insensato, para su tristeza lo engendra; Y el padre del necio no se alegrará. |
El que engendra al necio, para su tristeza lo engendra: Y el padre del fatuo no se alegrará. | |
22 | El corazón alegre es una buena medicina; mas el espíritu quebrantado reseca los huesos. | El corazón alegre constituye buen remedio; Mas el espíritu triste seca los huesos. |
El corazón alegre produce buena disposición: Mas el espíritu triste seca los huesos. | |
23 | El inicuo toma de su seno una dádiva para pervertir los trámites del juicio. | El impío toma soborno del seno Para pervertir las sendas de la justicia. |
El impío toma dádiva del seno Para pervertir las sendas del derecho. | |
24 | La sabiduría está ante el rostro del hombre entendido; pero los ojos del insensato vagan por los cabos de la tierra. | En el rostro del entendido aparece la sabiduría; Mas los ojos del necio vagan hasta el extremo de la tierra. |
En el rostro del entendido aparece la sabiduría: Mas los ojos del necio vagan hasta el cabo de la tierra. | |
25 | El hijo insensato es el enojo de su padre, y la amargura de aquella que le dió a luz. | El hijo necio es pesadumbre de su padre, Y amargura a la que lo dio a luz. |
El hijo necio es enojo á su padre, Y amargura á la que lo engendró. | |
26 | También, no es bueno castigar a los justos, ni herir a los nobles a causa de su rectitud. | Ciertamente no es bueno condenar al justo, Ni herir a los nobles que hacen lo recto. |
Ciertamente no es bueno condenar al justo, Ni herir á los príncipes que hacen lo recto. | |
27 | El que ahorra sus palabras tiene inteligencia; y el que es de espíritu sereno es hombre de entendimiento. | El que ahorra sus palabras tiene sabiduría; De espíritu prudente es el hombre entendido. |
Detiene sus dichos el que tiene sabiduría: De prudente espíritu es el hombre entendido. | |
28 | Aun el necio, cuando calla, es tenido por sabio, y cuando cierra los labios pasa por hombre entendido. | Aun el necio, cuando calla, es contado por sabio; El que cierra sus labios es entendido. |
Aun el necio cuando calla, es contado por sabio: El que cierra sus labios es entendido. |