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¡VUELVE, oh Israel, a Jehová y tu Dios, porque has caído por tu iniquidad! |
Vuelve, oh Israel, a Jehová tu Dios; porque por tu pecado has caído. |
CONVIÉRTETE, oh Israel, á Jehová tu Dios: porque por tu pecado has caído. |
2 |
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¡Tomad con vosotros palabras, y volveos a Jehová! decidle: ¡Quita toda nuestra iniquidad, y acéptanos bondadosamente; así te tributaremos los sacrificios de nuestros labios! |
Llevad con vosotros palabras de súplica, y volved a Jehová, y decidle: Quita toda iniquidad, y acepta el bien, y te ofreceremos la ofrenda de nuestros labios. |
Tomad con vosotros palabras, y convertíos á Jehová, y decidle: Quita toda iniquidad, y acepta el bien, y daremos becerros de nuestros labios. |
3 |
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Asiria no nos ha de salvar; ya no montaremos en caballos; no diremos más a las hechuras de nuestras mismas manos: dioses nuestros sois: porque en ti halla misericordia el huérfano. |
No nos librará el asirio; no montaremos en caballos, ni nunca más diremos a la obra de nuestras manos: Dioses nuestros; porque en ti el huérfano alcanzará misericordia. |
No nos librará Assur; no subiremos sobre caballos, ni nunca más diremos á la obra de nuestras manos: Dioses nuestros: porque en ti el huérfano alcanzará misericordia. |
4 |
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Yo sanaré sus apostasías; los amaré de pura gracia: porque mi ira se ha apartado ya de ellos. |
Yo sanaré su rebelión, los amaré de pura gracia; porque mi ira se apartó de ellos. |
Yo medicinaré su rebelión, amarélos de voluntad: porque mi furor se apartó de ellos. |
5 |
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Yo seré como el rocío a Israel; echará flores como el lirio, y ahondará sus raíces como cedro del Líbano. |
Yo seré a Israel como rocío; él florecerá como lirio, y extenderá sus raíces como el Líbano. |
Yo seré á Israel como rocío; él florecerá como lirio, y extenderá sus raíces como el Líbano. |
6 |
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Sus ramas se extenderán; su hermosura también será como la del olivo, y su olor como la fragrancia del Líbano. |
Se extenderán sus ramas, y será su gloria como la del olivo, y perfumará como el Líbano. |
Extenderse han sus ramos, y será su gloria como la de la oliva, y olerá como el Líbano. |
7 |
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Volverán del cautiverio los que se sentaban bajo su sombra, serán revivificados como el trigo, y florecerán como la vid, y su renombre será como el del vino del Líbano. |
Volverán y se sentarán bajo su sombra; serán vivificados como trigo, y florecerán como la vid; su olor será como de vino del Líbano. |
Volverán, y se sentarán bajo de su sombra: serán vivificados como trigo, y florecerán como la vid: su olor, como de vino del Líbano. |
8 |
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Efraim dirá: ¿Qué tengo yo ya que ver con los ídolos? Yo le he respondido, y le observaré; le seré como abeto verde procedente de mí es hallado tu fruto. |
Efraín dirá: ¿Qué más tendré ya con los ídolos? Yo lo oiré, y miraré; yo seré a él como la haya verde; de mí será hallado tu fruto. |
Ephraim dirá: ¿Qué más tendré ya con los ídolos? Yo lo oiré, y miraré; yo seré á él como la haya verde: de mí será hallado tu fruto. |
9 |
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¿Quién es el sabio que entenderá estas cosas, el prudente que las conocerá? porque rectos son los caminos de Jehová, y los justos andarán en ellos; mas los transgresores, en ellos caerán. |
¿Quién es sabio para que entienda esto, y prudente para que lo sepa? Porque los caminos de Jehová son rectos, y los justos andarán por ellos; mas los rebeldes caerán en ellos. |
¿Quién es sabio para que entienda esto, y prudente para que los sepa? Porque los caminos del Jehová son derechos, y los justos andarán por ellos: mas los rebeldes en ellos caerán. |