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ENTONCES se reunió todo el pueblo como un solo hombre en la plaza que está al frente de la puerta de las Aguas; y dijeron a Esdras, escriba, que trajese el Libro de la Ley de Moisés, que Jehová había prescrito a Israel. |
y se juntó todo el pueblo como un solo hombre en la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, y dijeron a Esdras el escriba que trajese el libro de la ley de Moisés, la cual Jehová había dado a Israel. |
Y JUNTÓSE todo el pueblo como un solo hombre en la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, y dijeron á Esdras el escriba, que trajese el libro de la ley de Moisés, la cual mandó Jehová á Israel. |
2 |
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Por lo cual Esdras, sacerdote, trajo la Ley delante de la Asamblea, así de hombres como de mujeres y todos los niños que tenían inteligencia para escuchar, el día primero del mes séptimo; |
Y el sacerdote Esdras trajo la ley delante de la congregación, así de hombres como de mujeres y de todos los que podían entender, el primer día del mes séptimo. |
Y Esdras el sacerdote, trajo la ley delante de la congregación, así de hombres como de mujeres, y de todo entendido para escuchar, el primer día del mes séptimo. |
3 |
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y leyó en él delante de la plaza que está al frente de la puerta de las Aguas, desde el alba hasta el medio día, delante de los hombres y las mujeres y los niños que tenían inteligencia; y los oídos del pueblo estaban atentos al Libro de la Ley. |
Y leyó en el libro delante de la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, desde el alba hasta el mediodía, en presencia de hombres y mujeres y de todos los que podían entender; y los oídos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la ley. |
Y leyó en el libro delante de la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, desde el alba hasta el medio día, en presencia de hombres y mujeres y entendidos; y los oídos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la ley. |
4 |
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Y el escriba Esdras se puso en pie sobre un púlpito de madera que habían hecho para este fin; y estaban junto a él Matitías, y Sema, y Anaya, y Urías, y Helcías, y Maasías, a su derecha; y a su izquierda Pedaya, y Misael, y Malquías, y Hasum, y Hasbadana, Zacarías y Mesullam. |
Y el escriba Esdras estaba sobre un púlpito de madera que habían hecho para ello, y junto a él estaban Matatías, Sema, Anías, Urías, Hilcías y Maasías a su mano derecha; y a su mano izquierda, Pedaías, Misael, Malquías, Hasum, Hasbadana, Zacarías y Mesulam. |
Y Esdras el escriba estaba sobre un púlpito de madera, que habían hecho para ello; y junto á él estaban Mathithías, y Sema, y Anías, y Urías, é Hilcías, y Maasías, á su mano derecha; y á su mano izquierda, Pedaía, Misael, y Malchîas, y Hasum, y Hasbedana, Zachârías, y Mesullam. |
5 |
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Entonces Esdras abrió el libro, a vista de todo el pueblo (porque estaba elevado sobre todo el pueblo); y luego que lo abrió, todo el pueblo se puso en pie. |
Abrió, pues, Esdras el libro a ojos de todo el pueblo, porque estaba más alto que todo el pueblo; y cuando lo abrió, todo el pueblo estuvo atento. |
Abrió pues Esdras el libro á ojos de todo el pueblo, (porque estaba más alto que todo el pueblo); y como lo abrió, todo el pueblo estuvo atento. |
6 |
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En seguida bendijo Esdras a Jehová, el gran Dios. Y respondió todo el pueblo: ¡Amén! ¡amén! levantando las manos. Luego inclinaron las cabezas, y adoraron a Jehová, rostros a tierra. |
Bendijo entonces Esdras a Jehová, Dios grande. Y todo el pueblo respondió: ¡Amén! ¡Amén! alzando sus manos; y se humillaron y adoraron a Jehová inclinados a tierra. |
Bendijo entonces Esdras á Jehová, Dios grande. Y todo el pueblo respondió, ¡Amén! ¡Amén! alzando sus manos; y humilláronse, y adoraron á Jehová inclinados á tierra. |
7 |
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Y Jesúa, y Bani, y Serebías, y Jamín, Acub, Sabetai, Hodías, Maasías, Kelita, Azarías, Josabad, Hanán, Pelaya, y otros levitas, se ocupaban en explicar al pueblo la ley; y el pueblo permaneció en donde estaba. |
Y los levitas Jesúa, Bani, Serebías, Jamín, Acub, Sabetai, Hodías, Maasías, Kelita, Azarías, Jozabed, Hanán y Pelaía, hacían entender al pueblo la ley; y el pueblo estaba atento en su lugar. |
Y Jesuá, y Bani, y Serebías, Jamín, Accub, Sabethai, Odías, Maasías, Celita, Azarías, Jozabed, Hanán, Pelaía, Levitas, hacían entender al pueblo la ley: y el pueblo estaba en su lugar. |
8 |
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Pues leyeron en el libro, en la ley de Dios, distintamente, y aclaraban el sentido; de modo que el pueblo entendió la lectura. |
Y leían en el libro de la ley de Dios claramente, y ponían el sentido, de modo que entendiesen la lectura. |
Y leían en el libro de la ley de Dios claramente, y ponían el sentido, de modo que entendiesen la lectura. |
9 |
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Entonces Nehemías, que era gobernador, con Esdras, sacerdote y escriba, y los levitas que hacían entender al pueblo, dijeron a todo el pueblo: Hoy es día santo a Jehová vuestro Dios; no estéis tristes, ni lloréis; porque todo el pueblo lloraba al oír las palabras de la ley. |
Y Nehemías el gobernador, y el sacerdote Esdras, escriba, y los levitas que hacían entender al pueblo, dijeron a todo el pueblo: Día santo es a Jehová nuestro Dios; no os entristezcáis, ni lloréis; porque todo el pueblo lloraba oyendo las palabras de la ley. |
Y Nehemías el Tirsatha, y el sacerdote Esdras, escriba, y los Levitas que hacían entender al pueblo, dijeron á todo el pueblo: Día santo es á Jehová nuestro Dios; no os entristezcáis, ni lloréis: porque todo el pueblo lloraba oyendo las palabras de la ley. |
10 |
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Les dijo también: ¡Id, comed carnes gordas, y bebed vinos sabrosos; y enviad porciones a aquellos para quienes nadie ha hecho provisión! porque este día es santo a nuestro Señor; no os aflijáis pues; porque el gozo de Jehová os da esfuerzo. |
Luego les dijo: Id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad porciones a los que no tienen nada preparado; porque día santo es a nuestro Señor; no os entristezcáis, porque el gozo de Jehová es vuestra fuerza. |
Díjoles luego: Id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad porciones á los que no tienen prevenido; porque día santo es á nuestro Señor: y no os entristezcáis, porque el gozo de Jehová es vuestra fortaleza. |
11 |
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Mientras tanto los levitas estaban acallando a todo el pueblo, diciendo: ¡Silencio! porque hoy es día santo; ¡no debéis estar tristes! |
Los levitas, pues, hacían callar a todo el pueblo, diciendo: Callad, porque es día santo, y no os entristezcáis. |
Los Levitas pues, hacían callar á todo el pueblo, diciendo: Callad, que es día santo, y no os entristezcáis. |
12 |
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De manera que se fué todo el pueblo a comer y a beber, y a enviar porciones a los demás, y a hacer grandes alegrías; por haber entendido las palabras que se les habían enseñado. |
Y todo el pueblo se fue a comer y a beber, y a obsequiar porciones, y a gozar de grande alegría, porque habían entendido las palabras que les habían enseñado. |
Y todo el pueblo se fué á comer y á beber, y á enviar porciones, y á gozar de grande alegría, porque habían entendido las palabras que les habían enseñado. |
13 |
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Y al segundo día fueron reunidas las cabezas de las casas paternas de todo el pueblo, los sacerdotes y los levitas, en derredor de Esdras el escriba; y eso, para enterarse más de las palabras de la ley. |
Al día siguiente se reunieron los cabezas de las familias de todo el pueblo, sacerdotes y levitas, a Esdras el escriba, para entender las palabras de la ley. |
Y el día siguiente se juntaron los príncipes de las familias de todo el pueblo, sacerdotes, y Levitas, á Esdras escriba, para entender las palabras de la ley. |
14 |
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Y hallaron escrito en la ley cómo había mandado Jehová, por conducto de Moisés, que habitasen los hijos de Israel debajo de enramadas durante la fiesta del mes séptimo. |
Y hallaron escrito en la ley que Jehová había mandado por mano de Moisés, que habitasen los hijos de Israel en tabernáculos en la fiesta solemne del mes séptimo; |
Y hallaron escrito en la ley que Jehová había mandado por mano de Moisés, que habitasen los hijos de Israel en cabañas en la solemnidad del mes séptimo; |
15 |
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Y acordaron de publicarlo, y de hacer pasar pregón por todas sus ciudades, y por Jerusalem, diciendo: ¡Salid al monte, y traed ramas de olivo, y ramas de oleastro, y ramas de arrayán, y ramas de palma, y ramas de árboles frondosos, para hacer enramadas, conforme a lo escrito! |
y que hiciesen saber, y pasar pregón por todas sus ciudades y por Jerusalén, diciendo: Salid al monte, y traed ramas de olivo, de olivo silvestre, de arrayán, de palmeras y de todo árbol frondoso, para hacer tabernáculos, como está escrito.a |
Y que hiciesen saber, y pasar pregón por todas sus ciudades y por Jerusalem, diciendo: Salid al monte, y traed ramos de oliva, y ramos de pino, y ramos de arrayán, y ramos de palmas, y ramos de todo árbol espeso, para hacer cabañas como está escrito. |
16 |
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En efecto, salió el pueblo, y las trajeron, y se hicieron enramadas, cada cual sobre el terrado de su casa y en los patios, y en los atrios de la Casa de Dios, y en la plaza de la puerta de las Aguas, y en la plaza de la puerta de Efraim. |
Salió, pues, el pueblo, y trajeron ramas e hicieron tabernáculos, cada uno sobre su terrado, en sus patios, en los patios de la casa de Dios, en la plaza de la puerta de las Aguas, y en la plaza de la puerta de Efraín. |
Salió pues el pueblo, y trajeron, é hiciéronse cabañas, cada uno sobre su terrado, y en sus patios, y en los patios de la casa de Dios, y en la plaza de la puerta de las Aguas, y en la plaza de la puerta de Ephraim. |
17 |
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Por manera que toda la Asamblea de los que habían vuelto del cautiverio se hicieron enramadas; pues desde los días de Jesúa hijo de Nun hasta aquel día no habían hecho así los hijos de Israel. Y hubo muy grande gozo. |
Y toda la congregación que volvió de la cautividad hizo tabernáculos, y en tabernáculos habitó; porque desde los días de Josué hijo de Nun hasta aquel día, no habían hecho así los hijos de Israel. Y hubo alegría muy grande. |
Y toda la congregación que volvió de la cautividad hicieron cabañas, y en cabañas habitaron; porque desde los días de Josué hijo de Nun hasta aquel día, no habían hecho así los hijos de Israel. Y hubo alegría muy grande. |
18 |
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Y se leyó en el Libro de la Ley de Dios de día en día, desde el día primero hasta el día postrero. Y así celebraron la fiesta por siete días; y al octavo día fué la asamblea más solemne, conforme al reglamento. |
Y leyó Esdras en el libro de la ley de Dios cada día, desde el primer día hasta el último; e hicieron la fiesta solemne por siete días, y el octavo día fue de solemne asamblea, según el rito. |
Y leyó Esdras en el libro de la ley de Dios cada día, desde el primer día hasta el postrero; é hicieron la solemnidad por siete días, y al octavo día congregación, según el rito. |