Biblia paralela

# Moderna 1929 actualizada 2020 close Moderna 1929 close Reina-Valera revisada 1960 close Reina-Valera revisada 1909 close
1 YO soy una rosa de Sarón, una azucena de los valles. Yo soy la rosa de Sarón,
Y el lirio de los valles.
YO soy la rosa de Sarón, Y el lirio de los valles.
2 Como la azucena entre los espinos, así es mi amiga entre las doncellas. Como el lirio entre los espinos,
Así es mi amiga entre las doncellas.
Como el lirio entre las espinas, Así es mi amiga entre las doncellas.
3 Como el manzano entre los árboles de la selva, así es mi amado entre los mancebos. Debajo de su sombra me senté con gran deleite, y su fruto fué dulce a mi paladar. Como el manzano entre los árboles silvestres,
Así es mi amado entre los jóvenes;
Bajo la sombra del deseado me senté,
Y su fruto fue dulce a mi paladar.
Como el manzano entre los árboles silvestres, Así es mi amado entre los mancebos: Bajo la sombra del deseado me senté, Y su fruto fué dulce en mi paladar.
4 ¡Me introdujo en su casa de banquete, y su bandera sobre mí era amor! Me llevó a la casa del banquete,
Y su bandera sobre mí fue amor.
Llevóme á la cámara del vino, Y su bandera sobre mí fué amor.
5 ¡Sustentadme con pasas, confortadme con manzanas, porque desfallezco de amor! Sustentadme con pasas, confortadme con manzanas;
Porque estoy enferma de amor.
Sustentadme con frascos, corroboradme con manzanas; Porque estoy enferma de amor.
6 ¡Esté es su izquierda debajo de mi cabeza, y me abrace su derecha! Su izquierda esté debajo de mi cabeza,
Y su derecha me abrace.
Su izquierda esté debajo de mi cabeza, Y su derecha me abrace.
7 ¡Yo os conjuro, oh hijas de Jerusalem, por las gacelas, y por las ciervas del campo, que no despertéis y que no quitéis el sueño a mi amada, hasta que ella quiera! Yo os conjuro, oh doncellas de Jerusalén,
Por los corzos y por las ciervas del campo,
Que no despertéis ni hagáis velar al amor,
Hasta que quiera.
Yo os conjuro, oh doncellas de Jerusalem, Por las gamas y por las ciervas del campo, Que no despertéis ni hagáis velar al amor Hasta que quiera.
8 ¡Es la voz de mi amado! ¡He aquí que viene saltando sobre los montes, y brincando sobre los collados! ¡La voz de mi amado! He aquí él viene
Saltando sobre los montes,
Brincando sobre los collados.
¡La voz de mi amado! He aquí él viene Saltando sobre los montes, brincando sobre los collados.
9 ¡Mi amado es como el corzo, o como el cervatillo! ¡He aquí que está ya junto a nuestra pared; mira por las ventanas, atisba por entre las celosías! Mi amado es semejante al corzo,
O al cervatillo.
Helo aquí, está tras nuestra pared,
Mirando por las ventanas,
Atisbando por las celosías.
Mi amado es semejante al gamo, ó al cabrito de los ciervos. Helo aquí, está tras nuestra pared, Mirando por las ventanas, Mostrándose por las rejas.
10 Habla mi amado, y me dice: ¡Levántate, amiga mía, hermosa mía, y vente conmigo! Mi amado habló, y me dijo:
Levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y ven.
Mi amado habló, y me dijo: Levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y vente.
11 Porque ha pasado ya el invierno; la lluvia se ha acabado y se ha ido; Porque he aquí ha pasado el invierno,
Se ha mudado, la lluvia se fue;
Porque he aquí ha pasado el invierno, Hase mudado, la lluvia se fué;
12 las flores se ven en la tierra, el tiempo del cantar de las aves ha llegado, y la voz de la tórtola se oye en nuestra tierra; Se han mostrado las flores en la tierra,
El tiempo de la canción ha venido,
Y en nuestro país se ha oído la voz de la tórtola.
Hanse mostrado las flores en la tierra, El tiempo de la canción es venido, Y en nuestro país se ha oído la voz de la tórtola;
13 la higuera va madurando sus brevas, y las vides, en cierne, despiden su fragancia: ¡levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y vente conmigo! La higuera ha echado sus higos,
Y las vides en cierne dieron olor;
Levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y ven.
La higuera ha echado sus higos, Y las vides en cierne Dieron olor: Levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y vente.
14 ¡Paloma mía, tú que anidas en las grietas de la peña, en los escondrijos del precipicio, déjame ver tu rostro, déjame oír tu voz; porque tu voz es dulce, y tu rostro es gracioso! Paloma mía, que estás en los agujeros de la peña, en lo escondido de escarpados parajes,
Muéstrame tu rostro, hazme oír tu voz;
Porque dulce es la voz tuya, y hermoso tu aspecto.
Paloma mía, que estás en los agujeros de la peña, en lo escondido de escarpados parajes, Muéstrame tu rostro, hazme oír tu voz; Porque dulce es la voz tuya, y hermoso tu aspecto.
15 Cogednos las zorras, las zorrillas que asuelan las viñas; porque nuestras viñas están en cierne. Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas;
Porque nuestras viñas están en cierne.
Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan á perder las viñas; Pues que nuestras viñas están en cierne.
16 ¡Mi amado es mío, y yo soy de él! apacienta su rebaño en medio de los lirios. Mi amado es mío, y yo suya;
Él apacienta entre lirios.
Mi amado es mío, y yo suya; Él apacienta entre lirios.
17 ¡Hasta que refresque el día y declinen las sombras de la tarde, vuelve, oh amado mío, sé como el corzo, o como el cervatillo, sobre las montañas escarpadas! Hasta que apunte el día, y huyan las sombras,
Vuélvete, amado mío; sé semejante al corzo, o como el cervatillo
Sobre los montes de Beter.
Hasta que apunte el día, y huyan las sombras, Tórnate, amado mío; sé semejante al gamo, ó al cabrito de los ciervos, Sobre los montes de Bether.
navigate_before Cantar de los Cantares 1 Cantar de los Cantares 3 navigate_next
arrow_upward Arriba