Biblia paralela

# Reina-Valera revisada 1909 close Moderna 1929 close
1 Y RESPONDIÓ Job, y dijo: A LO cual respondió Job, y dijo:
2 ¿Hasta cuándo angustiaréis mi alma, Y me moleréis con palabras? ¿Hasta cuándo vejaréis mi alma, y querréis molerme con palabras?
3 Ya me habéis vituperado diez veces: ¿No os avergonzáis de descomediros delante de mí? Estas diez veces me habéis vituperado, y no os avergonzáis de echarme injurias.
4 Sea así que realmente haya yo errado, Conmigo se quedará mi yerro. Pues sea que haya realmente yo errado, conmigo mismo queda mi error.
5 Mas si vosotros os engrandeciereis contra mí, Y adujereis contra mí mi oprobio, Si en verdad, queréis engrandeceros contra mí, y alegar contra mí mi deshonra,
6 Sabed ahora que Dios me ha trastornado, Y traído en derredor su red sobre mí. sabed entonces que Dios ha pervertido mi derecho, y me ha envuelto en su red.
7 He aquí yo clamaré agravio, y no seré oído: Daré voces, y no habrá juicio. He aquí que alzo el grito por la violencia que se me hace, mas no soy atendido; clamo por auxilio, pero no hay para mí aunque lo suplique por justicia.
8 Cercó de vallado mi camino, y no pasaré; Y sobre mis veredas puso tinieblas. Él ha cerrado mi camino con vallado, de modo que no pueda pasar, y mis veredas ha cubierto de tinieblas.
9 Hame despojado de mi gloria, Y quitado la corona de mi cabeza. De mi gloria me ha despojado, y ha quitado la corona de sobre mi cabeza.
10 Arruinóme por todos lados, y perezco; Y ha hecho pasar mi esperanza como árbol arrancado. Me ha derribado por todos lados, y ya me voy; pues ha arrancado, como árbol, mi esperanza.
11 É hizo inflamar contra mí su furor, Y contóme para sí entre sus enemigos. Enciende también contra mí su ira, y me reputa para consigo como uno de sus adversarios.
12 Vinieron sus ejércitos á una, y trillaron sobre mí su camino, Y asentaron campo en derredor de mi tienda. Todas juntas avanzan sus tropas; allanan contra mí su camino, y asientan sus reales en derredor de mi tienda.
13 Hizo alejar de mí mis hermanos, Y positivamente se extrañaron de mí mis conocidos. A mis hermanos los ha alejado de mí, y mis conocidos se me han hecho del todo extraños.
14 Mis parientes se detuvieron, Y mis conocidos se olvidaron de mí. Me han faltado mis parientes, y mis amigos familiares se han olvidado de mí.
15 Los moradores de mi casa y mis criadas me tuvieron por extraño; Forastero fuí yo en sus ojos. Los que moran en mi casa, y hasta mis criadas, me tienen por un extraño; cual extranjero he venido a ser en su vista.
16 Llamé á mi siervo, y no respondió; De mi propia boca le suplicaba. Llamo a mi siervo, y no me responde, aunque con mi misma boca me ponga a rogarle.
17 Mi aliento vino á ser extraño á mi mujer, Aunque por los hijos de mis entrañas le rogaba. Mi hálito le es odioso a mi mujer, aunque haga mis súplicas por los hijos de mis entrañas.
18 Aun los muchachos me menospreciaron: En levantándome, hablaban contra mí. Hasta los muchachitos me tratan con desprecio; al ponerme yo en pie, hablan contra mí.
19 Todos mis confidentes me aborrecieron; Y los que yo amaba, se tornaron contra mí. Me abominan todos mis íntimos amigos, y los que yo amaba se han vuelto contra mí.
20 Mi cuero y mi carne se pegaron á mis huesos; Y he escapado con la piel de mis dientes. Mis huesos se pegan a mi carne gastada y a mi piel; y tan solo me he librado con la piel de mis dientes.
21 Oh vosotros mis amigos, tened compasión de mí, tened compasión de mí; Porque la mano de Dios me ha tocado. ¡Tened compasión de mí, tened compasión de mí, vosotros mis amigos, porque la mano de Dios me ha tocado!
22 ¿Por qué me perseguís como Dios, Y no os hartáis de mis carnes? ¿Por qué queréis perseguirme vosotros como Dios, y ni aun de mi carne os saciáis?
23 ¡Quién diese ahora que mis palabras fuesen escritas! ¡Quién diese que se escribieran en un libro! ¡Quién diera que fuesen ahora escritas mis palabras! ¡quién diera que se escribieran en un libro;
24 ¡Que con cincel de hierro y con plomo Fuesen en piedra esculpidas para siempre! que con cincel de hierro y con plomo fuesen para siempre grabadas en una peña!
25 Yo sé que mi Redentor vive, Y al fin se levantará sobre el polvo: Pues yo sé que mi Redentor vive, y que en lo venidero ha de levantarse sobre la tierra;
26 Y después de deshecha esta mi piel, Aun he de ver en mi carne á Dios; y después que los gusanos hayan despedazado esta mi piel, aun desde mi carne he de ver a Dios;
27 Al cual yo tengo de ver por mí, Y mis ojos lo verán, y no otro, Aunque mis riñones se consuman dentro de mí. a quien yo tengo de ver por mí mismo, y mis ojos le mirarán; y ya no como a un extraño. ¡Desfallece mi alma dentro de mí con ardiente anhelo!
28 Mas debierais decir: ¿Por qué lo perseguimos? Ya que la raíz del negocio en mí se halla. Ya que seguís diciendo: ¿Cómo podremos perseguirle, y qué base de acusación hallaremos contra él?
29 Temed vosotros delante de la espada; Porque sobreviene el furor de la espada á causa de las injusticias, Para que sepáis que hay un juicio. recelaos de la espada; porque la malicia atrae los castigos de la espada; para que tengáis presente que hay un juicio venidero.
navigate_before Job 18 Job 20 navigate_next
arrow_upward Arriba