Biblia paralela

# Reina-Valera revisada 1909 close Moderna 1929 close
1 Y ACONTECIÓ que entre tanto que Apolos estaba en Corinto, Pablo, andadas las regiones superiores, vino á Éfeso, y hallando ciertos discípulos, Y MIENTRAS Apolos estaba en Corinto, sucedió que Pablo, habiendo pasado por las regiones altas, llegó a Efeso; y hallando a ciertos discípulos,
2 Díjoles: ¿Habéis recibido el Espíritu Santo después que creísteis? Y ellos le dijeron: Antes ni aun hemos oído si hay Espíritu Santo. les dijo: ¿Recibísteis el Espíritu Santo cuando creísteis? Y le respondieron: Al contrario, ni siquiera hemos oído, que hay Espíritu Santo.
3 Entonces dijo: ¿En qué pues sois bautizados? Y ellos dijeron: En el bautismo de Juan. Y él dijo: ¿En qué pues fuísteis bautizados? Y dijeron: En el bautismo de Juan.
4 Y dijo Pablo: Juan bautizó con bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en el que había de venir después de él, es á saber, en Jesús el Cristo. Y dijo Pablo: Juan bautizó con bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en aquel que había de venir después de él, es decir, en Jesús.
5 Oído que hubieron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús. Y cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesucristo.
6 Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban. Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas extrañas, y profetizaban.
7 Y eran en todos como unos doce hombres. Y eran todos los hombres unos doce.
8 Y entrando él dentro de la sinagoga, hablaba libremente por espacio de tres meses, disputando y persuadiendo del reino de Dios. Y entrando en la sinagoga, habló animosamente por espacio de tres meses, razonando y persuadiendo en lo relativo al reino de Dios.
9 Mas endureciéndose algunos y no creyendo, maldiciendo el Camino delante de la multitud, apartándose Pablo de ellos separó á los discípulos, disputando cada día en la escuela de un cierto Tyranno. Mas cuando algunos se endurecieron y rehusaron creer, hablando mal del Camino delante de la multitud, apartóse Pablo de ellos, y separó a los discípulos, razonando diariamente en la escuela de Tirano.
10 Y esto fué por espacio de dos años; de manera que todos los que habitaban en Asia, Judíos y Griegos, oyeron la palabra del Señor Jesús. Y esto sucedió por espacio de dos años, de modo que todos los que habitaban en la provincia de Asia oyeron la palabra del Señor, así judíos como griegos.
11 Y hacía Dios singulares maravillas por manos de Pablo: Y obró Dios milagros extraordinarios por manos de Pablo,
12 De tal manera que aun se llevaban sobre los enfermos los sudarios y los pañuelos de su cuerpo, y las enfermedades se iban de ellos, y los malos espíritus salían de ellos. de tal manera que de sobre su cuerpo se les llevaron a los enfermos pañuelos y delantales; con lo cual se apartaron de ellos las enfermedades, y salieron los espíritus malignos.
13 Y algunos de los Judíos, exorcistas vagabundos, tentaron á invocar el nombre del Señor Jesús sobre los que tenían espíritus malos, diciendo: Os conjuro por Jesús, el que Pablo predica. Empero ciertos de los exorcistas ambulantes, judíos, tomaron sobre sí la autoridad de invocar sobre los que tenían, espíritus malignos, el nombre del Señor Jesús, diciendo: ¡Os conjuro por Jesús a quien Pablo predica!
14 Y había siete hijos de un tal Sceva, Judío, príncipe de los sacerdotes, que hacían esto. Y había siete hijos de cierto judío llamado Sceva, jefe de los sacerdotes, que tal hicieron.
15 Y respondiendo el espíritu malo, dijo: Á Jesús conozco y sé quién es Pablo: mas vosotros ¿quiénes sois? Y respondió el espíritu maligno, y les dijo: A Jesús conozco, y sé quien es Pablo; mas vosotros ¿quiénes sois?
16 Y el hombre en quien estaba el espíritu malo, saltando en ellos, y enseñoreándose de ellos, pudo más que ellos, de tal manera que huyeron de aquella casa desnudos y heridos. Y saltando sobre ellos el hombre en quien estaba el espíritu inmundo, señoreóse de ellos, y prevaleció contra ellos, de tal suerte que huyeron de aquella casa desnudos y heridos.
17 Y esto fué notorio á todos, así Judíos como Griegos, los que habitaban en Éfeso: y cayó temor sobre todos ellos, y era ensalzado el nombre del Señor Jesús. Y esto fué notorio a todos, así judíos como griegos, que habitaban en Efeso; y cayó temor sobre todos ellos; y el nombre del Señor Jesús fué engrandecido.
18 Y muchos de los que habían creído, venían, confesando y dando cuenta de sus hechos. Muchos también de los que habían creído, venían confesando y publicando sus obras.
19 Asimismo muchos de los que habían practicado vanas artes, trajeron los libros, y los quemaron delante de todos; y echada la cuenta del precio de ellos, hallaron ser cincuenta mil denarios. Y no pocos de los que habían usado de artes mágicas, juntando sus libros, los quemaron delante de todos; y contando el precio de ellos, hallaron que montaba a cincuenta mil dracmas de plata
20 Así crecía poderosamente la palabra del Señor, y prevalecía. ¡Con tal poder creció la palabra del Señor, y prevaleció!
21 Y acabadas estas cosas, se propuso Pablo en espíritu partir á Jerusalem, después de andada Macedonia y Acaya, diciendo: Después que hubiere estado allá me será menester ver también á Roma. Y pasadas estas cosas, Pablo se propuso en su espíritu, que habiendo recorrido a Macedonia y a Acaya, partiría para Jerusalem; diciendo: Después que haya estado allí, es preciso que yo vea a Roma también.
22 Y enviando á Macedonia á dos de los que le ayudaban, Timoteo y Erasto, él se estuvo por algún tiempo en Asia. Y habiendo enviado a Macedonia a dos de los que le asistían, a saber, Timoteo y Erasto, él mismo se detuvo todavía algún tiempo en Asia.
23 Entonces hubo un alboroto no pequeño acerca del Camino. Y por aquel tiempo ocurrió no pequeño alboroto acerca del Camino.
24 Porque un platero llamado Demetrio, el cual hacía de plata templecillos de Diana, daba á los artífices no poca ganancia; Porque cierto platero llamado Demetrio, que fabricaba de plata templecitos de Diana, traía a los artífices no poca ganancia:
25 Á los cuales, reunidos con los oficiales de semejante oficio, dijo: Varones, sabéis que de este oficio tenemos ganancia; a los cuales reunió, juntamente con los obreros de análogos oficios, y les dijo: Señores: sabéis que por esta industria ganamos riqueza;
26 Y veis y oís que este Pablo, no solamente en Éfeso, sino á muchas gentes de casi toda el Asia, ha apartado con persuasión, diciendo, que no son dioses los que se hacen con las manos. y veis y oís que no sólo en Efeso, sino por casi toda la provincia de Asia, este Pablo con sus persuasiones aparta a mucha gente, diciendo que no son dioses los que son hechos de mano
27 Y no solamente hay peligro de que este negocio se nos vuelva en reproche, sino también que el templo de la gran diosa Diana sea estimado en nada, y comience á ser destruída su majestad, la cual honra toda el Asia y el mundo. ¡Y no solo hay peligro de que este nuestro ramo de industria venga a ser desacreditado, sino que también el templo de la gran diosa Diana sea despreciado, y sea destruída la magnificencia de aquella a quien toda el Asia y el mundo adoran!
28 Oídas estas cosas, llenáronse de ira, y dieron alarido diciendo: ¡Grande es Diana de los Efesios! Y oyendo esto, se llenaron de ira, y gritaron, diciendo: ¡Grande es Diana de los efesios!.
29 Y la ciudad se llenó de confusión; y unánimes se arrojaron al teatro, arrebatando á Gayo y á Aristarco, Macedonios, compañeros de Pablo. Y la ciudad se llenó de confusión; y de común acuerdo corrieron impetuosamente al teatro, habiendo prendido a Gayo y a Aristarco, macedonios, compañeros de viaje de Pablo.
30 Y queriendo Pablo salir al pueblo, los discípulos no le dejaron. Y queriendo Pablo entrar dentro, al pueblo, no se lo permitieron los discípulos.
31 También algunos de los principales de Asia, que eran sus amigos, enviaron á él rogando que no se presentase en el teatro. Y también algunos de los principales de la provincia de Asia que eran amigos suyos, enviaron a él, y le rogaron que no se presentase en el teatro.
32 Y otros gritaban otra cosa; porque la concurrencia estaba confusa, y los más no sabían por qué se habían juntado. Unos pues gritaban una cosa, y otros otra; porque la asamblea estaba en confusión, y la mayor parte no sabía por qué causa se habían reunido.
33 Y sacaron de entre la multitud á Alejandro, empujándole los Judíos. Entonces Alejandro, pedido silencio con la mano, quería dar razón al pueblo. Y de entre la multitud hicieron subir a la tribuna a Alejandro, impulsándole los judíos. Y Alejandro hizo señal de silencio con la mano, queriendo hacer su defensa ante el pueblo
34 Mas como conocieron que era Judío, fué hecha un voz de todos, que gritaron casi por dos horas: ¡Grande es Diana de los Efesios! Mas ellos, percibiendo que era judío, todos a una voz, como por espacio de dos horas, gritaron: ¡Grande es Diana de los efesios!
35 Entonces el escribano, apaciguado que hubo la gente, dijo: Varones Efesios ¿y quién hay de los hombres que no sepa que la ciudad de los Efesios es honradora de la gran diosa Diana, y de la imagen venida de Júpiter? Y cuando el síndico hubo apaciguado la multitud, les dijo: Señores efesios, ¿quién hay de los hombres que no sepa que la ciudad de los efesios es sumamente adicta al culto de la gran Diana, y de la imagen que bajó de Júpiter?
36 Así que, pues esto no puede ser contradicho, conviene que os apacigüéis, y que nada hagáis temerariamente; Siendo pues innegables estas cosas, debéis reprimiros, y no hacer nada inconsideradamente.
37 Pues habéis traído á estos hombres, sin ser sacrílegos ni blasfemadores de vuestra diosa. Porque habéis traído acá a estos hombres, que no son robadores de templos, ni blasfemadores de vuestra diosa.
38 Que si Demetrio y los oficiales que están con él tienen negocio con alguno, audiencias se hacen, y procónsules hay; acúsense los unos á los otros. Si pues Demetrio y los artífices que están con él, tienen cuestión contra alguno, abiertos están los tribunales, y procónsules hay: ¡acúsense unos a otros!
39 Y si demandáis alguna otra cosa, en legítima asamblea se pueda decidir. Mas si inquirís algo respecto de otras materias, debe determinarse en asamblea legítima.
40 Porque peligro hay de que seamos argüidos de sedición por hoy, no habiendo ninguna causa por la cual podamos dar razón de este concurso. Porque estamos en peligro de ser acusados de sediciosos por lo de hoy, no habiendo causa alguna por medio de la cual podamos dar razón de este concurso.
41 Y habiendo dicho esto, despidió la concurrencia. Y cuando hubo dicho esto, despidió la asamblea.
navigate_before Hechos 18 Hechos 20 navigate_next
arrow_upward Arriba