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Escribe al ángel de la iglesia en Éfeso: Esto dice el que tiene las siete estrellas en su derecha, el que anda en medio de los siete candelabros de oro: |
ESCRIBE al ángel de la iglesia en ÉFESO: El que tiene las siete estrellas en su diestra, el cual anda en medio de los siete candeleros de oro, dice estas cosas: |
2 |
Conozco tus obras, tu arduo trabajo y tu paciencia; y que no puedes soportar a los malos; pusiste a prueba a los que se dicen ser apóstoles, y no lo son, y los hallaste mentirosos. |
Yo sé tus obras, y tu trabajo y paciencia; y que tú no puedes sufrir los malos, y has probado á los que se dicen ser apóstoles, y no lo son, y los has hallado mentirosos; |
3 |
Tienes paciencia y has sufrido a causa de mi nombre, y no te has cansado. |
Y has sufrido, y has tenido paciencia, y has trabajado por mi nombre, y no has desfallecido. |
4 |
Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor. |
Pero tengo contra ti que has dejado tu primer amor. |
5 |
¡Recuerda de dónde has caído! Arrepiéntete y haz las primeras obras; si no, vendré a ti y quitaré tu candelabro de su lugar, a no ser que te arrepientas. |
Recuerda por tanto de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré presto á ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido. |
6 |
Pero tienes esto, que aborreces las obras de los nicolaítas, que yo también aborrezco. |
Mas tienes esto, que aborreces los hechos de los Nicolaítas; los cuales yo también aborrezco. |
7 |
El que tiene oído, escuche lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere le daré a comer del árbol de la vida, que está en el paraíso de Dios. |
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice á las iglesias. Al que venciere, daré á comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios. |
8 |
Escribe al ángel de la iglesia en Esmirna: Esto dice el primero y el último, el que murió y ha vuelto a vivir: |
Y escribe al ángel de la iglesia en SMIRNA: El primero y postrero, que fué muerto, y vivió, dice estas cosas: |
9 |
Conozco tu tribulación y tu pobreza (pero eres rico), y sé la blasfemia de los que se dicen ser judíos y no lo son, sino sinagoga de Satanás. |
Yo sé tus obras, y tu tribulación, y tu pobreza (pero tú eres rico), y la blasfemia de los que se dicen ser Judíos, y no lo son, mas son sinagoga de Satanás. |
10 |
No temas lo que vas a padecer. Mira, el diablo va a echar a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados y tengáis tribulación durante diez días. Sé fiel hasta la muerte, y te daré la corona de la vida. |
No tengas ningún temor de las cosas que has de padecer. He aquí, el diablo ha de enviar algunos de vosotros á la cárcel, para que seáis probados, y tendréis tribulación de diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida. |
11 |
El que tiene oído, escuche lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no será dañado con la segunda muerte. |
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice á las iglesias. El que venciere, no recibirá daño de la muerte segunda. |
12 |
Escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: Esto dice el que tiene la espada aguda de dos filos: |
Y escribe al ángel de la iglesia en PÉRGAMO: El que tiene la espada aguda de dos filos, dice estas cosas: |
13 |
Sé dónde habitas, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas, mi fiel testigo, fue matado entre vosotros, donde Satanás habita. |
Yo sé tus obras, y dónde moras, donde está la silla de Satanás; y retienes mi nombre, y no has negado mi fe, aun en los días en que fué Antipas mi testigo fiel, el cual ha sido muerto entre vosotros, donde Satanás mora. |
14 |
Pero tengo contra ti unas pocas cosas: que tienes ahí a los que sostienen la doctrina de Balaam, que enseñó a Balac a poner tropiezo ante los hijos de Israel, incitándolos a comer de lo sacrificado a los ídolos, y a cometer fornicación. |
Pero tengo unas pocas cosas contra ti: porque tú tienes ahí los que tienen la doctrina de Balaam, el cual enseñaba á Balac á poner escándalo delante de los hijos de Israel, á comer de cosas sacrificadas á los ídolos, y á cometer fornicación. |
15 |
Y también tienes a los que igualmente sostienen la doctrina de los nicolaítas. |
Así también tú tienes á los que tienen la doctrina de los Nicolaítas, lo cual yo aborrezco. |
16 |
Arrepiéntete, pues; si no, pronto iré a ti y pelearé contra ellos con la espada de mi boca. |
Arrepiéntete, porque de otra manera vendré á ti presto, y pelearé contra ellos con la espada de mi boca. |
17 |
El que tiene oído, escuche lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, le daré a comer del maná escondido; y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita un nombre nuevo escrito, que nadie conoce sino aquel que lo recibe. |
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice á las iglesias. Al que venciere, daré á comer del maná escondido, y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita un nombre nuevo escrito, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe. |
18 |
Escribe al ángel de la iglesia en Tiatira: Esto dice el Hijo de Dios, el que tiene los ojos como llama de fuego, y los pies semejantes al bronce bruñido: |
Y escribe al ángel de la iglesia en TIATIRA: El Hijo de Dios, que tiene sus ojos como llama de fuego, y sus pies semejantes al latón fino, dice estas cosas: |
19 |
Conozco tus obras, tu amor, tu fe, tu servicio y tu paciencia; y tus últimas obras más numerosas que las primeras. |
Yo he conocido tus obras, y caridad, y servicio, y fe, y tu paciencia, y que tus obras postreras son más que las primeras. |
20 |
Pero tengo contra ti que toleras a esa mujer Jezabel, que se dice profetisa; ella enseña y seduce a mis siervos a cometer fornicación y a comer de lo sacrificado a los ídolos. |
Mas tengo unas pocas cosas contra ti: porque permites aquella mujer Jezabel (que se dice profetisa) enseñar, y engañar á mis siervos, á fornicar, y á comer cosas ofrecidas á los ídolos. |
21 |
Y le he dado tiempo para que se arrepienta; pero ella no quiere arrepentirse de su fornicación. |
Y le he dado tiempo para que se arrepienta de la fornicación; y no se ha arrepentido. |
22 |
Mira que la voy a echar en una cama, y a los que cometen adulterio con ella, en gran tribulación, a menos que se arrepientan de sus obras. |
He aquí, yo la echo en cama, y á los que adulteran con ella, en muy grande tribulación, si no se arrepintieren de sus obras: |
23 |
Y a sus hijos heriré de muerte; y sabrán todas las iglesias que yo soy aquel que escudriña la mente y el corazón; y os daré a cada uno conforme a vuestras obras. |
Y mataré á sus hijos con muerte; y todas las iglesias sabrán que yo soy el que escudriño los riñones y los corazones: y daré á cada uno de vosotros según sus obras. |
24 |
Pero a vosotros, a los demás que están en Tiatira, a cuantos no aceptan esta enseñanza, y que no han conocido las profundidades de Satanás (como dicen ellos), os digo: No echo sobre vosotros otra carga. |
Pero yo digo á vosotros, y á los demás que estáis en Tiatira, cualesquiera que no tienen esta doctrina, y que no han conocido las profundidades de Satanás, como dicen: Yo no enviaré sobre vosotros otra carga. |
25 |
Sin embargo, retened lo que tenéis hasta que yo venga. |
Empero la que tenéis, tenedla hasta que yo venga. |
26 |
Y al que venciere y guardare mis obras hasta el fin, le daré autoridad sobre las naciones, |
Y al que hubiere vencido, y hubiere guardado mis obras hasta el fin, yo le daré potestad sobre las gentes; |
27 |
así como yo también la he recibido de mi Padre (y las regirá con vara de hierro; como vasos de alfarero serán desmenuzadas); |
Y las regirá con vara de hierro, y serán quebrantados como vaso de alfarero, como también yo he recibido de mi Padre: |
28 |
y le daré la estrella de la mañana. |
Y le daré la estrella de la mañana. |
29 |
El que tiene oído, escuche lo que el Espíritu dice a las iglesias. |
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice á las iglesias. |