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Notas de la Biblia Moderna 1929 actualizada 2020

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Estos signos ortográficos (corchetes) advierten que el texto que se encuentra entre ellos no aparece en los mejores manuscritos. Se piensa que algún copista habrá añadido esos textos en el transcurso de los siglos, los cuales se reproducían manualmente a partir de los supuestos manuscritos originales.

Abominación de la desolación

Esta expresión se refiere (Daniel 9:27; 11:31) a la profanación del templo de Jerusalén y del ídolo establecido en este santuario, en la época del rey Antíoco Epífanes en 168 a.C., o a la llegada de tropas romanas que profanaron el templo de Jerusalén hacia el año 70 d.C. (Mateo 24:15; Marcos 13:14; compárese con Lucas 21:20).

Acaya

Bajo el dominio del Imperio romano, Grecia estaba dividida en dos provincias:

  • Al sur, Acaya, que tenía como capital Corinto, sede del procónsul;
  • Al norte, Macedonia, de la cual Anfípolis era la capital (Hechos 18:27; 19:21).
Adorar

En el Nuevo Testamento el término griego significa exactamente inclinarse delante, y se aplica a la actitud de los fieles que se inclinan ante Dios en una actitud de adoración (Mateo 2:2; 4:9, etc.). A veces es una señal de veneración por alguien (Hechos 10:25).

Adulterio

Relación sexual fuera del matrimonio con otra persona.

Advenimiento

Véase > Venida del Señor

Alma

El alma es la parte de nuestro ser que nos permite entrar en relación con Dios y tener comunión con Él. Es inmortal. Esta palabra también se refiere a todo el ser moral y espiritual, distinto del cuerpo (Mateo 10:28), o incluso a toda la persona (Hechos 2:43; Romanos 2:9). Es también el asiento de nuestras emociones, nuestros deseos, nuestros sentimientos. En este sentido, el corazón y el alma están muy cerca. Significado especial: la vida de todo ser viviente (Génesis 1:30).

La Biblia enseña que el hombre (la persona) está compuesto de espíritu, alma y cuerpo (1 Tesalonicenses 5:23). El alma y el espíritu son distintos, aunque relacionados (Hebreos 4:12).

Véase > Carne

Almud

Medida de capacidad (unos 9 litros); recipiente colocado en la sala principal para medir el consumo de cereales de la familia.

Significado especial: Poner debajo del almud: esconder, disimular (Mateo 5:15; Marcos 4:21; Lucas 11:33).

El almud de tierra es una medida de superficie equivalente a la cantidad de terreno que puede sembrarse con un almud de grano.

Amar

En las dos primeras preguntas que Jesús hace a Pedro (Juan 21:15-17), amar traduce el verbo griego agapao; significa amar, si es necesario hasta el punto de sacrificar la vida (véase 13:37 y 15:13; 1 Juan 3:16; 4:8-10, 19). Los otros usos de amar, en los versículos 15 al 17 (la tercera pregunta de Jesús y cada respuesta de Pedro), traducen la palabra griega fileo, significa querer, un término que expresa afecto (Juan 11:3).

Amigos

Literalmente: los hijos del tálamo nupcial (Mateo 9:15; Marcos 2:16). Lugar preeminente donde los novios celebraban sus bodas y recibían los parabienes.

Amo
  • Señor de los esclavos

Amo o señor de esclavos y siervos (Mateo 24:50; 25:19). Traducido por «Señor» cuando se trata de Jesús (Mateo 7:21-22; 8:2, etc.).

  • Por encima de los demás

El que está por encima de los demás (Lucas 5:5; 8:24, etc.).

Otro término se refiere específicamente al cabeza de familia (Mateo 20:1; Lucas 12:39). No hay referencia al Índice para esta palabra.

Anás

Anás, suegro de Caifás, había interrogado a Jesús, antes de que Caifás presidiera el Sanedrín que pronunció la condenación a muerte del Señor (véase Lucas 3:2; Juan 11:49-53; 18:12-14, 19-24).

Anatema

Significa maldición.

Anciano

A lo largo de la historia israelita, aparecen los ancianos que tienen la responsabilidad de la comunidad en la que viven, tanto en lo que se refiere a la vida religiosa (Levítico 4:15; Números 11:16) como a la justicia (Deuteronomio 25:7; Josué 20:4; Rut 4:1-2) y a las orientaciones prácticas que deben darse a la vida de esta comunidad (Jueces 21:16; 1 Samuel 16:4; 2 Reyes 23:1). Los ancianos a menudo están asociados con los escribas (Deuteronomio 29:10; 31:28). En tiempos de Jesús, los ancianos todavía ejercían una verdadera autoridad (Mateo 15:2; 16:21; Hechos 4:5, etc.). Las primeras comunidades cristianas también designaron ancianos para guiarlas (Hechos 11:30; 14:23; 15:2; 1 Timoteo 5:17, etc.). En 2 y 3 Juan, el término se refiere al propio autor, por su edad y funciones.

  • De los judíos

Ancianos judíos: representantes del pueblo, asociados con las decisiones de los líderes religiosos (Éxodo 3:16; Mateo 16:21; Marcos 8:31; Lucas 9:22). En Jerusalén, el Cuerpo o Consejo de Ancianos (Mateo 26:3-4; Lucas 22:66).

  • De los padres

Ancianos o «padres»: los antepasados de los israelitas («la tradición de los ancianos»; Mateo 15:2; Marcos 7:3, 5).

  • De los cristianos

En la Iglesia: hermanos con el oficio de supervisores (Hechos 14:23; 15:2-6, 22-23; 1 Timoteo 3:1-7; 5:17, etc.).

Significado especial en Apocalipsis: los 24 ancianos vistos en el cielo (Apocalipsis 4:4 al 19:4): son los elegidos glorificados.

Ángel

En hebreo como en griego, el significado de esta palabra es: enviado, mensajero, y la palabra puede ser usada para hablar de un hombre (Malaquías 3:1; Marcos 1:2). El ángel del Señor es un enviado de Dios a los hombres para comunicar su voluntad. Este enviado puede tener una apariencia humana que no lo distingue de los demás hombres (Jueces 13:6), pero a menudo es un ser sobrenatural que, a veces, se confunde con Dios mismo (Jueces 6:11, 23; Salmo 34:7; 35:5-6; 91:11, etc). Otras palabras también se refieren a seres celestiales que están con Dios (los hijos de Dios, los querubines, los serafines).

Antepasados

Véase > Ancianos

Anticristo

Es decir: el adversario de Cristo, o alguien que intenta usurpar su lugar; también es llamado «el hombre de pecado», «el hijo de perdición», «el inicuo» (2 Tesalonicenses 2:3-12). El apóstol Juan habla de sus precursores (1 Juan 2:18-19), los anticristos. Está representado en Apocalipsis 13:11-18 como la segunda Bestia, similar a un cordero.

Aparición

Véase > Venida del Señor

Apocalipsis

El término griego apocalipsis significa revelación (literalmente descubrimiento) y sirve de título a todo el libro.

Apóstol

Este título, que significa enviado, fue dado por Jesús a los doce discípulos a quienes confió una responsabilidad especial en la proclamación del Evangelio (Marcos 3:14-15), como testigos de su resurrección (Hechos 1:21-22). Pablo también fue escogido como apóstol de los gentiles (Gálatas 1:1; Romanos 11:13; 1 Corintios 15:9), sobre un plano de perfecta igualdad con los doce (2 Corintios 11:5). Algunos otros cristianos de primera generación pueden haber sido referidos por este término, por ejemplo, Bernabé (Hechos 14:14).

  • Apóstoles

1. Los doce discípulos escogidos por Jesús (Mateo 10:2-4).

2. Aquellos que, como Pablo o Bernabé, fueron enviados como los primeros mensajeros del Evangelio (Hechos 14:14).

Véase > Discípulos / los 12 elegidos

Arrepentimiento

El arrepentimiento siempre supone un cambio de mente, de corazón y de espíritu que implica seguir un (mejor) camino de santidad. El arrepentimiento es para con Dios (Hechos 20:21); conduce al pecador a tener sobre su estado de pecado y sobre sus faltas cometidas el mismo juicio que tiene Dios (Lucas 15:20-21). Entonces puede volverse hacia él e implorar su gracia, y Dios le acuerda la salvación en Cristo. Es la bondad de Dios que empuja al pecador hacia el arrepentimiento (Romanos 2:4), porque quiere que todos vengan al arrepentimiento (Hechos 17:30; 2 Pedro 3:9). Los judíos se hacían bautizar por Juan del bautismo de arrepentimiento, con vista a recibir a Cristo (Hechos 19:4); debían manifestar su arrepentimiento produciendo los convenientes frutos (Mateo 3:8; Lucas 3:8). Dios ha dado el arrepentimiento para vida a Israel y a los gentiles (Hechos 5:31; 11:18; 26:20). La Primera Epístola de Pablo había contristado a los corintios produciendo en ellos los efectos del arrepentimiento; habían juzgado en ellos su mala conducta (2 Corintios 7:8-10). El arrepentimiento para con Dios es posible porque Él hizo caer sobre Cristo el castigo que nuestros pecados merecían: «Él [Dios] lo hizo pecado por nosotros», «Dios… condenó al pecado en la carne» (2 Corintios 5:21; Romanos 8:3).

Asamblea

Asamblea e Iglesia son traducciones del mismo término griego. La palabra asamblea representa mejor la idea del griego, pues significa reunión, congregación. La encontramos en las reuniones que tuvieron lugar en Éfeso que causaron los disturbios originados por el platero Demetrio y que son designadas en Hechos 19:32, 39 y 41 con el mismo término griego «ecclesia». También tenemos, con este mismo término «ecclesia», cuando se trata de la asamblea de Israel, que se traduce también por «congregación» (Hechos 7:38).

Véase > Iglesia

Asia

En el Nuevo Testamento, el nombre «Asia» se refiere generalmente a la provincia romana, la parte occidental de Asia Menor (la actual Turquía) que bordea el Mar Egeo, y compuesta de norte a sur por Mysia y Troas, Lidia y Caria; a esto hay que añadir, más al este, Frigia. En la época de los Hechos de los Apóstoles, los romanos extendieron su dominio o influencia, en el resto de Asia Menor, sobre las regiones septentrionales que bordean el Mar Negro: Bitinia y Ponto; más al este, Capadocia; en el centro, Galacia, Licaonia y Pisidia; en el sur, sobre el Mediterráneo, desde la costa siria: Cilicia, Panfilia y Licia.

Aventador

El trigo (trigo u otra cereal) se trillaba sobre una superficie plana (el área), luego se separaban los granos de la paja y los escombros (la bala), sacudiendo todo en una cesta de mimbre (un aventador) que estaba expuesta al viento. Máquina o instrumento que se emplea para aventar y seleccionar los granos.

Ázimos

Se trata del pan sin levadura.

Véase > Pan sin levadura

Azoto

Azoto (hoy Ashdod), ciudad de los antepasados filisteos, al noreste de Gaza; Cesarea es un puerto más al norte.

Bárbaro

Los griegos, y después de ellos los romanos, llamaban así a los pueblos que estaban en margen de su civilización y que no hablaban ni griego ni latín.

Bat

Medida de capacidad de aproximadamente 24 litros.

Bautismo del Espíritu

El Espíritu Santo viene inundar y habitar en una persona que se arrepiente, que confiesa sus pecados y acepta el juicio de Dios sobre sí mismo, aceptando e identificándose con el sacrificio del Señor Jesús en su obra redentora.

Véase > Espíritu Santo

Beelzebú

Nombre del príncipe de los demonios, es decir, a Satanás (Mateo 12:22-28; Marcos 3:22; Lucas 11:15). Probablemente contiene la palabra Baal que correspondía al nombre de un dios cananeo o fenicio Baal-Zebub (2 Reyes 1:2; Mateo 10:25; 12:24-27; Marcos 3:22; Lucas 11:15, 19).

Bendito

Palabra empleada por los judíos para designar a Dios.

Bitinia

Véase > Asia

Blasfemia

Palabra impía que no se debía pronunciar generalmente y más aun durante un rito religioso. Es un insulto contra el honor de Dios o de Cristo, del Espíritu Santo, de la Trinidad y de la Palabra (Mateo 9:3; 12:31; Romanos 2:24; Apocalipsis 13:5-6). Es también una calumnia contra los hombres (Mateo 15:19; Colosenses 3:8; 1 Timoteo 6:4).

Boda

Enlace matrimonial entre un hombre y una mujer:

Buena nueva

Véase > Evangelio

Buenas noticias

Véase > Evangelio

Caída

Véase > Tropiezo

Cananeo

Véase > Zelote

Capadocia

Véase > Asia

Capitán

Véase > Ejército

Carne

En el Antiguo Testamento, la palabra hebrea “basar”, que a menudo significa carne (Levítico 4:11; Isaías 22:13), también se refiere a la parte material y visible de un ser vivo junto al aliento de vida (véase > Alma) y el espíritu (véase Espíritu). A veces este término se refiere al cuerpo y a toda la persona (Salmo 16:9; 65:1; 145:21; Eclesiastés 12:12). Tomando esta palabra de forma genérica, el término se usa para referirse a la persona humana en su totalidad; colectivamente, toda carne significa todo hombre (Génesis 6:12; Salmo 136:25; Isaías 40:6). Es también el vínculo de parentesco (Génesis 29:14; 37:27; Isaías 58:7). Estos diferentes significados se encuentran en el Nuevo Testamento, especialmente en las epístolas de Pablo donde la palabra aparece a menudo (cuerpo: Gálatas 4:13-14; con la idea de debilidad e impotencia, Marcos 14:38; persona humana y raza humana: Lucas 3:6; Hechos 2:17; de relación: Romanos 1:3; Gálatas 4:23, etc.). La carne es a menudo el término usado para referirse a la sede del pecado y de la corrupción, en oposición al espíritu regenerado por Dios (Romanos 7:5, 14-25; Gálatas 5:13, 17, 19, etc.). Lo carnal está en lucha contra lo espiritual. Una expresión común es: carne y sangre con los matices de significado especificados en las líneas anteriores (Gálatas 1:16; Efesios 6:12).

Además de su significado propio, esta palabra representa:

  • «la naturaleza» o «la condición humana», sin ningún matiz adverso (véase Romanos 1:3; 9:5; Juan 1:14). «Ninguna carne» (hebraísmo: Romanos 3:20; Gálatas 2:16): ningún ser humano. «Los hijos de la carne» (Romanos 9:8): la descendencia, en el sentido físico.
  • la «naturaleza pecaminosa» del hombre caído, privado del Espíritu de Dios, dominado por los deseos «carnales», la maldad, el egoísmo, el orgullo y enemigo de Dios (Romanos 8:3, «carne pecaminosa»), causando las fallas o debilidades de los creyentes.

Véase > Viejo hombre

Casa

La casa se refiere a menudo a la familia, cuyo padre es el cabeza de familia (Salmo 115:10; Lucas 1:27; Hechos 7:10), y posteriormente a los descendientes y a la dinastía (la casa de David, 2 Samuel 7:16). Por extensión, puede aplicarse a todo un pueblo (la casa de Israel: Salmo 98:3; 135:19; Mateo 10:6; la casa de Judá: Isaías 22:21); a los miembros de la iglesia (1 Timoteo 3:15; 1 Pedro 2:5). El santuario se llama la Casa de Dios (Salmo 5:7; Mateo 12:4). Los verbos y sustantivos griegos derivados de la palabra casa sirven para designar: el padre de familia (el dueño de la casa: Mateo 13:27); el acto de construir o edificar (Mateo 7:24); la edificación, en el sentido moral o religioso (Romanos 14:19); la gestión o economía (Lucas 16:2) por el intendente o el tesorero.

Ceñir

Para los orientales con ropa flotante, es levantando los faldones y apretándolos alrededor de la cintura, en otras palabras, preparándose para caminar (Hechos 12:8), para el servicio (Lucas 12:35, 37; Juan 13:2-5; 21:18), o para el combate (Efesios 6:14).

Centavo

Véase > Moneda / Peso

Centurión

Véase > Ejército

César

Título de los emperadores romanos desde Octavio Augusto (hijo adoptivo del dictador Julio César), quien gobernó bajo este nombre, desde el año 27 a.C. al 14 d.C. (Marcos 12:14). Su sucesor Tiberio murió en el año 37 d.C. (Lucas 3:1).

Cesarea
  • Puerto marítimo de Palestina, al noroeste de Jerusalén –Felipe evangelizó todas las ciudades desde Azoto hasta Cesarea (Hechos 8:40). Los hermanos llevaron a Pablo primero a Cesarea, cuando los helenistas de Jerusalén querían matarlo (9:30). Cornelio era de Cesarea (10:1, 24). Tres hombres de Cesarea vinieron a buscar a Pedro (11:11); Pedro se quedó en esa ciudad (12:19). Pablo subió de Cesarea a Jerusalén para saludar a la iglesia (18:22). Más tarde regresó a Cesarea a la casa de Felipe el evangelista (21:8). Unos discípulos de esa ciudad vinieron con él a Jerusalén. Pablo fue llevado como prisionero a Cesarea bajo guardia militar (23:23, 33); apeló a César e hizo su apología ante el Rey Agripa II (véase Hechos 25:1, 4, 6, 13).
  • Cesarea de Filipo

Ciudad al norte de Palestina, en el nacimiento del río Jordán –En esta ciudad Jesús hizo a sus discípulos estas preguntas: «¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del hombre?»; «Pero vosotros, ¿quién decís que soy?» (Mateo 16:13; Marcos 8:29).

Cilicia

Véase > Asia

Circuncidar

Escisión del prepucio de los varones: Juan 7:22-23. Señal de pacto dada por Dios a Abraham y a sus descendientes, así como a los que vivían con él. Los recién nacidos eran circuncidados en el octavo día (Lucas 1:59; 2:21; Filipenses 3:5).

Significado simbólico:

1. En el Antiguo Testamento la circuncisión está íntimamente ligada a la sumisión y a la obediencia (véase Hechos 7:51). Era una señal de pertenencia al pueblo de Israel.

2. En el Nuevo Testamento, en contraste con la circuncisión de la carne, la «circuncisión» del creyente es la del corazón, en espíritu (Romanos 2:29; Filipenses 3:3; Colosenses 2:11), es un signo espiritual interno de nuestra muerte y nuestra pertenencia a Cristo (véase también Hechos 15:1; 1 Corintios 7:18-20).

Significado especial: Los términos «circuncisión» e «incircuncisión» (Efesios 2:11; Colosenses 4:11; Tito 1:10) también pueden referirse a todos los circuncidados y no circuncidados (o incircuncisos), en otras palabras, a los judíos en contraste con los no judíos, o naciones (Romanos 1:16).

Cobrador de impuestos

Publicano o cobrador de peaje: recaudador de impuestos que operaba en nombre del ocupante romano, aunque de origen judío; sospechoso de malversación y a menudo considerado como traidor por sus compatriotas, los publicanos eran despreciados por ellos y comparados en la opinión popular con pecadores notorios, que no observaban la Ley de Moisés.

Pecador, asociado con los publicanos: Mateo 9:10-11; Marcos 2:15-16; Lucas 7:34, etc.

Cohorte

Véase > Ejército

Comandante

Véase > Ejército

Compañía

Véase > Ejército

Compasión

El sentimiento de piedad, de misericordia, de ternura, se expresa por una palabra que significa: las entrañas, o por la expresión: entrañas de misericordia (Salmo 40:12; 69:20; Lucas 1:78; 2 Corintios 6:12, etc.): Estas palabras se usan tanto cuando se habla de Dios como de los hombres. Se refieren al apego materno de una mujer a su hijo, y a veces pueden ser traducidos por el corazón (Filemón v. 7 y 20; 1 Juan 3:17).

Concilio

Véase > Sanedrín

Conocer

El término hebreo traducido por conocer (reconocer, saber) no corresponde al significado estricto de este verbo, que se aplica principalmente al conocimiento intelectual, al saber, al pensamiento, a la ciencia. Conocer, en la Biblia, es comprometerse plenamente, dar toda su persona, mente, alma y cuerpo al objeto del conocimiento. Así, pues, la unión sexual se expresa con este verbo (Génesis 4:1; Números 31:17-18; lo mismo en el N.T.: Lucas 1:34). Conocer, pues, significa al mismo tiempo conocer y experimentar, probar, amar. El conocimiento de Dios no es solo un conocimiento de Dios y de su ley, sino también la comunión profunda con Él, el amor y la confianza que se da. De la misma manera, si se dice que Dios conoce a su pueblo, es un conocimiento que comprende la elección, el pacto y la salvación del pueblo (Salmo 31:7; 41:12; Jeremías 9:23-24; Oseas 4:1-6). Sin embargo, en algunos textos del N.T., el conocimiento se entiende en un sentido más intelectual (1 Corintios 8:1-3).

Convertir

Este verbo expresa un movimiento por el cual un hombre se aleja del pecado y se vuelve a Dios (1 Tesalonicenses 1:9; etc.). Significa dar la vuelta, regresar, y que a menudo se traduce con uno de estos términos (Deuteronomio 30:2; Marcos 5:30).

Copa

El símbolo de la copa se usaba para hablar de las bendiciones que uno recibía como una gracia (Salmo 23:5), o como un consuelo (Jeremías 16:7), o para hablar de enojo y juicio (Isaías 51:17, 22; Jeremías 25:15), o de sufrimiento y de la prueba por la cual uno tenía que pasar (Mateo 20:22; Apocalipsis 14:10, etc.). Se decía: copa de bendición, copa de juicio, etc. Esta noción de la copa ayuda a entender mejor los pasajes relacionados con la Cena del Señor (1 Corintios 10:16; 11:25; etc.).

Cor

Medida de capacidad de aproximadamente 240 litros.

Corazón

Aunque la palabra hebrea que significa corazón en el Antiguo Testamento a veces se usa metafóricamente para designar el asiento de los sentimientos (Éxodo 4:14; 1 Samuel 2:1) y la valentía (2 Samuel 17:10), con mayor frecuencia se refiere a la parte más profunda del hombre, el asiento de su pensamiento (1 Reyes 3:9; Eclesiastés 1:13; 2:1) y su voluntad (1 Samuel 14:7; Isaías 63:4). La palabra corazón también traduce los términos hebreos y griegos que significan las entrañas, con la idea de compasión y misericordia (Salmo 7:10; 34:18; 39:3; etc.).

Véase > Compasión

Cortina

En el tabernáculo (o tienda de campaña) en el desierto, esta cortina separaba el lugar santo del lugar santísimo, donde solo el sumo sacerdote entraba una vez al año (Éxodo 26:31-34; Levítico 16:12, 15; Hebreos 9:3-8, 11-12, 24-26). En Hebreos 6:19, se hace alusión al lugar donde Cristo resucitado y glorificado ha entrado, en el santuario celestial.

Véase > Templo

Cristo

Véase > Jesucristo

Cuadrante

Pequeña moneda = 1/4 del as, o 2 pitas.

Véase > Moneda / Peso

Cuarto

Pequeña moneda

Véase > Moneda / Peso

Cuerpo
  • El cuerpo es el edificio, la «tienda» (2 Corintios 5:1) que alberga a nuestra persona. Es también «el templo del Espíritu Santo» para el que ha creído. Por eso debemos honrarlo cuidándolo con sobriedad y velando de no utilizarlo para prácticas impuras. Véase > Fornicación.

Por el nuevo nacimiento, el creyente «nace de Dios» (Juan 1:13), «nace del Espíritu» (Juan 3:8); recibe la «salvación» de su alma (1 Pedro 1:9) y espera la salvación de su cuerpo a la venida del Señor, por medio de la resurrección o la transformación en un cuerpo glorioso para el cielo (Romanos 8:23; 1 Corintios 15:49, 51-52; Filipenses 3:20-21).

La Biblia enseña que el hombre (el ser humano) está compuesto por el espíritu, el alma y el cuerpo (1 Tesalonicenses 5:23). El alma y el espíritu son distintos, aunque íntimamente relacionados (Hebreos 4:12).

Cuerpo de Cristo

Todos los cristianos (nacidos de nuevo) son «sellados con el Espíritu Santo» (Efesios 1:13). Todos ellos fueron «bautizados con un solo Espíritu para ser un solo cuerpo» (1 Corintios 12:13), el Cuerpo de Cristo, del cual él es la cabeza. Este Cuerpo representa la Iglesia (o Asamblea): Efesios 1:23; Colosenses 1:24.

Véase > Asamblea

Cuerpo humano

Véase > Cuerpo

Culto

Véase > Servir / Servicio

Cumplido

¡Cumplido está!: El término griego Tetelestai, así traducido, estaba empleado para saldar una factura. El Señor utilizó la palabra correspondiente en arameo para declarar que la obra que el Padre le había encomendado hacer estaba acabada.

Decápolis

Liga de diez ciudades (incluyendo Gadara, Marcos 5:1, 20; Mateo 4:25), constituyendo un distrito ubicado al sureste de Galilea y al este de Samaria.

Demonio

Ángeles que, en lugar de mantener su origen, como «los santos ángeles» (Lucas 9:26), han pecado y seguido al diablo en su rebelión contra Dios. Sabiendo que están destinados al castigo eterno (Mateo 25:41; 8:29; Lucas 8:31), incitan a los hombres al mal bajo todas sus formas, para obstaculizar los propósitos divinos: maldad, perversión, mentiras, orgullo, codicia, idolatría, ateísmo.

Significado especial: en algunos casos, pueden apoderarse de las mentes y de los cuerpos de aquellos que son entonces llamados demoníacos (véase Mateo 12:22; Marcos 6:13; 16:17; Lucas 9:1; 10:17, etc.).

Denario

Moneda romana; moneda de plata de unos 4 gramos, salario de un día de trabajo en Israel (Mateo 20:2; Juan 6:7).

Véase > Moneda / Peso

Derecho de ciudadanía

Derecho cívico. El estatuto de ciudadano romano, recibido por nacimiento o adquirido, confería el derecho a ser protegido en todo el Imperio por las autoridades y, en caso necesario, a ser juzgado con arreglo al derecho romano y de no ser molestado con una eventual condenación. Véase Hechos 16:21, 37-38; 22:24-29; 23:27.

Desierto

Varios términos hebreos se utilizan para describir regiones desérticas, no pobladas. En español, también se utilizan sinónimos: soledad, estepa, tierras áridas, etc. La palabra más común, tomada de una raíz que significa crecer frente a uno mismo, puede referirse a menudo a tierras que, aunque no sean cultivadas, pueden ser utilizadas como pasto para el ganado menor (Éxodo 3:1; Salmo 65:13; Isaías 42:11; etc.). Este uso se encuentra en el N.T. (Lucas 15:4).

Día

Espiritualmente hablando el día, en contraste con la noche, simboliza el tiempo en que uno puede conocer a Dios, vivir y ser guiado en la tierra a la luz de su Palabra (Juan 9:4; Romanos 13:12-13; Efesios 5:7-12).

El Día del Señor (Jehová) representaba la esperanza de los antiguos israelitas que anhelaban la victoria definitiva de Dios sobre todos sus enemigos y al mismo tiempo la gloria de Israel, su pueblo, para siempre. Los profetas advirtieron al pueblo que el día del Señor sería el día del castigo del pueblo por su infidelidad, si no se arrepentían para volver a Dios (Amós 5:18-20). Este día es, pues, tanto el día del juicio de Dios como el día de su victoria y establecimiento de su reino (Isaías 2:12; 13:6-9; Sofonías 1:14-18; Joel 3:2-5), o la venida del Cristo glorioso para buscar a los Suyos (2 Timoteo 4:8; Hebreos 10:25).

  • Un período bíblico particular, el día de:

– la redención (Efesios 4:30);

– la salvación (2 Corintios 6:2);

– el juicio (Mateo 10:15; Hechos 17:31; 2 Pedro 3:7);

– Jesucristo (Filipenses 1:6, 10; 2:16);

– el Señor (1 Tesalonicenses 5:2; 2 Pedro 3:10);

– Dios (2 Pedro 3:12);

– la eternidad (2 Pedro 3:18), etc.

  • Los últimos días:

– los tiempos del fin (2 Timoteo 3:1; 2 Pedro 3:3);

– el día malo (Efesios 6:13).

Diácono

Véase > Siervo / Esclavo / Criado, Ministro

Diezmo

En el Antiguo Testamento, los israelitas estaban obligados a ofrecer a Dios (como el verdadero dueño de la Tierra Prometida) una décima parte de sus ingresos para mantener a los levitas y a los sacerdotes (Levítico 27:30-32; Lucas 18:12).

Discípulo

Nombre dado a alguien que sigue la enseñanza de un maestro (véase Rabino). El Nuevo Testamento menciona a los discípulos de los fariseos (Mateo 22:16), a los de Juan Bautista (Marcos 2:18; Juan 1:35; 3:25; Hechos 19:1) y especialmente a los de Jesús, a veces para designar a los doce apóstoles (Mateo 10:1; Lucas 22:11), a veces a los creyentes verdaderamente comprometidos (Lucas 14:26), a veces a los auditores más o menos firmes (Juan 6:66). En Hechos, este término es de vez en cuando sinónimo de cristiano (Hechos 11:26).

Discípulos

Mención de ellos:

Véase > Apóstoles

Dispersión
Doctor
  • El que enseña.
  • Doctor en Leyes: Un escriba que se especializa en la enseñanza de la Ley de Moisés y de las Escrituras en general.
  • En las epístolas, creyente que ha recibido un don de gracia espiritual para la enseñanza de la Palabra de Dios (1 Corintios 12:28; Efesios 4:11).

Véase > Maestro

Doctrina

Enseñanzas de Dios y del Señor Jesús sobre la fe y la vida cristiana, así como de sus apóstoles.

También hay enseñanzas humanas contrarias a las que Dios y el Señor Jesucristo nos dan, estas son identificadas como «preceptos de hombres» o falsas doctrinas (véase 1 Timoteo 1:3; 2 Juan 10).

Dracma

Moneda griega del mismo valor que el penique romano, el salario de un día de labor de un trabajador agrícola (Mateo 20:2; Lucas 15:8); véase también Mateo 17:24 (didracma).

Véase > Moneda / Peso

Dueño

Véase > Maestro

Ejército
  • Ejército romano

Ejército romano: la unidad más importante era la legión (5.000 a 6.000 hombres, sin contar los refuerzos auxiliares); se dividía en 10 cohortes de 500 a 600 hombres. El centurión mandaba sobre un centenar de soldados. Los comandantes (quiliarcas), oficiales superiores, estaban a la cabeza de una o más cohortes, o jefes de guarniciones locales.

Significado especial: Legión: número elevado. Véase > Legión.

  • Ejército celestial

- «Multitud del ejército celestial»: los ángeles (Lucas 2:13).

- «Los ejércitos que están en el cielo»: los creyentes que acompañan al Señor Jesús cuando saldrá del cielo para juzgar a sus enemigos (Apocalipsis 19:14).

  • Guardia del templo

- Conjunto de personas que servían en el templo bajo el mando del sumo sacerdote. Estaban organizados como un ejército, con sus jefes y soldados.

El primer día de la semana

El primer día de la semana judía, ha llegado a ser el día de reunión de los cristianos (comp. Mateo 28:1; Juan 20:19; Hechos 20:7; 1 Corintios 16:2), designado como el «Día del Señor», nuestro domingo. La reunión cristiana (culto) tenía lugar al principio de ese día, pero contado a la manera judía, es decir el sábado a partir de las 18 horas, lo que explica el término de «Cena».

Elección

Dios eligió amar a todos los hombres: «Dio a su Hijo unigénito para que todo aquel que en él cree, no se pierda, sino que tenga vida eterna» (Juan 3:16). La Biblia nos enseña que los que creyeron son:

La fuente de su elección es la gracia soberana de Dios, no la voluntad del hombre (Romanos 9:11; 11:5).

La elección o predestinación no puede ser una excusa para la incredulidad; uno descubre que ha sido elegido cuando ha creído. Es para el creyente una razón de humildad, de agradecimiento y de adoración.

Elegir

La elección es el libre albedrío soberano de Dios. Los creyentes han sido elegidos en Cristo antes de la fundación del mundo (Efesios 1:4), pero todos los hombres son responsables de aceptar personalmente la salvación de Dios. Jesús es el elegido de Dios como Cristo (Lucas 23:35). También es la piedra viva, elegida y preciosa, sobre la cual reposa la Iglesia (1 Pedro 2:4-7). Los ángeles elegidos (1 Timoteo 5:21) están en contraste con los ángeles caídos.

Endemoniado

Persona poseída por un demonio que lo extravía en su espíritu. Cuando el Señor estaba en la tierra, visiblemente había muchos demoniacos. Se les traía a Él para que los curase (p.ej.: Mateo 8:16).

Véase > Demonio

Enseñanza

Véase > Doctrina

Escandalizar

Ocasión o medios para caer en una mala posición (en sentido figurado). De ahí el verbo escandalizar; ser escandalizado, escandalizarse por… (Romanos 14:21). Palabras o comportamiento que indignan u ofuscan (Mateo 16:23).

Véase > Tropiezo

Escoger

Véase > Elección

Escriba

Aquel que escribe, redacta documentos, mantiene cuentas.

Significado especial: versado en las Sagradas Escrituras y capaz de enseñarlas (en el Antiguo Testamento, p.ej. Esdras 7:6). En el Nuevo Testamento, los escribas se oponen a la doctrina de Jesús con bastante frecuencia (Mateo 9:3; Marcos 2:6-7; Lucas 6:7; Juan 8:3-6). En Mateo 23:34, Jesús anuncia a los oponentes que enviará profetas, sabios y escribas (aquellos que escribirán el Nuevo Testamento o publicarán su mensaje).

También conocidos como doctores de la Ley, los escribas eran judíos. Su erudición les daba gran autoridad sobre el pueblo. Muchos de ellos se sentaban en el Sanedrín. A menudo trataron de hacer a Jesús preguntas embarazosas para ponerlo en contradicción con sus enseñanzas. Muchos de ellos pertenecían al partido de los fariseos.

Espíritu

La Biblia enseña que el hombre (el ser humano) se compone del espíritu, alma y cuerpo (1 Tesalonicenses 5:23). El alma y el espíritu son distintos, aunque íntimamente relacionados (Hebreos 4:12).

  • El espíritu es el aliento de Dios en el hombre como respiración de vida (Génesis 2:7); está en estrecha relación con Dios a quien vuelve después de la muerte (Eclesiastés 12:7). El espíritu en el hombre está en estrecha relación con el alma, a veces se menciona uno por el otro.

En hebreo: rouah, en griego: pneuma; se refiere al aliento (de ahí la posible traducción por el viento, y por el ardor y la ira) y al espíritu. Dios ha puesto el espíritu en el hombre (Job 27:3; 33:4; Eclesiastés 12:7; comparar Génesis 2:7). Para el Nuevo Testamento, el espíritu del hombre regenerado lucha contra lo carnal (Romanos 8:5-16 y Gálatas 5:16-26). El Espíritu de Dios, o el Espíritu Santo manifiesta el poder de Dios, el perdón, la luz, la consolación (Salmo 104:30; Zacarías 12:10; Juan 16:5-15; Hechos 2:1-4). Es mediante su Espíritu que Dios comunica su voluntad a los hombres que ha elegido para que sean sus portavoces (Números 24:2; Jueces 6:34; 11:29; etc.; 1 Samuel 10:6, 10; 16:13, etc. 2 Samuel 23:2; Isaías 11:2; 42:1; etc.). La misma palabra se usa para referirse al espíritu del mal, o al espíritu de los demonios que toman posesión de los hombres y los mantienen en la esclavitud del pecado o de la enfermedad (Jueces 9:23; 1 Samuel 16:14-16; 1 Reyes 22:19-23; Mateo 12:43-45). También hay espíritus celestiales que rodean el trono de Dios en visiones apocalípticas (Apocalipsis 1:4; 3:1; 4:5; etc.), a menos que sea el Espíritu Santo en la plenitud de sus manifestaciones (los siete espíritus; véase Isaías 11:2). El adjetivo derivado: espiritual (neumático) puede aplicarse a objetos (dones, beneficios, etc.) o a personas (1 Corintios 2:13-15).

Espíritu inmundo

Véase > Demonio

Espíritu Santo

El Espíritu Santo es Dios, como el Padre y el Hijo (Mateo 28:19). Ha actuado en la tierra y en los hombres, ocasionalmente en unos hombres en el Antiguo Testamento, pero en Pentecostés, después de que Cristo fue resucitado y elevado al cielo, fue enviado por el Padre y por el Hijo (Juan 15:26; Hechos 2:4). La presencia del Espíritu Santo en la tierra caracteriza el período cristiano durante el cual se forma la Iglesia (o Asamblea), la esposa de Cristo. El Espíritu Santo mora en cada creyente (nacido de nuevo) y lo hace consciente de que es un hijo de Dios (Romanos 8:11, 16). Es el vínculo vivo que une a todos los creyentes en un solo cuerpo: la Iglesia (1 Corintios 12:13). Él actúa para su formación y su edificación, consuela, fortalece la fe y la esperanza de todos, hasta el regreso de Cristo (1 Corintios 12:7-11; Efesios 4:16).

  • Sus manifestaciones / Su misión

- Juan 1:32-33 – acerca de Cristo (Mateo 3:16)

- Mateo 28:19 – persona divina

- Juan 14:16-17 – enviado a la tierra

- Juan 7:38-39 – fuente de vida

- Romanos 5:5 – vive en el creyente

- Romanos 8:9-11 – ídem

- 1 Corintios 6:19 – ídem

- Efesios 1:13 – los creyentes sellados

- Gálatas 5:22-23 – el fruto del Espíritu

- Hechos 2:1-21 – forma a la Iglesia

- 1 Corintios 12:13 – un solo cuerpo

- Juan 14:26 – consuela, enseña

- 1 Corintios 12:4-31 – asigna dones

- Apocalipsis 22:17 – con la Esposa, dice: «¡Ven!».

Véase > Bautismo del Espíritu

Esposo

Isaías (62:5) extiende el concepto bíblico del matrimonio con toda su riqueza y la alegría de los nuevos esposos a la relación de Dios con su pueblo, a quien considera su «esposa». Esto anticipa la evocación en el Nuevo Testamento de la Iglesia como «esposa de Cristo» (p.ej. Efesios 5:25; Apocalipsis 19:7), siendo el Señor el Esposo divino que viene amorosamente a buscar a su esposa. Jesús mismo hizo uso de este término en Marcos 2:19 y siguientes, y Juan el Bautista en Juan 3:29.

Véase > Matrimonio

Estadio

Véase > Medidas

Estatero

Véase > Moneda / Peso

Eunuco
  • Un hombre que no es apto para tener relaciones sexuales, ya sea por malformación congénita o por cirugía.
  • Significado especial: persona que ha renunciado voluntariamente al matrimonio para consagrarse a Dios (Mateo 19:12).
  • Un hombre que tiene un puesto de responsabilidad (Hechos 8:27).
Evangelio

Palabra griega que significa: buena nueva, es decir, en el Nuevo Testamento, el feliz mensaje de salvación eterna ofrecido por la gracia de Dios (Hechos 10:36; 20:24; Romanos 1:1, 9; 15:16, 19; Efesios 2:17).

Esta misma palabra se emplea para anunciar el reino del Señor, es decir el evangelio del reino que será introducido cuando Él venga a reinar en gloria durante mil años (milenio).

En Romanos 1:15, tiene un sentido más amplio, ya que se trata de todo el plan de Dios para la salvación.

Evangelizar

Es el hecho de anunciar el evangelio de Dios que presenta al Señor Jesús como el Salvador.

Véase > Evangelio

Fariseo

Secta judía muy apegada a la Ley de Moisés y a la tradición que se le había añadido a lo largo de los siglos (Marcos 7:8); los fariseos observaban las ordenanzas con rigidez y algo de ostentación (Mateo 23:23; Lucas 18:9-14). Estaban entre los oponentes más feroces de Jesús (Lucas 5:21; 5:30; 6:7; Juan 7:31-32, 45-48…). Véase, sin embargo, Juan 3:1-2; 19:39-40 (Nicodemo). Los saduceos, opositores de los fariseos, rechazaban la tradición y solo conservaban las prescripciones morales del Antiguo Testamento. Los saduceos negaban la resurrección de los muertos y la existencia de los ángeles y de los demonios (Mateo 16:11-12; 22:23; Marcos 12:18; Lucas 20:27; Hechos 23:6-8).

Filacterias

La palabra filacteria viene de un verbo griego que significa guardar, conservar (Mateo 23:5).

Pequeñas bandas de cuero o pergamino inscritas con algunos pasajes de la Ley que los piadosos judíos envolvían alrededor de su brazo izquierdo o se colocaban alrededor de la cabeza al recitar las oraciones diarias. El origen se encuentra en textos como Deuteronomio 6:4-9, así como en los flecos de los vestidos (Números 15:37-39). El objetivo era recordar diariamente y guardar fielmente la memoria de los mandamientos.

Filipos

Ciudad de la provincia romana de Macedonia, cerca del puerto de Neápolis (Hechos 16:10-12) y al este de Tesalónica (1 Tesalonicenses 2:2).

Flecos

Los flecos eran borlas (o franjas) azules que los israelitas debían llevar en las esquinas de sus ropas para recordarles los mandamientos (Números 15:38-40; Mateo 23:5).

Fornicación

Relaciones sexuales fuera del matrimonio.

Véase > Sexualidad

Frigia

Véase > Asia

Galacia

Véase > Asia

Galilea

La más septentrional de las tres provincias de Palestina, al norte de Samaria, al oeste del río Jordán y del mar de Tiberias (o mar de Galilea o lago de Genesaret; Juan 6:1; 21:1; Lucas 5:1); estaba separada del Mediterráneo por Siro-Fenicia (Mateo 4:12-15). Oriundo de Galilea.

Gehena

Llamado así por un valle (vado Hinom) cerca de Jerusalén, apodado Tofet (horno) y profanado por el rey Josías (2 Reyes 23:10), era el lugar donde se quemaba la basura de la ciudad. También fue siniestro por los sacrificios de niños (2 Reyes 16:3). De ahí el significado figurado: lugar de tormento eterno (Mateo 10:28; 18:8-9; Marcos 9:43-48; Lucas 12:5); «hijo de la gehena» (Mateo 23:15): destinado al juicio. La palabra tomó el significado de un lugar de maldición donde irán aquellos a quienes Dios destinará al juicio (Mateo 5:22; 10:28, etc.).

Véase > Infierno

Gentes del mundo

Véase > Gentiles, Naciones

Gentil

Gente de las naciones o griegos (o gentiles) (Romanos 1:16): pueblos o individuos no judíos de raza o religión.

Véase > Naciones, Circuncisión

Gloria

Etimológicamente, en hebreo, este término significa peso y por lo tanto importancia, prestigio o riqueza; en algunos casos, es casi sinónimo de persona (Salmo 7; 16:9). A menudo se habla de la gloria de Dios, especialmente para expresar la manifestación visible del Señor en el tabernáculo o en el templo (Éxodo 40:34-35; 1 Reyes 8:10), o en la persona de Jesús (Juan 1:14; 2 Corintios 4:6; Hebreos 1:3). A veces también, Dios mismo es llamado la gloria de los fieles (Salmo 62:7; compare Lucas 2:32).

Gobernador

Gobernador o procurador, funcionario que dependía directamente del emperador romano para la administración de una provincia. Desde el año 6 d.C., Judea, Samaria e Idumea, reunidas bajo el nombre de la provincia de Judea, estaban bajo la autoridad de un procurador, que tenía poderes civiles y militares, el derecho de vida y de muerte. El Pretorio (Mateo 27:1-2, 27; Juan 18:28, 33; 19:9) era tanto su residencia como la sede de su tribunal.

Gracia

La gracia es un favor concedido a alguien que está bajo sentencia. En su carácter divino, es la manifestación del amor de Dios por los hombres «por naturaleza hijos de la ira» (Efesios 2:3). Es a los que se reconocen a sí mismos como tales que él ofrece gratuitamente la salvación: «Por gracia sois salvos, por la fe» (Efesios 2:8). «Todos los que creen son justificados gratuitamente por su gracia, por la redención que es en Cristo Jesús… por la fe en su sangre» (Romanos 3:24-25). La gracia fue revelada por la venida de nuestro Salvador Jesucristo: «La gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo» (Juan 1:17). Esta gracia acompaña al cristiano toda su vida: «Te basta mi gracia» (2 Corintios 12:9).

Véase > Perdonar

Griego

En el tiempo del Señor, el latín era la lengua oficial en el Imperio romano; la lengua griega era la lengua la más corrientemente empleada en Grecia y parcialmente en el Próximo Oriente. Convenía, pues, que el NT. se escribiera en griego. Los judíos de entonces utilizaban el “koiné” una lengua griega surgida del dialecto hablado en la península griega y que se había generalizado.

Hacer

Literalmente: Llegó a ser; es decir: ha sido traído a la existencia (comp. Génesis 1:31 y Hebreos 11:3).

Hades

Palabra griega que designa de manera muy vaga (como el Seol del Antiguo Testamento) el lugar invisible donde las almas de los hombres van después de la muerte (Mateo 11:23; Lucas 16:23); distinto de la Gehena, lugar de tormento eterno.

Helenista

De Hellas, el nombre que llevaba Grecia en el tiempo de Alejandro Magno.

A diferencia de los judíos que vivían en Israel y hablaban arameo, los helenistas eran judíos de varios orígenes, que hablaban griego y probablemente leían en esa lengua una traducción del Antiguo Testamento (Hechos 6:1; 9:29).

Herencia

Este término se aplica no solo a las posesiones heredadas de un pariente fallecido, sino también a cualquier bien al que se accede como consecuencia de una promesa. El verbo traducido como herencia significa, por lo tanto, recibir un don y tomar posesión de lo prometido. Este es especialmente el caso en la historia de la conquista de Canaán. Así la tierra de Canaán constituye la herencia de Israel (Salmo 47:4; 111:6; 135:12) y las naciones la del Mesías (Salmo 2:8). El pueblo de Israel también es llamado la herencia del Señor, quien se ha reservado la propiedad especial (Salmo 74:2).

Hermanos

Estas palabras pueden tener un significado habitual, especialmente en los textos que se refieren a los hermanos y hermanas de Jesús (Mateo 12:47; Marcos 3:32; Lucas 8:20; Hechos 1:14; Gálatas 1:19); a veces indican un tipo más amplio de parentesco (Génesis 13:8); también pueden tener un significado espiritual, designar a los hermanos en la fe (Salmo 122:8; 133:1), los que comparten la misma comunión en Jesucristo, en obediencia a la voluntad de Dios Padre que está en los cielos (Mateo 12:50; 23:8; Colosenses 1:2). El apóstol Pablo habla de una hermana que es la esposa de un apóstol (1 Corintios 9:5).

Herodes
  • Herodes / el Grande

Herodes el Grande, de origen idumeo, rey de Judea bajo control romano desde el año 37 a.C. Véase > Templo. Murió poco después de la matanza de los niños de Belén (Mateo 2:16, 19).

  • Herodes / Antipas

Herodes Antipas, uno de los hijos de Herodes el Grande, a quien los romanos habían dado, con el título de Tetrarca, el gobierno de Galilea, desde el año 4 a.C. hasta el 39 d.C.; se casó con Herodías, la cual se había divorciado de Felipe, hermano de Herodes Antipas, este Herodes hizo decapitar a Juan el Bautista (Mateo 14:1-12; Marcos 6:14-29; Lucas 9:7-9).

  • Herodes / Agripa

Herodes Agripa I, nieto de Herodes el Grande, sobrino del precedente: rey de Judea (Hechos 12:1-2). Puso sus manos sobre los cristianos y mató a Santiago, el hijo de Zebedeo. También hizo que arrestaran a Pedro y que lo metieran en la cárcel; pero el Señor liberó a Pedro de la mano de Herodes. Este Herodes expiró, devorado por gusanos (Hechos 12:23).

Herodes Agripa II, hijo de Agripa I (Hechos 25:13). Delante del cual el apóstol Pablo compareció.

Herodianos

Un partido político judío adicto a los Herodes.

Probablemente judíos en altos cargos gracias a la protección de Herodes y sus sucesores; partidarios, oportunistas, favorables al ocupante romano (Mateo 22:16; Marcos 3:6; 12:13).

Hijo

Las palabras hijo indican en lenguaje bíblico una pertenencia, una participación, y no solo un vínculo filial real. Así hablamos de los que pertenecen a la humanidad: hijo del hombre (Ezequiel 2:1); a una profesión: hijo de profetas (1 Reyes 20:35; 2 Reyes 2:3); hijo de los sabios (Isaías 19:11); hijo de plateros (Nehemías 3:8); a un pueblo: hijo de Israel, hijo de Amón, expresiones generalmente dadas por israelitas, amonitas. Estas palabras también pueden ser usadas para nociones más abstractas como: hijo de la rebelión (Números 17:10), hijo de perdición (Juan 17:12), hijo o hijos de luz (Lucas 16:8), hijo del diablo (Hechos 13:10). El término también puede referirse a un descendiente más o menos lejano: el hijo de Abraham (Lucas 19:9). El Mesías es el hijo de David (Mateo 1:1). Jesús es llamado el Hijo del hombre, mostrando con esta expresión que él pertenecía a la humanidad siendo el Hijo de Dios. En el Antiguo Testamento la expresión hijo de Dios puede referirse a seres celestiales, ángeles (Job 1:6; 2:1; Salmo 89:7; etc.). Ocasionalmente, un cristiano puede referirse a alguien que ha sido guiado a la fe como hijo o niño (1 Timoteo 1:2; Tito 1:4; 1 Pedro 5:13).

Hijo de Dios

Véase > Jesucristo

Hijo del hombre

Véase > Jesucristo

Hipócrita

Este término, cuyo significado primitivo es actor, comediante, se refiere en el Nuevo Testamento a alguien que quiere fingir ser algo que no es, especialmente dándose apariencias religiosas (véase Mateo 6:2; 23:13).

Holocausto

En el Antiguo Testamento, sacrificio ofrecido a Dios, quemado por completo (véase Levítico 1). Simboliza la ofrenda de Jesucristo a Dios en la cruz.

Amar a Dios y al prójimo es mejor que ofrecer tales sacrificios de manera ritual (Marcos 12:33; Hebreos 10:6-8).

Véase > Sacrificio

Hombre

Ser humano, hombre o mujer. La primera mención del término está en Mateo 4:4.

Honra

Honra: traducción literal: algo que sirve para un uso honorable, noble (véase 2 Timoteo 2:20).

Deshonra: traducción literal: algo que sirve para un uso vil y ordinario (véase 2 Timoteo 2:20).

Hora

Véase > Tiempo

Hosanna

En hebreo significa: Salva, ahora. De donde: ¡Gloria! (exclamación de alegría y de bienvenida); véase Salmo 118:25-26; Mateo 21:9, 15; Marcos 11:10; Juan 12:13.

Humanas

Véase > Hombre / Humano

Idumea

Tierra en el suroeste del Mar Muerto, ocupada por los descendientes de Esaú o Edom, hermanos enemigos de los israelitas (Génesis 27:41; 36:8; Salmo 137:7; Marcos 3:8). Antipater, procurador de Judea, y su hijo el rey Herodes eran idumeos.

Iglesia

El término «iglesia» (o «asamblea», en griego: «ecclesia») se utiliza para designar:

1. La Iglesia cuya formación Jesucristo reveló, diciendo: «Yo edificaré mi iglesia». Él solo construye este edificio único basado en la roca que él mismo es: «Cristo, el Hijo del Dios vivo» (Mateo 16:16-18). Se compara con «una casa espiritual» compuesta de «piedras vivas» (1 Pedro 2:4-5) e incluye a todos los verdaderos cristianos (nacidos de nuevo, salvos por la fe en Jesucristo, Hechos 2:47), desde la venida del Espíritu Santo (Hechos 1:4-5; 2:1-4) hasta su resurrección y rapto en el cielo (1 Tesalonicenses 4:13-17).

2. La Iglesia de Dios, el Dios viviente, compuesta por todos los verdaderos cristianos que viven en la tierra en un momento dado (Romanos 12:5; 1 Corintios 1:2; 1 Timoteo 3:5, 15).

3. La iglesia local compuesta de todos los verdaderos cristianos de una localidad (Hechos 13:1), o congregaciones locales consideradas juntas en una región (Hechos 8:1; 9:31) o en general (Romanos 16:16; 1 Corintios 7:17; 11:16). Cada una de ellas es una parte de la Iglesia de Dios en el sentido de los puntos 1 y 2, sin separarse de ella, y la representa localmente (Mateo 18:17; 1 Corintios 1:2; 2 Corintios 1:1).

4. La reunión efectiva en un lugar y tiempo dado de los cristianos de una localidad (aunque no todos estén presentes): «cuando se reúnen en iglesia» (1 Corintios 11:18, 22; 14:4, 19, 28, 34; 3 Juan 6).

5. El término «ecclesia», también define a la asamblea de Israel en el desierto (Hechos 7:38).

6. Este término también señala reuniones de personas en el mundo. En Hechos 19:32, 39 y 41, la congregación de habitantes de Éfeso durante los disturbios originados por el platero Demetrio son designados con la misma palabra «ecclesia», traducida por asamblea.

7. El término iglesia ha perdido con los siglos su verdadera significación. En la actualidad ese vocablo hace referencia a diferentes edificios religiosos, mientras que la palabra Iglesia se refiere a los creyentes que están reunidos sin considerar el edificio o local en el que se encuentran.

Véase > Cuerpo de Cristo

Imbécil

Palabra aramea (literalmente: raca) muy despectiva (ejemplo: estúpido, bribón).

Impiedad

Véase > Iniquidad

Incircuncisos

Véase > Circuncidar / Circuncisión / Circuncidarle

Infierno

Este vocablo significa: inferior, más abajo.

Como tal, no se encuentra en el Nuevo Testamento, y en muchas versiones de la Escritura ha sustituido a la palabra Gehena. Véase Mateo 10:28 - RVA, etc.

Además, conlleva una imagen muy nefasta en la Escritura.

Véase > Gehena

Iniquidad

Este término se utiliza para traducir varias palabras griegas distintas, cuyo significado expresa:

Véase > Pecados

Injusticia

Véase > Iniquidad

Inmoralidades sexuales

Véase > Fornicación

Inmundo

Véase > Demonio

Jacobo
  • Jacobo / Hijo de Zebedeo

Uno de los doce apóstoles de Jesús, hijo de Zebedeo y hermano del apóstol Juan (Mateo 4:21; 10:2; 17:1; Marcos 5:37; Hechos 1:13); fue ejecutado por Herodes Agripa I (Hechos 12:1-2).

  • Jacobo / Hijo de Alfeo

Otro de los doce apóstoles de Jesús, el hijo de Alfeo, apodado Santiago el Menor o el Pequeño (Mateo 10:3; Marcos 3:18; Hechos 1:13).

  • Jacobo / Hermano del Señor

«Hermano del Señor» (Mateo 13:55; Gálatas 1:19), primero dudó de la misión de Jesús, como los otros miembros de la familia (Juan 7:3-10), y luego llegó a ser un creyente como ellos (Hechos 1:14; 1 Corintios 15:7), fue uno de los principales miembros de la asamblea en Jerusalén (Gálatas 2:9, 12; Hechos 12:17). Es probable que sea el autor de la epístola que lleva su nombre (Santiago en español).

Jefe de los sacerdotes

Véase > Sacerdotes

Jesucristo

Jesús significa «Jehová (es) Salvador» (Mateo 1:1). Cristo, en griego, significa: «Ungido», es decir, consagrado, establecido; el mismo significado que en hebreo: (el) Mesías (Juan 1:42); el título profético que se convierte en un verdadero nombre de Jesús (Mateo 1:16; Juan 1:17). Jesucristo nació de la virgen María (Lucas 1:31); es el Hijo de Dios (Lucas 1:35; 3:22), y también él se refiere a sí mismo como el Hijo del hombre (Lucas 19:10; Juan 1:52).

Los escritores del Nuevo Testamento a veces usan: Jesús (más a menudo en los evangelios), Cristo, o el Cristo; a veces: Jesucristo, Cristo Jesús, el Señor, o varios de estos títulos asociados, por ejemplo: nuestro Señor Jesucristo. Pablo declara que él es «Dios bendito sobre todas las cosas para siempre» (Romanos 9:5; comp. 1:25).

Jesucristo (JC.)

Las muchas entradas que siguen sobre Jesucristo (J.C.) se han dividido en cinco encabezados generales para mayor claridad:

1. ¿Quién es él?

2. Su ministerio

3. Su cruz (de Getsemaní a la tumba)

4. Su resurrección

5. Su regreso

Estos epígrafes siguen el orden relativo al ministerio del Señor:

1. ¿Quién es él?

  • Su nacimiento

Mateo 1:21

Lucas 1:30-35

Lucas 2:1-7

  • Su genealogía

Mateo 1:1-17

Lucas 3:23-28

  • Su bautismo

Mateo 3:13-17

Marcos 1:9-11

Lucas 3:21-22

  • Creador y no criatura

Romanos 9:5

Hebreos 1:1-3

Hebreos 13:8

  • Su presentación en el templo

Lucas 2:21-38

  • Niño en el templo

Lucas 2:41-50

  • Hijo de David

Mateo 22:41-46

Marcos 12:35-37

Lucas 20:41-44

  • Hijo de Dios

Mateo 16:13-16 – El Hijo del Dios Viviente

Marcos 1:1

Juan 1:34

Juan 20:31

  • Hijo del hombre

Mateo 9:6 – Perdona los pecados

Mateo 18:11 – Vino para salvar

Juan 5:27 – Tiene autoridad para juzgar

Mateo 26:2 – Entregado y crucificado

Marcos 8:31 – Sus sufrimientos, su muerte

Juan 12:23-24 – Él da fruto

Apocalipsis 1:12-16 – Resucitado, glorificado

  • La luz

Juan 1:4 – Y la vida

Juan 8:12-20 – La luz del mundo

  • El camino

Juan 14:1-6 – Para conocer al Padre

  • Su madre y sus hermanos

Mateo 12:46-50

Marcos 3:31-35

Lucas 8:19-21

Juan 2:12

Juan 7:3-5

  • En Nazaret

Mateo 21:11

Marcos 1:9

Lucas 2:51, 52

Lucas 4:16-30

Juan 1:46

Hechos 10:38

  • La Palabra de Dios

Juan 1:1-5

  • Algunos títulos de gloria

Filipenses 2:5-11

Colosenses 1:15-20

2. Su ministerio

  • En Jerusalén

Lucas 9:51-56 – sube a Jerusalén

Mateo 21:1-11 – entra en Jerusalén

Marcos 11:1-11 – ídem

Lucas 19:29-40 – ídem

Juan 12:12-19 – ídem

  • Acusado por los judíos

Mateo 27:12

Marcos 15:3

Lucas 6:7

Lucas 23:10

Juan 8:6

  • Su autoridad

Mateo 21:23-27 – su autoridad es desafiada

Marcos 11:27-33 – ídem

Lucas 20:1-8 – ídem

Mateo 7:28-29 – él enseña con autoridad

Marcos 1:21-22 – ídem

Lucas 4:31-32 – ídem

  • En Betania / Perfume

Mateo 26:6-13

Marcos 14:3-9

Juan 12:1-8

  • Confesión de Pedro

Mateo 16:13-20

Marcos 8:27-30

Lucas 9:18-21

Juan 6:67-71

  • Sus discípulos

Véase > Discípulos / Los 12 elegidos

  • En Galilea

Mateo 4:23-25

Marcos 1:35-39

Lucas 4:14-15

Lucas 4:42-44

Juan 4:43-45

Mateo 28:16-20 – después de la resurrección

Marcos 16:7

  • En Judea

Mateo 4:25

Marcos 3:7

Juan 3:22

  • Camina sobre el agua

Mateo 14:25-26

Marcos 6:48-49

Juan 6:19

  • Mar de Tiberias

Juan 21:1-23

  • Su misión

Mateo 20:28

Lucas 4:16-21

Juan 10:17-18

Juan 17:4

Hechos 10:38-40

  • Nicodemo

Juan 3:1-21

Juan 19:39

Véase > Nicodemo

  • Opositores religiosos

Mateo 23:1-36

Marcos 12:38-40

Lucas 20:45-47

Juan 7:40-52

Juan 8:21-59

  • El pan de vida

Juan 6:22-59

  • Llora

Lucas 19:41-44 – sobre Jerusalén

Juan 11:35 – a la tumba de Lázaro

Hebreos 5:7 – en la anticipación de la cruz

  • Ora a su Padre

Lucas 10:21

Lucas 22:39-46

Lucas 23:46

Juan 11:41-42

Juan 17:1-26

  • En el templo / fiesta

Juan 7:11-39

  • Las tentaciones

Mateo 4:1-11

Marcos 1:12-13

Lucas 4:1-13

3. Su cruz (de Getsemaní a la tumba)

  • Anuncio de sus sufrimientos

Mateo 16:21-23

Mateo 17:22-23

Mateo 20:17-19

Marcos 9:30-32

Marcos 10:32-34

Lucas 9:43-45

Lucas 18:31-34

Juan 12:23-24 – grano de trigo

  • En Getsemaní

Mateo 26:36-46 – en Getsemaní

Marcos 14:32-42 – ídem

Lucas 22:39-46 – en el monte de los Olivos

Véase > Monte de los Olivos

  • Su arresto

Mateo 26:47-56

Marcos 14:43-53

Lucas 22:47-54

Juan 18:3-11

  • Su juicio

Mateo 26:57

Mateo 26:59-68

Marcos 14:53

Marcos 14:55-65

Lucas 22:63-71

Juan 18:24

  • Delante de Pilato

Mateo 27:1-2

Mateo 27:11-14

Marcos 15:1-5

Lucas 23:1-5

Juan 18:29-40

  • Delante de Herodes

Lucas 23:8-12

  • Condenado / Barrabás

Mateo 27:15-26

Marcos 15:6-15

Lucas 23:13-25

Juan 18:28-40

  • Ultrajado

Mateo 27:26-31

Marcos 15:15-20

Lucas 23:25

Juan 19:1-6

  • Crucificado

Mateo 27:32-56

Marcos 15:21-41

Lucas 23:26-49

Juan 19:17-30

  • Su muerte

Mateo 27:50-53

Marcos 15:37-38

Lucas 23:44-46

Juan 19:28-37

  • Su tumba

Mateo 27:57-61

Marcos 15:42-47

Lucas 23:50-56

Juan 19:38-42

4. Su resurrección

  • Resucitado

Mateo 28:1-6

Marcos 16:1-11

Lucas 24:1-12

Juan 20:1-18

1 Corintios 15:3-8

1 Corintios 15:20-23

  • Sus apariciones

Juan 20:11-18 -a María Magdalena

Lucas 24:13-35 – a los discípulos de Emaús

Marcos 16:14 -a los discípulos

Lucas 24:36-49 – ídem

Juan 20:19-23 – ídem

Juan 20:24-29 – a Tomás

Juan 21:1-14 – en Galilea, junto al mar

Mateo 28:16-20 – en Galilea, en el monte

  • Su ascensión

Marcos 16:19-20

Lucas 24:50-53

Hechos 1:9-11

5. Su regreso

Juan 14:1-3 – viene a buscar a su Iglesia

1 Tesalonicenses 4:16-17 – ídem

Apocalipsis 3:11 – ídem

Apocalipsis 22:20 – ídem

Hechos 1:6-11 – para reinar en la tierra.

Jesús

Véase > Jesucristo

Judas

1. Uno de los hermanos de Jesús (Mateo 13:55; Marcos 6:3).

2. Uno de los doce apóstoles (Lucas 6:16; Juan 14:22; Hechos 1:13), también llamado Tadeo o Lebeo (Mateo 10:3; Marcos 3:18).

El autor de la epístola que lleva este nombre: «Judas… hermano de Jacobo» (Judas 1) es probablemente el primero, hermano de «Jacobo, hermano del Señor» (Gálatas 1:19), pero el segundo también es llamado «hermano» de Jacobo en los dos pasajes citados.

Judas Iscariote

Uno de los doce discípulos de Jesús, que siempre aparece en último lugar en las listas de los evangelios sinópticos, generalmente con la mención «El que entregó a Jesús» (por ejemplo, Marcos 3:19). El apodo de Iscariote probablemente se refiere a su lugar de origen, Qeriyoth en Moab (Jeremías 48:24 y Amós 2:2) o Qeriyoth Hetsron (Josué 15:25) a 19 km al sur de Hebrón. Era el tesorero del grupo de los apóstoles y aprovechó para robar dinero (Juan 12:6; 13:29). Después de criticar a María de Betania por ungir a Jesús con un perfume de gran valor con el pretexto de que el dinero habría sido mejor utilizado para hacer limosna, fue a los principales sacerdotes para ofrecerles secretamente a Jesús por dinero (Marcos 14:4; Juan 12:3ss).

La ocasión se presentó en la noche de la última cena cuando Jesús ofreció a Judas el tradicional trozo de la Pascua como último llamado a su lealtad. Judas persistiendo en su plan, «Satanás entró en él» (Juan 13:27ss); traicionó el secreto del lugar de reunión en Getsemaní. Dirigió a la tropa de soldados que allí arrestaron a Jesús (Marcos 14:43ss). Hay dos versiones del trágico final de Judas (Mateo 27:3ss; Hechos 1:18ss) que Hechos 1:25 explica bien: el apóstata ha sufrido el destino que le fue reservado.

Judea

Territorio al oeste del Mar Muerto y del río Jordán, que corresponde aproximadamente al antiguo reino de Judá, cuya capital era Jerusalén. Los romanos habían establecido a Herodes el Grande como rey de Judea, y luego a su hijo Arquelao como príncipe. En el año 6 d.C., Judea fue puesta bajo el mando de un Gobernador (o procurador) con base en el puerto de Cesarea. Normalmente se quedaba en Jerusalén durante las principales fiestas judías. Poncio Pilato fue procurador del 26 al 36 d.C.

Justicia

Esta palabra indica una idea de relación normal entre dos personas: el hombre es justo delante de Dios en la medida en que está en esta relación normal con él, es decir, en arrepentimiento y fe, en obediencia y fidelidad (Salmo 15:2). Dios es justo porque concede, según su promesa, su salvación y bendición, sin excluir su juicio (Salmo 9:4). La justificación es lo que restaura al hombre en esta relación recta con Dios y así le trae la salvación; solo puede existir a través de la gracia de Dios y la fe en Jesucristo. Dios ya no toma en cuenta el pecado, y pone la justicia de Cristo en la cuenta del creyente (Romanos 3:21-31; 4:3; Gálatas 3). El hombre debe entonces mostrar, en su vida y en sus obras, los frutos de su fe (Efesios 2:8-10; Santiago 2:14-26, etc.). En el Antiguo Testamento la palabra se usa a veces en plural: las justicias, para decir: los actos de justicia tanto de Dios (Jueces 5:11; Miqueas 6:5) como de los hombres (Isaías 33:15; Daniel 9:18).

En el judaísmo de los tiempos de Jesús, la palabra justicia tenía también un significado muy limitado: el de la práctica religiosa, y especialmente el de la limosna (Mateo 6:1).

Legión

Nombre de los espíritus inmundos que habían tomado posesión de un hombre, sanado por Jesús (Marcos 5:9, 15; Lucas 8:30); el nombre Legión viene del hecho de que había muchos demonios en él.

Véase > Ejército

Lepra

Una enfermedad entonces común en Oriente y en los países meridionales, para la cual se dan requisitos detallados en la legislación del Levítico (Levítico 13 y 14). Parece que la palabra traducida por lepra no se refiere exclusivamente a esta enfermedad tal como existe hoy en día, sino a un conjunto de enfermedades consideradas como impuras, que ya no podemos especificar. Jesús sanó a muchos leprosos (Mateo 8:3; 11, 5; Lucas 17:12, etc.).

Levadura

Masa utilizada en panadería para hacer fermentar la pasta que da el pan. En la Palabra, la levadura siempre representa el mal. El creyente debe reconocerla y ponerla de lado en su vida personal. La Escritura menciona la levadura del error mezclada con la verdad (Mateo 13:33; Lucas 13:21), aquella de la hipocresía religiosa de los fariseos y del racionalismo de los saduceos (Mateo 16:6; Lucas 12:1), la del materialismo de Herodes (Marcos 8:15), aquella de las falsas doctrinas (Gálatas 5:9), aquella de malicia y de maldad ligadas a la vieja naturaleza (1 Corintios 5:7-8).

Véase > Pan sin levadura

Levita

Hombres de la tribu de Leví, hijo de Jacob, encargados al servicio de Dios y de su santuario, ayudantes de los sacerdotes, que eran de la misma tribu, pero descendían de Aarón, hermano de Moisés (Números 3:5-10).

Licaonia

Región situada al oeste de Tarso, la ciudad natal de Pablo.

Licia

Véase > Asia

Macedonia

Región del norte de Grecia, con Anfípolis como capital. El apóstol Pablo evangelizó allí en particular las ciudades de Filipos (Hechos 16:12-40) y Tesalónica (Hechos 17:1-9).

Véase > Acaya

Maestresala

Criado responsable de servir la comida a su señor y de probarla para garantizar que no contuviera veneno. Jefe de camareros que dirige el servicio de las mesas.

Maestro

El que enseña a los demás. Entre los judíos, los doctores de la Ley eran responsables de explicar la ley de Dios, tenían gran autoridad debido a su conocimiento (Lucas 2:46; 5:17; Hechos 5:34). En la Iglesia primitiva, los maestros eran los encargados de enseñar (Hechos 13:1; 1 Corintios 12:28; Efesios 4:11). El apóstol Pablo se llama a sí mismo el maestro de los gentiles (1 Timoteo 2:7).

Véase > Doctor

Magos

Aquellos que practicaban magia eran considerados paganos involucrados en prácticas peligrosas y reprensibles (Deuteronomio 18:9-14; Hechos 8:9-24; 13:6, 8). Sin embargo, la palabra también se aplicaba a los sabios de los tiempos antiguos, a los científicos que estudiaban las estrellas, sin practicar magia en su forma tosca (Mateo 2:1).

Maldad

Véase > Iniquidad

Maligno

Malo, malvado. La úlcera maligna que aparece en los hombres en Apocalipsis 16:2 es una úlcera dolorosa y mala. Las mujeres que habían sido sanadas de espíritus malignos acompañaron a Jesús (Lucas 8:2).

Véase > Demonio

Malo

Véase > Maligno

Mamón

Mamón es la personificación idolátrica del dinero y de las riquezas injustas (Lucas 16:9, 13; Mateo 6:24).

Mandamiento

Los mandamientos son la expresión de la voluntad de Dios. Los creyentes están invitados a obedecer sus mandamientos; a guardar su Palabra que los presenta. Es una obediencia libremente consentida porque el creyente conoce el amor de Dios (Juan 14:15, 21, 23-24; 15:10, 12; 1 Juan 2:3; 3:22-24).

Significado especial: La ley dada a Israel tipificada por los 12 mandamientos (Mateo 5:17-19; 7:12; etc.).

Maranata

Esta expresión significa «El Señor viene» o «Ven, Señor». El apóstol Pablo emplea esta expresión en 1 Corintios 16:22.

Matrimonio

Estado en el que un hombre y una mujer viven juntos en una relación íntima, casados por la vida entera, con la aprobación de Dios, según instituyó desde el comienzo de la creación esta relación, y de su grupo social. Las relaciones sexuales fuera del matrimonio se consideran inmorales tanto en el Antiguo Pacto como en el Nuevo. El matrimonio se considera normal en el Antiguo Pacto y no hay una palabra para definir el estado de soltero. El llamado a Jeremías a permanecer soltero es inusual (Jeremías 16:2), pero el Nuevo Pacto reconoce el celibato como un llamado de Dios para algunos cristianos (Mateo 19:10ss; 1 Corintios 7:7ss). La historia de Adán y Eva describe la relación única entre marido y mujer como «una sola carne» (Génesis 2:18ss). Esto ilustra la relación íntima entre Dios y su pueblo (Oseas 1 - 3) y Cristo y su Iglesia (Efesios 5:22ss).

Medida

Longitud:

Las medidas de longitud pequeñas eran evaluadas por el ancho de un dedo de una mano y la longitud del antebrazo.

  • El codo tenía unos 45 cm de largo.
  • El estadio (185 metros; Lucas 24:13) es la octava parte de una milla (Mateo 5:41).
  • La milla valía 1000 pasos dobles.
  • El «camino del sábado» (Hechos 1:12) representaba unos seis estadios.

Capacidad:

Véase > Almud

Mesías

En hebreo, Mesías y en griego Cristo, significan: Ungido.

Véase > Cristo

Milagro

Se utilizan varias palabras con matices difíciles de definir. En hebreo, las palabras usuales significan: signo, o algo hermoso y admirable, o lo que uno teme, que da miedo (Éxodo 4:8-9; 7:3; Salmo 105:5). Lo mismo sucede en griego: una de las palabras corresponde a un signo, es decir, a una marca o prueba del poder de alguien o de Dios (Mateo 12:38). Es el término que siempre se usa en el Evangelio de Juan para hablar de los milagros de Jesús como testigos de la verdad que él manifiesta (Juan 2:11-18, etc.). Otro proviene de la palabra: poder (palabra que dio en español dinámico) y se refiere a un acto causado por el poder divino (Mateo 7:22). El tercero se refiere a un prodigio, un acto extraordinario y aterrador en el primer sentido de la palabra (Hechos 2:19).

Mina

Moneda griega que valía 1/60 del talento.

Véase > Moneda / Peso

Ministro

Véase > Servir / Servicio

Mirra

Preciosa resina olorosa, de sabor amargo, usada como perfume (Salmo 45:8; Éxodo 30:23-25; Mateo 2:11; Juan 19:39). Mezclada con vino, a veces era ofrecida a los supliciados para aliviar sus sufrimientos (Marcos 15:23; en Mateo 27:34, «hiel», en el sentido de sustancia amarga, según el Salmo 69:21).

Misia

Véase > Asia

Misterio

En la Biblia, los misterios generalmente tienen el carácter de secretos revelados. Se encuentran sobre todo en los escritos del apóstol Pablo, llamado el fiel «administrador de los misterios de Dios» (1 Corintios 4:1). Entre otros, mencionaremos:

Moneda

La palabra hebrea «shekel», significa «peso». Utilizado para pesar todo tipo de cosas, se convirtió en la unidad de valor monetario.

La mina valía 50 siclos y el talento 60 minas.

El siclo, en la época romana, se había convertido en el estatero (que significa «patrón») que correspondía a cuatro dracmas griegas.

La dracma judía, que originalmente valía medio siclo, fue finalmente reemplazada por el denario romano, una moneda de plata de unos 4 gramos.

El denario, que valía 16 centavos, era el salario de un día de trabajo en Palestina (Mateo 20:2).

El leptón, o pita, era la moneda de bronce más pequeña (Lucas 21:2).

El cuadrante valía 2 pitas (Marcos 12:42).

El centavo valía 8 pitas (Mateo 10:29).

El estatero valía 4 dracmas (Mateo 17:27).

Monte de los Olivos

Montaña ubicada al este de Jerusalén, frente a la ciudad (Zacarías 14:4) de la cual está separada por el valle de Cedrón (2 Samuel 15:14, 23, 30).

Su cresta y la ladera más lejana estaban situadas a una distancia de aproximadamente un día de sábado (a unos 900 m.) de la ciudad (Hechos 1:12).

David, huyendo de Absalón, subió descalzo esta colina, con la cabeza velada (2 Samuel 15:30). Ezequiel vio la gloria del Señor resplandecer en este monte (Ezequiel 11:23).

Zacarías tuvo una visión profética del Señor, regresando con todos sus santos, poniendo sus pies en el monte de los Olivos y liberando a su pueblo (Zacarías 14:4-5; Hechos 1:11-12).

Jesús a menudo iba a esta montaña (Lucas 21:37; 22:39; Juan 8:1).

Estaba bajando de ella cuando la multitud lo recibió (Lucas 19:37-38). Viendo la ciudad y sabiendo lo que le sucedería, Jesús lloró sobre ella (v. 41-44). Sentado en esta montaña, frente a Jerusalén, el Maestro anunció a sus discípulos la destrucción del magnífico Templo y de la ciudad (Mateo 24:3; Marcos 13:3).

Después de celebrar su última Pascua, Jesús se retiró al monte de los Olivos (Mateo 26:30; Marcos 14:26). El jardín de Getsemaní se extendía hacia el oeste, al pie de esta colina, o ligeramente en la ladera. Betania y Betfagé estaban en el lado oriental (Mateo 21:1; Marcos 11:1; Lucas 19:29).

La ascensión de nuestro Señor ocurrió cerca de Betania (Lucas 24:50).

Muerte

La muerte es inevitable (Hebreos 9:27), porque es un castigo por el pecado (Génesis 2:17; Romanos 6:23). Ya que Adán no murió el día que desobedeció a Dios, la muerte prometida fue más que física. Hay que entender la muerte como algo que concierne a todas las personas; la muerte física está relacionada con la muerte que inevitablemente produce el pecado. Pablo dice que «el pensamiento de la carne es muerte» (Romanos 8:6; comp. 1 Juan 3:14). La salvación solo es posible para aquellos que pasan de este estado a la vida eterna en Cristo (Juan 5:24). Algunas veces el Nuevo testamento enfatiza la seriedad del pecado para la condición final de las personas que no se arrepienten, y estarán eternamente separadas de Dios, usando el término «segunda muerte» (por ejemplo, Apocalipsis 2:11; Mateo 25:41).

Sin embargo, el Nuevo Testamento trata más sobre la vida. La muerte es tratada incidentalmente como algo de lo cual la persona puede ser salvada. Cristo destruyó el poder de la muerte (Hebreos 2:14) y el pecado (Romanos 6:10) para que los creyentes «duerman» en vez de que «mueran» (1 Tesalonicenses 4:14). La perfección de la victoria de Cristo sobre la muerte es probada por su resurrección; no puede morir por segunda vez (Romanos 6:9). Esta victoria es atribuida a su pueblo que se levantará de la muerte para disfrutar de la vida eterna (1 Corintios 15:54ss). Aun en esta vida nada puede separarnos de Dios (Romanos 8:38ss); el creyente ya ha salido del estado espiritual de muerte, aunque tenga que pasar por la puerta de la muerte del cuerpo.

En Lucas 9:31, el término usado en griego por muerte significa literalmente: éxodo (salida).

Mundo

Véase > Siglo

Nacer de nuevo

Es recibir por el Espíritu Santo una nueva naturaleza de Dios • Debido a la introducción del pecado en el mundo por el primer hombre, la naturaleza de cada ser humano es una naturaleza pecaminosa. Jesús le explica a Nicodemo en Juan 3 que nadie puede entrar en el reino de Dios a menos que nazca de nuevo (v. 3, 7). Uno nace de agua y de Espíritu (véase Juan 3:5). El agua lava y purifica; es una figura de la Palabra de Dios (véase Efe. 5:26) aplicada al alma por el poder del Espíritu Santo; trae vida mientras somete a la muerte todo lo que pertenece al primer Adán. El Espíritu Santo comunica al creyente una nueva naturaleza que viene de Dios (véase 1 Juan 3:9).

Literalmente: de arriba; no solo: de nuevo, pero como de una nueva fuente y origen de vida (comp. los versículos 3, 7, 31, de Juan 3, donde encontramos el mismo vocablo griego).

Naciones

La mayoría de las veces, este término, que se refiere a un grupo de personas, se aplica, en plural, a los pueblos que no son el pueblo de Dios y que son extraños al pacto y a las promesas de Dios (Salmo 2:1; 9:16-20, etc.). En latín, la palabra correspondiente es la de gentiles, es decir, personas que constituyen familias o pueblos extranjeros. En el Nuevo Testamento, con la excepción de algunos pasajes, es la palabra: los gentiles que ha sido utilizada (Mateo 5:47; 6:7, etc.).

Véase > Gentiles, Circuncisión

Nazareno

Esta palabra define particularmente, en los textos del Nuevo Testamento, a Jesús de Nazaret, a quien se le dio este nombre porque había habitado en Nazaret y que se creía que procedía de ese lugar. A veces también se da ese nombre a los primeros cristianos, discípulos del Nazareno (Hechos 24:5). En Mateo 2:23, se indica que Jesús en su niñez vino con sus padres habitar en Nazaret para que se cumpliese lo que fue dicho por los profetas. Isaías 11:1 p.ej. no menciona específicamente este lugar y tampoco otros profetas.

Se cree que una similitud de palabras permitió reconciliar al Nazareno y al nazareo, término aplicado a ciertos hombres que hicieron votos de ascetismo para consagrarse por un tiempo al servicio de Dios (Números 6; Jueces 13:3-5; Amós 2:12).

Nicodemo

Nombre griego que significa: «victorioso sobre el pueblo».

Fariseo, miembro del Sanedrín. Mencionado solo en el Evangelio de Juan. Los milagros de Jesús lo convencieron de que el «Nazareno» era enviado por Dios. Nicodemo vino a Jesús de noche; no podía entender las metáforas espirituales de Jesús (Juan 3) Jesús le explicó lo que es el «nuevo nacimiento»; le dice que Dios, en su amor, ha dado a su único Hijo para que todo aquel que crea en él tenga vida eterna (Juan 3:1-21).

Cuando los miembros del Sanedrín acusan a Jesús de fraude, Nicodemo les pregunta si la Ley les permite condenar a alguien sin que nadie lo haya oído (Juan 7:50-52). Finalmente, este doctor de la Ley trae unas 100 libras de un compuesto de mirra y áloe para la sepultura del cuerpo de Jesús (Juan 19:39).

Nombre

El texto del Antiguo Testamento usa a menudo el nombre para designar a toda la persona, especialmente cuando se trata del nombre de Dios: temer el nombre de Dios es temer a Dios mismo (Salmo 61:5). El santuario es el lugar donde reside el nombre de Dios (Deuteronomio 12:5; 26:2). Esta concepción es también la del N.T.: ilumina los relatos en los que los personajes cambian de nombre: su personalidad cambia al mismo tiempo (Génesis 32:28-29; Juan 1:43). En el judaísmo, las palabras el Nombre (Levítico 24:11, véase 3 Juan 7) se refieren a Dios.

Nube

A veces el término se asocia con una manifestación de la presencia de Dios entre su pueblo (Éxodo 16:10; 19:9; la columna de nube: Éxodo 13:21; Salmo 99:7; véase también Mateo 17:5).

Ocasión de tropiezo

Véase > Tropiezo

Ofender

Véase > Tropiezo, Escándalo / escandalizar

Ofrenda

Al contrario de un sacrificio ordenado por Dios, que es obligatorio, la ofrenda consiste en la presentación voluntaria de un don o sacrificio a Dios.

Práctica escrituraria de los cristianos, que consistía en poner aparte en sus casas para el primer día de la semana una parte de sus ganancias (colecta), con el fin de ayudar a los santos que tenían necesidades, o a aquellos que estaban al servicio del Señor (1 Corintios 9:11-14; 16:1-2). Dios encuentra satisfacción no solo en la alabanza, sino también en los sacrificios de beneficencia (2 Corintios 9:6-14; Hebreos 13:15-16).

Oráculo

En el Antiguo Testamento, los oráculos relatan profecías y palabras pronunciadas por profetas en nombre de Dios. El apóstol Pablo declara que los oráculos de Dios han sido confiados a los judíos (Romanos 3:2), enfatizando así la inspiración y autoridad del Antiguo Testamento. Hablar como «oráculo de Dios» (1 Pedro 4:11) es proclamar, como de parte de Él, lo que su Palabra enseña.

Pacto

Los pactos o alianzas en la Biblia no constituyen un acuerdo entre dos o más partes. Siempre están a iniciativa de Dios. Su propósito es bendecir a aquellos a quienes se dirigen (a una o varias personas o pueblo).

Se concluyen con o sin condiciones. Con respecto a Noé y Abraham, el pacto era incondicional; las señales eran el arco iris y la circuncisión respectivamente. El Antiguo Pacto (2 Corintios 3:14) fue concluido con Israel bajo la condición de obediencia. Israel era bendecido con la condición de que cumpliera la ley dada por Dios a Moisés.

El Nuevo Pacto será hecho de nuevo por Dios a favor del pueblo de Israel, para su bendición futura incondicional, porque está basado en el valor de la sangre de Cristo, como Mediador, la sangre del Nuevo Pacto. Es sobre este mismo fundamento que la esperanza y las bendiciones de la Iglesia descansan (1 Corintios 11:25).

Estos dos versículos presentan una gran dificultad por el hecho de que han sido traducidos en muchas versiones con el sustantivo «testamento» en vez de aquel de «pacto». En todos los otros pasajes en los que aparece este término griego, se traduce por pacto. Al ser traducido aquí por testamento, pierde el sentido profundo y principal del mensaje. En apariencia no hay argumento que pueda servir para justificar el empleo aquí de la palabra testamento en lugar de pacto.

Numerosas versiones traducen el versículo 16 de la siguiente manera: «porque donde hay testamento es necesario que intervenga muerte del testador». Esta forma de presentar la traducción del texto griego complica aún más la comprensión del mensaje.

Al leer en el capítulo 8 la instauración del primer pacto, podemos plenamente apreciar que aquel que lo estableció fue Dios (v. 8-12). Sería improcedente e incluso injurioso hablar de la muerte del que hizo este primer pacto. Es primordial que nos demos cuenta que el capítulo 8 nos habla del primer pacto que debía desaparecer: «Al decir: Nuevo, da por anticuado al primero, y lo que es anticuado y envejece, pronto desaparecerá» (v. 13).

El capítulo 9 nos informa de qué manera ese anticuado primer pacto debe desaparecer (también nos habla de la necesidad de la muerte de una víctima para que el nuevo pacto entre en vigor, como fue el caso del pacto concluido con Abraham (Gén. 15) y de aquel hecho con el pueblo de Israel con la mediación de Moisés). Es la declaración que tenemos en los versículos 16-17 que estamos considerando.

El capítulo 10 nos habla del cumplimiento del sacrificio (el ofrecimiento de la víctima) que introducía el nuevo pacto: «Al decir primero: No quisiste sacrificio, ni ofrendas, ni holocaustos, ni sacrificios por el pecado, ni te agradaron (cosas que se ofrecen según la ley), entonces ha dicho: He aquí que vengo para hacer tu voluntad, oh Dios. Quita lo primero, para establecer lo segundo» (véase 1-10).

Este Nuevo Pacto es eternamente firme, habiendo sido confirmado por la muerte de la victima que no es otra que el Señor Jesús: «Por esta voluntad hemos sido santificados, por la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez por todas» (v. 10).

– Transliteración del griego:

16 ὅπου γὰρ διαθήκη, θάνατον ἀνάγκη φέρεσθαι

Donde porque (hay) pacto, muerte (es) necesaria ser producida

(para confirmar)

τοῦ διαθεμένου·;

de (por) (lo) pactado;

17 διαθήκη γὰρ ἐπὶ νεκροῖς βεβαία, ἐπεὶ

Pacto porque sobre (victimas) muertas (es) firme, ya que

μήποτε ἰσχύει ὅτε ζῇ ὁ διαθέμενος.

nunca tiene valor cuando vive la pactada (víctima del pacto).

El texto entre paréntesis ayuda a entender el mensaje, pero no pertenece al texto griego.

  • Testador (según Vine)

En griego diatithemi (διατίθημι, 1303), arreglar, disponer.

Se emplea solo en la voz media en el NT; en Hebreos 9:16-17 aparece el participio de presente con el artículo, lit.: «el que hace un pacto (o testamento)», virtualmente nombre: «el testador» (el que «pacta»). Se emplea de celebrar un pacto en Hebreos 8:10; 10:16 y Hechos 3:25. Al concertar un pacto se acostumbraba sacrificar una víctima (Génesis 15:10; Jeremías 34:18-19). El que hacía un pacto lo concertaba a costa de una vida.

En tanto que la terminología de Hebreos 9:16-17 tiene la apariencia de ser apropiada a las circunstancias de hacer un testamento, hay excelentes razones para adherirse al significado de «concertar un pacto». La traducción «muerte del testador» haría de Cristo un Testador, lo que Él no fue. No murió simplemente para que pudieran cumplirse los términos de una disposición testamentaria en favor de los herederos.

Aquí, aquel que es «el Mediador de un nuevo pacto» (v. 15) es Él mismo la víctima cuya muerte tenía que intervenir. La de hacer un testamento destruye el argumento del versículo 18.

Podemos traducirlo algo literalmente así: «Porque donde un pacto (es), una muerte (es) necesaria que sea introducida del (por el) que concierta el pacto; porque un pacto sobre muertes (víctimas) es asegurado, por cuanto nunca está en vigor cuando el (la víctima) que concierta el pacto vive» [estando Cristo especialmente a la vista].

El escritor está hablando desde un punto de vista judaico, no desde el de los griegos. «Aducir el hecho de que en el caso de los testamentos la muerte del testador es la condición de la validez no constituye prueba en absoluto, naturalmente, de que una muerte sea necesaria para hacer válido un pacto. Para apoyar su argumento, demostrando la necesidad de la muerte de Cristo, el escritor aduce la ley general de que el que concierta un pacto lo hace a costa de vida» (Marcus Dods).

Diccionario Expositivo de W.E. Vine

  • Se podría traducir así:

Porque donde hay un pacto, es necesario que intervenga la muerte que lo confirma. Porque un pacto es firme con víctimas muertas; ya que no tiene valor mientras vive la victima sobre la que se establece el pacto (Hebreos 9:16-17).

Padre
Pan sin levadura

La levadura, en la Escritura, siempre es una figura del mal. Solo panes sin levadura podían ser ofrecidos a Jehová (Éxodo 29:2, 23-25; Números 6:15; Jueces 6:19-21); después se les daba a los sacerdotes como alimento (Levítico 8:26, 31; 10:12). Estas ofrendas hablan de antemano de Jesucristo, hombre sin pecado. Notable excepción: los dos panes cocidos con levadura, que debían ser ofrecidos en Pentecostés (Levítico 23:15-17), representaban a la Iglesia (judíos y gentiles según Efesios 2:11-18; Gálatas 3:28), es decir adoradores de quienes las imperfecciones son reconocidas; pero estos dos panes no son quemados sobre el altar en olor grato (comp. Levítico 2:11-12), y un sacrificio por el pecado es mencionado inmediatamente después (23:19). Panes sin levadura han servido de alimento en comidas particulares (Génesis 19:3; Éxodo 12:8; 2R. 23:9). La Fiesta de los panes sin levadura comenzaba a celebrarse el mismo día judío en que se celebraba la Pascua y duraba siete días (Éxodo 12:15; 13:6; Levítico 23:6; Deuteronomio 16:3, 8). En 1 Corintios 5:7-8, el apóstol hace una aplicación práctica a toda la vida del creyente: este, lavado de sus pecados en la sangre del Cordero, pone de lado la levadura del mal en una vida consagrada al Señor.

Véase > Pascua

Panes

Los panes de la proposición estaban dispuestos cada sábado en dos filas de seis panes cada una sobre la mesa del lugar santo del tabernáculo y más tarde del templo (Levítico 24:5-9). Eran panes de 2/10 de un efa (medida de capacidad de aproximadamente 24 litros) de flor de harina, o sea unos 7 kg cada uno. David comió de estos panes, contrariamente a las instrucciones rituales, un día que no tenía nada que comer con sus hombres (véase 1 Samuel 21:4; Mateo 12:3-4). Además, aun las ofrendas diarias, en el culto judío, generalmente se hacían sin levadura (Levítico 2:4-6, 11).

Panfilia

Véase > Asia

Parábola

Forma de narración tomando prestados detalles de la vida diaria para ilustrar la enseñanza moral o espiritual (Mateo 13:34-35; Marcos 4:33-34). El uso de la parábola, frecuente entre los líderes del pensamiento judío, fue especialmente desarrollado por Jesús (Mateo 13:1-52). Otras versiones traducen este término por alegoría (véase Juan 10:6; 16:25-29).

Véase > Reino de los cielos

Pascua

La primera de las tres grandes fiestas anuales en los que todos los israelitas debían participar (Deuteronomio 16:16). Conmemoraba la liberación de todo el pueblo cuando, bajo la guía de Moisés, salió de Egipto, donde había sido esclavizado (Éxodo 12). Mientras el ángel destructor golpeaba a los opresores, los israelitas, listos para partir, se salvaron por la señal colocada en el marco de sus puertas: la sangre de un cordero, sacrificado la noche anterior (para el significado simbólico, véase Juan 1:29; 1 Pedro 1:18-19; Hechos 8:32-35; Apocalipsis 5:6, 9). Durante los siete días siguientes al crepúsculo de la Pascua, se comía pan ázimo (o ázimos, es decir pan sin levadura). Véase Éxodo 12:14-15, 19; 1 Corintios 5:7-8. El día antes de esta doble fiesta era la Preparación de la Pascua (Lucas 23:54; Juan 19:14).

Jesús celebra la Pascua

Pecado
  • Definición

El pecado es esencialmente dirigido contra Dios; es la violación de lo que su gloria requiere (Romanos 8:7). Diferentes matices de significado emergen del uso de diferentes términos hebreos (AT) y griegos (NT). Por ejemplo, la palabra más común en el AT incluye la idea de «desviarse de la meta» o «perder el objetivo» (literalmente usada en Jueces 20:16; moralmente usada en Éxodo 20:20). Otra palabra significa «rebelión» (moral, 1 Reyes 8:50; política, 1 Reyes 12:19) otra «desorden» (2 Samuel 24:17; literalmente Isaías 24:1); otra «desviación del camino» («cometer un error», 1 Samuel 26:21). El NT tiene el equivalente de «no alcanzar el objetivo» o «desviarse del camino», y es el término más frecuentemente usado para expresar la noción de pecado (por ejemplo, Juan 8:46). También hay una palabra para error o equivocación («faltas» en Mateo 6:14s; Efesios 2:1). Entre las otras palabras usadas en el NT para referirse al pecado están «impiedad» (Romanos 1:18), «iniquidad» (2 Corintios 6:14), y «maldad», un término que expresa corrupción moral y espiritual y establece un vínculo entre el pecado y Satanás (1 Juan 3:12).

  • Origen

El pecado estaba presente en el universo antes de la caída de Adán y Eva (comp. Juan 8:44; 2 Pedro 2:4), pero la Biblia no nos revela explícitamente su origen. Más bien, está interesada en el origen del pecado en la vida del hombre (comp. Santiago 1:13ss.). La tentación del diablo en Génesis 3 consistía en sugerir sutilmente al hombre que podía ser igual a Dios y persuadirlo para que se rebele contra Él. Al afirmar su independencia de Dios, los hombres han cuestionado la naturaleza misma de Su existencia y le han negado la adoración y el amor que su majestad y gracia exigen. El origen del pecado, por lo tanto, no estaba tanto en un acto externo como en una aspiración interna que luego se externalizó y generalizó.

Pecador

Aquel que posee la naturaleza pecaminosa y comete pecados: todo hombre está en este estado (Romanos 5:8, 19). El Señor fue separado de los pecadores (Hebreos 7:26) debido a su naturaleza sin pecado, por lo tanto no pudo cometer pecado; pero vino al mundo para salvar a los pecadores (1 Timoteo 1:15).

Véase > Publicano

Perdonar

Jesús perdona los pecados a un paralítico y lo sana (Mateo 9:2, 5-6; Marcos 2:5, 7, 9-10), a una mujer pecadora (Lucas 7:47-48). Si le confesamos nuestros pecados, Dios es fiel y justo para perdonar nuestros pecados porque la sangre de Jesucristo, su Hijo, nos purifica de todo pecado (1 Juan 1:7-10). El perdón divino borra la culpa o el pecado cometido. Aquellos cuyas iniquidades son perdonadas son salvos y bendecidos (Romanos 4:7).

Véase > Remisión, Gracia

Piedra de molino

Una gran rueda de piedra que un asno hacía girar.

Piedra de tropiezo

Véase > Tropiezo

Pilato

Poncio Pilato fue gobernador (o procurador) de la provincia romana de Judea bajo el emperador Tiberio (Lucas 3:1) del 26 al 36 d.C. (véase Hechos 3:13; 13:28). Él fue responsable de la condenación de Jesús (Mateo 27:13, 26; Hechos 4:27-28).

Pisidia

Véase > Asia

Pita

La moneda de bronce más pequeña: 1/8 del as romano (o penique).

Véase > Moneda / Peso

Ponto

Véase > Asia

Pórtico

Véase > Templo

Posada

Casa o albergue reservada a los huéspedes.

Predestinar

Véase > Elección / Predestinación

Preparación

El día antes del sábado u otra fiesta, y cuando la gente se preparaba para su celebración (Mateo 27:62; Marcos 15:42; Lucas 23:54; Juan 19:14, 31, 42).

Véase > Pascua, Sábado

Pretorio

Véase > Gobernador

Primicias

Bajo el Antiguo Pacto, los israelitas debían ofrecer a Jehová la primera y mejor parte de sus frutos, de sus cosechas, de sus ingresos (Éxodo 23:19; Levítico 27:26; Deuteronomio 18:4; Proverbios 3:9; etc.).

Significado figurativo (primacía en el tiempo y en el valor, excelencia): «las primicias, Cristo» (1 Corintios 15:20, 23); «nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu» (Romanos 8:23). Véase también Santiago 1:18; 1 Corintios 16:15; Romanos 16:5, quienes se refieren a los redimidos como un todo o individualmente.

Procónsul

Gobernador de una provincia romana cuando esta depende del Senado (Sergio Paulo en la isla de Chipre: Hechos 13:4-7; Galión, gobernador de Acaya, en Corinto: Hechos 18:12).

Procurador

Esta palabra, traducida como Gobernador, se refería al alto funcionario romano responsable de una región en el vasto imperio de Roma. En Palestina, el gobernador residía en Cesarea, en la costa, pero tenía una segunda residencia en Jerusalén, a la que acudía principalmente durante las principales fiestas judías para mantener el orden. Poncio Pilato fue gobernador de Judea del 26 al 36, Félix del 52 al 59, Festo del 59 al 62 (Hechos 23:24; 24:27, etc.).

Los procónsules tenían una función similar en ciertos sectores (Hechos 18:12). No dependían directamente del emperador como los procuradores, sino del Senado romano.

Profeta

Los profetas del Antiguo Testamento eran hombres que, en respuesta a un llamado de Dios, anunciaban al pueblo su voluntad y denunciaban, a veces con gran severidad, las infidelidades de las que eran culpables el pueblo y sus dirigentes (Números 12:6; Deuteronomio 18:18). También anunciaron lo que Dios haría en el futuro, ya sea castigando al pueblo o restaurándolo y enviándole el Mesías que establecería el reino de Dios. Los «hijos de los profetas» en Israel constituían grupos organizados bajo la égida de un profeta como Elías o Eliseo (1 Reyes 20:35; 2 Reyes 2:3; 4:1, etc.). En la Iglesia primitiva, algunos hombres tenían el don de profecía, para exhortar y consolar, bajo la inspiración del Espíritu Santo (1 Corintios 12:10; 14:1-4, etc.). Estos dones se ejercen también hoy día. El don de profecía permite a un hermano o un predicador de distinguir unas necesidades apremiantes de algún miembro o de un grupo de creyentes y de proveer las enseñanzas o exhortaciones necesarias.

Prójimo

La parábola de Lucas 10:25-37 responde a la pregunta: «¿Y quién es mi prójimo?» De hecho, la respuesta es doble:

  • El Señor Jesús es el prójimo de todos los hombres, porque se acercó a todos, especialmente de los más desfavorecidos. Ha proporcionado el cuidado apropiado para cada caso, y a menudo la curación. Pero sobre todo, «se ocupó de nuestros dolores… fue herido por nuestras transgresiones… el castigo que nos da la paz fue sobre él, y por sus heridas fuimos nosotros curados» (Isaías 53:4-5). Fue él quien «usó de misericordia» con el herido abandonado al borde del camino. Y es él quien, aún hoy, muestra la misma compasión hacia todos los hombres. Si creemos que hemos muerto en nuestras faltas y pecados, y que Jesucristo pagó el precio de nuestro rescate muriendo en la cruz, entonces Cristo nos da vida eterna.
  • Todo el mundo es nuestro prójimo –porque somos seres humanos–, pero especialmente aquellos con los que podemos estar en contacto, independientemente de su raza, condición o situación. En cuanto a nuestro prójimo, la Biblia nos enseña a:

– amarlo como a nosotros mismos (Mateo 19:19; Marcos 12:31; Romanos 13:9; etc.),

– no despreciarlo (Proverbios 14:21),

– agradarle, por el bien, para la edificación (Romanos 15:2),

– decirle la verdad (Efesios 4:25),

– no dar falso testimonio en su contra, ni hacerle ningún daño (Éxodo 20:16-17),

– no juzgarlo (Santiago 4:12).

Propiciación

Dios se hace propicio (favorable) no por lo que el hombre pueda traer de sí mismo, sino por el sacrificio expiatorio de Cristo. Al dar su vida como sacrificio por el pecado, Jesús realizó una obra grandiosa que permite a Dios perdonar al pecador. El que cree en él se beneficia de las virtudes de este sacrificio. Cristo es la propiciación por nuestros pecados; su obra es suficiente para todo el mundo; pero es eficaz solo para los que creen en él (1 Juan 2:2; 4:10; Hebreos 2:17).

Propiciatorio

En el Antiguo Pacto, era la tapa del arca superada por querubines (Hebreos 9:5). Una vez al año, en el día de la expiación (Levítico 16), el sumo sacerdote entraba en el lugar santísimo y rociaba sangre del sacrificio por el pecado delante y sobre el propiciatorio. La raíz de la palabra hebrea significa «cubrir», de ahí la aplicación a Cristo: Dios lo presenta como propiciatorio para aquel que cree en la eficacia de su sangre derramada en la cruz para cubrir nuestros pecados (Romanos 3:24-25).

Prosélito

Era el nombre dado a los gentiles que se habían convertido al judaísmo. Se designaba por la expresión: temerosos de Dios (Hechos 10:2; 13:16) a aquellos que no se les consideraban como completamente convertidos, y que estaban de acuerdo en creer en Dios y obedecer algunas de las prescripciones de la Ley. Solo se volvían verdaderamente judíos aceptando toda la Ley, y especialmente la circuncisión. En ese momento se les llamaba prosélitos de la justicia (Mateo 23:15; Hechos 2:10; 6:5; 13:43). Muchos prosélitos y «temerosos de Dios» fueron ganados al Evangelio al principio de la era cristiana.

Publicano

Véase > Cobrador de impuestos

Puteoli

Localidad italiana. La nave que conducía a Pablo siguió por la costa este de Sicilia, tocó la costa italiana de Regio (Calabria), cruzó el estrecho de Mesina y abordó cerca de Nápoles (Hechos 28:13). Desde Puteoli, los prisioneros fueron conducidos a Roma por el centurión caminando por la carretera (la llamada Vía Appia) (200 km).

Quebrantar

Véase > Transgredir

Rabí

Véase > Maestro

Raboní

Palabra aramea: «mi Maestro», con un matiz de respeto y apego (Marcos 10:51; Juan 20:16).

Redención

Redención al precio de un rescate, seguido de una liberación, p.ej.: la de Israel de Egipto (Salmo 111:9) o con relación a una futura liberación (Lucas 21:28). La redención del creyente, anteriormente esclavo del pecado (Romanos 3:24; 6:17, 20; 1 Corintios 1:30), es eterna y ha sido obtenida por la sangre de Cristo (Colosenses 1:14; Efesios 1:7; Hebreos 9:12; 1 Pedro 1:18-19). El día futuro de la redención se refiere a la liberación del cuerpo del creyente cuando venga el Señor (Romanos 8:23; Efesios 4:30), y a la heredad, ya rescatada pero todavía no liberada del enemigo (Efesios 1:14). En Gálatas 3:13; 4:5, «redimir» viene del griego: «ex agorazo» (retirar del mercado de esclavos).

Regeneración

Esta palabra se emplea para describir el cambio radical y definitivo hecho por el Espíritu Santo en la actitud general de una persona. La palabra en sí misma se usa solo dos veces en el Nuevo Testamento: en Mateo 19:28 para referirse a la renovación venidera de todas las cosas y en Tito 3:5 para describir el cambio en el individuo. Otros términos también se presentan de la misma manera (p.ej., 1 Pedro 1:3, 23) o se acercan a la idea de la regeneración («nacer de nuevo», Juan 3:3, 7; «se va renovando», Colosenses 3:10).

Reino de Dios

Este reino, ya predicho en el Antiguo Testamento (por ejemplo, Salmo 103:19; Daniel 2:44; Abdías 21) fue manifestado por el ministerio de Jesús (Mateo 3:2; 4:17; Lucas 11:20). Está interiormente presente en la vida de los creyentes, especialmente bajo el Nuevo Pacto (Lucas 17:21; Romanos 14:17), ellos pueden considerarse en el reino (Mateo 11:11; Juan 3:3; Colosenses 1:13), pero su manifestación completa y definitiva está por venir (Mateo 8:11; 26:29; 1 Corintios 6:9). Solo Mateo se refiere a él como el reino de los cielos.

Véase > Reino de los cielos

Reino de los cielos
Remanente

Todos los creyentes que permanecen fieles en el transcurso o hasta el final de un período bíblico dado o de un periodo de pruebas y juicios (o «dispensación») (Romanos 9:27; 11:5).

Remisión

Literalmente el hecho de tirar lejos, borrar (una deuda). Remisión de pecados: efecto de la gracia de Dios para con el culpable que se arrepiente y cree su Palabra (véase 1 Juan 1:9; Isaías 38:17).

Véase > Perdonar

Revelación

Véase > Apocalipsis

Sábado

(Día de reposo)

Descanso, en hebreo: el séptimo día de la semana, cuando toda la actividad usual debe cesar para los israelitas, siendo este día consagrado a Dios como un signo de pacto perpetuo con este pueblo (Éxodo 20:8-11; 31:12-17). El sábado comienza en la tarde del sexto día (que llamamos viernes) a las 18 horas y termina a las 18 horas del siguiente día (sábado). El día antes del sábado se llama Preparación (Mateo 27:62; Marcos 15:42; Lucas 23:54).

Nombre dado al séptimo día de la semana, celebrado en Israel como día de descanso (probablemente el significado de la palabra hebrea shabbat que dio sabbat), y día sagrado en el que se celebraban ceremonias religiosas particulares. La observancia del sábado está prescrita en el Decálogo y deriva su significado tanto de la memoria de la creación del mundo (Génesis 2:1-4; Éxodo 20:8-11) como de la memoria del fin de la esclavitud en Egipto (Deuteronomio 5:12-15). En el tiempo de Jesús, la tradición había codificado el descanso del sábado, definiendo con gran precisión el trabajo permitido y prohibido, para que la observancia de estas reglas pudiera convertirse en una carga real para los fieles, y constituir una tentativa de formalismo legalista para los líderes religiosos (véase Marcos 2:23 al 3:6). Sobre el significado del sábado para el cristiano, véase Hebreos 4:9 y Colosenses 2:16.

Sacerdote

Alguien que actúa como intermediario entre Dios y los hombres, principalmente porque ofrece sacrificios. Al principio, cada padre de familia podía asumir esta función (Génesis 8:20; Job 1:5). Más tarde este privilegio fue reservado en Israel para una clase especial de Leví y Aarón (Éxodo 28; Números 8; 18:4-7). Los sacerdotes tenían varias responsabilidades: guardar el santuario, enseñar la Ley. Constituyeron una jerarquía a la cabeza de la cual estaba el sumo sacerdote, el único autorizado a entrar en el lugar santísimo una vez al año (Levítico 16). Como había 24 clases de sacerdotes de las diversas familias sacerdotales (1 Crónicas 24:4-19), los servicios del templo eran proporcionados a su vez por las diferentes clases (Lucas 1:8). Los miembros de algunas familias numerosas que se sientan en el Sanedrín son llamados sumos sacerdotes (Marcos 14:1, etc.). Bajo el Nuevo Pacto, Jesús es el único sumo sacerdote (Hebreos 9:11), y todos los creyentes son sacerdotes, pudiendo venir directamente a Dios a través de él (1 Pedro 2:5, 9; Apocalipsis 1:6). Los levitas eran los miembros subordinados de la jerarquía israelita, primero encargados de transportar los objetos sagrados (Números 4) y luego en otros servicios: música, cantos, preparación de sacrificios, vigilancia de puertas, etc. (1 Crónicas 24:20-31; 25; 26).

El sacerdocio (oficio de sacerdote) consiste en estar en relación con Dios para adorarlo, para servirlo.

  • En el Antiguo Testamento y de acuerdo con la ley de Moisés, el culto consistía en traer dones u ofrendas. Fue a Aarón y a sus hijos, y luego a sus descendientes, a quienes se les confió la tarea de recibir de los israelitas y ofrecer estos sacrificios en su nombre a Dios, Jehová. Sus hijos tenían el título de sacerdotes, Aarón a la cabeza, tenía el nombre de sumo sacerdote. En particular, eran responsables de ofrecer en el altar los animales que se sacrificaban para la purificación del pueblo.

Eran jefes de los levitas, con quienes compartían la responsabilidad de enseñar la Ley al pueblo, y tenían de Dios una autoridad de líderes religiosos sobre el pueblo de Israel.

  • En el Nuevo Testamento, en el tiempo de Jesús, se llamaba principales sacerdotes, el sumo sacerdote en el cargo y aquellos que previamente habían tenido esta dignidad, pero también algunos miembros de sus familias (véase Lucas 3:2; Juan 11:47-51; 18:13).
  • La palabra sacerdocio también se refiere al orden o al conjunto del cuerpo de los sacerdotes y al sistema religioso vinculado a él.
  • El sacerdocio levítico ha permanecido hasta que se levante otro sacerdote que no ha sido nombrado según el orden de Aarón (Hebreos 7:11): Cristo mismo. Cristo ahora ejerce su sacerdocio en favor de los creyentes. Él es el sumo sacerdote en el cielo (Hebreos 2:17; 8:1). Al entrar al cielo, recibió la dignidad de sumo sacerdote por la eternidad según el orden de Melquisedec (Hebreos 5:6, 10). Para la bendición de su reino futuro, será Rey y Sumo Sacerdote.
  • Todos los que han creído en Cristo (hombres y mujeres) son elevados a la dignidad de sacerdotes (Apocalipsis 1:6; 5:10). Juntos constituyen un sacerdocio santo: ofrecen sacrificios espirituales a Dios; forman un real sacerdocio como testimonio ante el mundo (1 Pedro 2:5, 9). Pero como están todavía en la tierra, «envueltos de debilidad», necesitan el oficio sacerdotal de Cristo; es él quien los presenta a Dios, quien también presenta sus ofrendas santificándolas (Hebreos 2:17; 10:21), quien intercede por ellos y los apoya hasta la salvación final (Hebreos 7:25).
Sacrificio

Esto es lo que se presenta como ofrenda a Dios. El sacrificio de Cristo es mejor que los ofrecidos bajo la Ley (Hebreos 9:23). Cristo se dio a sí mismo como un sacrificio a Dios (Efesios 5:2). Él fue manifestado una vez para la abolición del pecado a través del sacrificio de sí mismo, y una vez para siempre (Hebreos 9:26). Habiendo ofrecido un solo sacrificio por el pecado, Jesús se sentó a la diestra de Dios a perpetuidad (Hebreos 10:10, 12).

Se insta a los creyentes a consagrar sus vidas a Dios para servirle (Romanos 12:1) y alabarle (Hebreos 13:15), a compartir sus bienes (Hebreos 13:16). Dios se complace en tales sacrificios. Los creyentes ofrecen sacrificios espirituales agradables a Dios a través de Jesucristo cuando le adoran (1 Pedro 2:5).

Véase > Sacerdocio / Sacerdote, Holocausto

Sacudir

Sacudir el polvo de los pies o de las ropas (Mateo 10:14; Marcos 6:11; Lucas 9:5; 10:11): gesto de los enviados del Señor para testificar públicamente que su mensaje ha sido rechazado, pero que la responsabilidad de los incrédulos permanece con ellos.

Saduceos

Partido religioso judío, compuesto principalmente por miembros ricos del sacerdocio de Jerusalén. El origen de su nombre es incierto (descendientes de Sadoc, 1 Reyes 2:35). Muy abiertos a las cuestiones políticas y a los contactos con los romanos; los rigoristas farisaicos y los ortodoxos los desaprobaban. En el plano religioso, permanecieron fieles a la Ley, pero de manera estrecha y con cierto escepticismo. No creían ni en los ángeles ni en la resurrección de los muertos (Hechos 23:8; Mateo 22:23).

Véase > Fariseos

Salmos

Una de las tres grandes divisiones del Antiguo Pacto para los judíos: Moisés, los Profetas y los Salmos; la tercera, estaba designada con ese nombre.

El libro de los Salmos es ciertamente la parte más conocida del Antiguo Testamento. Es una colección de ciento cincuenta poemas o himnos, de diferentes autores, divididos en cinco libros como el Pentateuco (los cinco libros de Moisés).

Los Salmos constituyen el primer y principal libro de la tercera sección de la Biblia hebrea, las «Escrituras"» (en hebreo: ketubim). En Lucas 24:44, la expresión «los Salmos» se refiere a toda la tercera parte del Antiguo Testamento. El título hebreo, tehillim (del hebreo hillil «alabar»; comp. Aleluya), significa «alabanza». El nombre «salmo» usado para un solo himno viene del griego; tiene el significado de «canto con acompañamiento» o «tocar la lira».

Los Salmos ejercen un atractivo especial para el lector de la Biblia. Más que en ningún otro lugar, encontramos en ellos los sentimientos de hombres piadosos. Se expresan tanto en la oración como en la confesión, la alabanza o el sufrimiento. Conociendo nosotros mismos algunas de estas situaciones, nos llama particularmente la atención los salmos.

Pero el valor de los salmos no se limita a esto. Los salmistas no solo describieron sus sentimientos personales. El Espíritu de Cristo actuaba en ellos, participando en sus aflicciones y alegrías e identificándose con ellos en sus circunstancias (Is. 63:9; 1 Pedro 1:11). Esto explica por qué encontramos a Cristo en todas partes en este libro, y no solo en los llamados salmos «mesiánicos» (p.ej., los Salmos 16, 22, 24, 40, 68, 69 y 118). Es cierto que en estos salmos Cristo aparece de una manera muy especial, pero en el Nuevo Testamento se aplican varios salmos a Cristo aunque no estén marcados como mesiánicos.

Salvación

Eterna redención (o rescate) del hombre pecador, obtenida por el arrepentimiento y la fe en la perfección del sacrificio de Jesucristo en la cruz. Dios salva a aquel que cree en el Hijo de Dios y en la virtud de su sacrificio expiatorio; el creyente es lavado de sus pecados por la sangre de Cristo vertida en la cruz (Hebreos 9:12; Apocalipsis 1:5). No hay ninguna obra meritoria para obtener la salvación eterna (Tito 3:4-6; 1 Tesalonicenses 5:9); somos salvos por la gracia de Dios (Efesios 2:5, 8; Hechos 15:11). En el presente, la salvación es una liberación continua de la servidumbre del pecado, una santificación cristiana (Filipenses 2:12; 1 Pedro 2:3). También puede designar una liberación temporal (Filipenses 1:19; Hechos 28:1). La salvación es considerada en las epístolas como una liberación final; no será completa hasta la liberación de nuestro cuerpo (Romanos 8:24; Filipenses 3:20-21; 1 Pedro 1:5).

– Salvación:

Véase > Arrepentimiento / Arrepentirse, Perdonar, Espíritu, Alma, Cuerpo, Pecador

Samaria

Samaria fue la capital del reino de Israel, después del cisma del reino de Judá, cuya capital era Jerusalén (1 Reyes 16:24). El reino de Israel fue conquistado por los asirios, y la población fue deportada parcialmente o mezclada con personas trasladadas por los conquistadores (2 Reyes 17). Después del regreso de los judíos (las tribus de Judá y Benjamín) del exilio a Babilonia, la comunidad judía de Jerusalén no quiso tener ningún contacto con las poblaciones que quedaban en el país alrededor de la región de Samaria (Esdras 4:3; Nehemías 2:20).

Los samaritanos formaron entonces una población separada de los judíos y construyeron un lugar de culto en el monte Garizim (Juan 4:20). En el tiempo de Jesús, la provincia de Samaria, entre Galilea al norte y Judea al sur, no tenía el mismo régimen administrativo, y los judíos, considerando a los samaritanos como herejes o incluso enemigos, evitaban cruzar su región para ir de Judea a Galilea (Mateo 10:5; Lucas 17:11; Juan 4:4, 9; 8:48, etc.).

Samaria fue evangelizada por el mismo Jesús (Lucas 17:11-19; Juan 4:39-42), luego por Felipe, Pedro y Juan (Hechos 1:8; 8:1, 4-25).

Sanado

Este término conlleva en la Escritura dos aplicaciones distintas. Una de ellas es la curación de una enfermedad o accidente físico (Lucas 6:18; 8:36; 17:19), es decir la curación del cuerpo. La otra es la curación espiritual, que se asemeja a la salvación, de un alma que estaba sumergida en la muerte, lejos de Dios (Lucas 8:48).

En el sentido espiritual significa salvado.

Sanedrín

Asamblea suprema de los judíos que tenían el derecho de decidir en asuntos civiles y religiosos. También era el tribunal que dictaba sentencias de justicia. Compuesto por 71 miembros, sumos sacerdotes, doctores de la Ley, ancianos del pueblo, estaba presidido por el sumo sacerdote y gozaba de un grado bastante alto de autonomía que le dejaba la autoridad romana. Sin embargo, no tenía el poder de ejecutar a un condenado a muerte sin el consentimiento del gobernador romano (Juan 18:31).

Santiago

Véase > Jacobo

Santificado

Consagrado, puesto a parte para Dios. Ante Dios, cada creyente es santificado (Hechos 20:32; 26:18; 1 Corintios 1:2; 6:11; Hebreos 2:11; 10:10, 14). Él es apartado para Dios por la obra de la redención y por el Espíritu Santo que mora en él.

Por consiguiente, en su vida terrenal, el creyente también se aplica al cumplimiento práctico y progresivo de esta santificación (Apocalipsis 22:11):

Cristo santifica a la Asamblea (o a la Iglesia), purificándola con el lavado de agua por la Palabra (Efesios 5:26).

Santo

La idea de santidad se basa ante todo en la noción de separación, de consagración y no en la de perfección en la conducta. Todo lo sagrado, ofrecido a Dios, separado del mundo profano, es santo. Pueden ser personas, especialmente sacerdotes (Levítico 21:6), lugares (Éxodo 29:31), objetos (los de adoración, Éxodo 30:32 etc.), días (Nehemías 8:11; Éxodo 31:14), etc. El pueblo de Israel era santo porque pertenecía a Dios (Levítico 20:26; Deuteronomio 7:6). Asimismo, los primeros cristianos fueron llamados santos, porque estaban consagrados a Jesucristo y le pertenecían. Este significado se encuentra sobre todo en las epístolas del apóstol Pablo que llama santos a los fieles de las iglesias a quienes dirige sus cartas (1 Corintios 1:2; 2 Corintios 1:1, etc.). Por supuesto, la pertenencia a Jesucristo debe traducirse en obediencia a la voluntad de Dios, en el poder del Espíritu Santo. Esto es lo que el Nuevo Testamento llama santificación (Romanos 6:22; 1 Tesalonicenses 4:3; Hebreos 12:14; 1 Pedro 1:2).

En el Nuevo Pacto todos los que creyeron en Jesús y en su obra expiatoria son:

La responsabilidad del creyente es santificarse, es decir mantenerse en un estado de santidad (pureza) práctica.

Véase > Santificado

Santuario

Véase > Templo

Satanás

Esta palabra hebrea significa adversario, acusador (Job 1:9; Zacarías 3:1). Él es ante todo el acusador de los hombres delante de Dios, pero sobre todo en el Nuevo Testamento, es el adversario de Dios y de Cristo. También se le llama diablo (una palabra tomada del griego que significa divisor, denunciante, calumniador), el malvado, el príncipe de este mundo, el príncipe de los demonios que son los espíritus malignos que atacan a los hombres al golpearlos con toda clase de males, enfermedades y debilidades. Él se aún opone al plan de Dios para la salvación del mundo, pero será derrotado por el Mesías que regresará en su gloria y establecerá el reino eterno de Dios (Apocalipsis 20). Jesús, en su ministerio terrenal, a través de sus curaciones y milagros, ya manifestaba su poder sobre los demonios y sus príncipes, contra cuyas tentaciones había resistido (Mateo 4:1-11).

Sellado

El término «sellado» se utiliza a menudo en el Nuevo Testamento con el significado de: «para marcar con un sello (o impronta)», como señal de posesión o autenticación (Efesios 1:13; 4:30; 2 Corintios 1:21), aprobación o certeza (Juan 3:33), preservación (Apocalipsis 7:3-8), o inviolabilidad (Apocalipsis 5:1).

Señor

Señor o amo de esclavos y de siervos. Es el mismo término que, utilizado como título del «Señor Jesús», expresa su supremacía, su autoridad.

Tiene también un significado especial: Señor°, con el significado de: «el Señor Dios» o «Jehová» del Antiguo Testamento.

Servir

Honrar a Dios, adorarlo (Mateo 4:10; Hechos 27:23; Romanos 1:9; 12:1; 2 Timoteo 1:3, etc.).

Véase > Siervo / Esclavo / Criado, Ministro

Sexualidad

Véase > Fornicación / Fornicario, Matrimonio

Siervo

La lengua griega utiliza varios términos que se traducen como «siervo» en el Nuevo Testamento.

Véase > Servir, Ministro

Siglo

En la Escritura período indeterminado, edad, duración. (Esta palabra nunca tiene el significado de un período de 100 años en el Nuevo Testamento).

Significado especial: el estado moral y espiritual del mundo incrédulo, indiferente a los derechos de Dios o en rebelión contra él. Así encontramos «los hijos de este siglo» (Lucas 16:8); «el presente siglo malo» (Gálatas 1:4); «el dios de este siglo», Satanás (2 Corintios 4:4) o «el príncipe de este mundo» (Juan 16:11). Todo esto contrasta con los principios del reino de Dios, o «siglo venidero» (Marcos 10:30; Lucas 18:30).

Véase > Mundo

Sinagoga

Edificio de culto judío donde se celebraban servicios religiosos –con la excepción de los ritos de sacrificio reservados para el Templo de Jerusalén–, y donde los judíos recibían la enseñanza de la Ley desde la infancia, y podían discutir e interrogar a los doctores de la Ley. Las sinagogas, especialmente en los países donde los judíos estaban dispersos, eran los hogares donde su celo religioso y patriótico se alimentaba y revivía.

Lugar donde los judíos se reúnen en cada ciudad, principalmente en sábado, para la lectura en común del Antiguo Testamento. (Mateo 4:23; 9:35; 13:54; Marcos 1:21; Lucas 4:15-16; Juan 6:59; Hechos 15:21).

Véase > Tiempo

Sion

Antiguo nombre de la colina sobre la cual se construyó Jerusalén (2 Samuel 5:7; 1 Reyes 8:1). El término Sion es, por lo tanto, el equivalente de Jerusalén, aunque la ciudad se extendiera más tarde a las colinas circundantes. Como Jerusalén, la palabra Sion a veces tiene el significado figurado de pueblo escogido o ciudad celestial (Jeremías 6:23; Hebreos 12:22; Apocalipsis 14:1).

Sumo sacerdote

Véase > Sacerdote

Supervisor

Un creyente llamado a velar con atención y consagración por el bien de todos y cada uno de los fieles en la iglesia local. Los supervisores fueron elegidos inicialmente por los apóstoles o sus delegados, debido a sus cualidades morales. El Espíritu Santo los recomienda hoy si tienen estas mismas cualidades (Hechos 20:28; Filipenses 1:1).

El término que debería emplearse en castellano es el de «obispo».

Tabernáculo

En el Antiguo Testamento, tienda (de cita) construida de acuerdo a las instrucciones dadas por Jehová a Moisés, para ser una morada de Dios en el desierto (Hebreos 8:5). El tabernáculo consistía en un lugar santo, donde había una mesa con el pan de proposición, un candelero y un altar donde se quemaba el incienso; al otro lado de la cortina estaba el lugar santísimo, o santo de los santos, con el arca del pacto. Solo el sumo sacerdote podía entrar en el lugar santísimo una vez al año, con la sangre de un sacrificio y con incienso (véase Levítico 16; Hebreos 8 y 9).

Fiesta de los tabernáculos: séptima y última fiesta anual en Israel (véase Levítico 23:33-44). Se celebraba durante siete días a partir del día 15 del séptimo mes (nuestro mes de octubre), al final de la cosecha del campo. Recordaba a los israelitas que sus padres habían vivido en tiendas de campaña después de salir de Egipto, antes de entrar en la tierra prometida. Los judíos, en el tiempo del Señor, todavía celebraban la Fiesta de los tabernáculos (Juan 7:2, 37).

Talento

Una moneda que valía 60 minas, es decir, 6000 dracmas; la dracma griega equivalía aproximadamente al penique romano.

Véase > Moneda / Peso

Templo
  • Templo, en el sentido restringido (griego: naos): para este significado solo hay una llamada al Índice en el texto.

Se refiere a la morada de la Divinidad (Mateo 26:61; Marcos 14:58; 15:29; Lucas 1:9; Juan 2:19-21). Incluía el lugar santo y el lugar santísimo, separados por una cortina principal. Solo el sumo sacerdote podía entrar para el servicio (véase Éxodo 26:31-34; Levítico 16:12-13; Mateo 27:51; Marcos 15:38; Hebreos 9:2-12). El tesoro del Templo de Jerusalén daba a la plaza, donde se hacían las ofrendas (Mateo 27:5-6; Marcos 12:41; Lucas 21:1; Juan 8:20).

  • Templo, en sentido amplio (sin referencia al Índice): santuario (griego: hieron), es decir, el complejo de edificios sagrados, con patios y dependencias (Mateo 12:5).

Alrededor del año 20 a.C., Herodes el Grande había comenzado a reconstruir y embellecer el Templo después del exilio (Esdras 6:14-16). Una enorme galería cubierta con columnas, llamada el pórtico de Salomón, albergaba a la multitud, incluyendo a los comerciantes de bestias = animales para los sacrificios, y a los cambistas de dinero o banqueros (Mateo 21:12-13).

Tesoro

Véase > Templo

Testimonio
  • 2 Timoteo 2:2 – Relato hecho por una persona de lo que ha visto u oído. Un testimonio, para ser recibido, requiere el consejo de por lo menos dos testigos (1 Timoteo 5:19).
  • Hechos 22:12 – «Buen testimonio»: prueba de la realidad de la vida divina en el creyente.
  • Juan 5:32-33 – «Para dar testimonio de la verdad»: todas las verdades cristianas que estamos llamados a guardar y vivir.
  • 1 Juan 5:10-12 – «El testimonio de Dios»: que dio sobre su Hijo.
  • 1 Corintios 1:6 – «El testimonio de Cristo»: todo lo que concierne a su persona y a su obra.
  • 2 Timoteo 1:8 – «El testimonio de nuestro Señor»: los resultados de su obra que son la salvación, la llamada, la gracia, el servicio, la celebración de la Cena del Señor, etc.
  • Mateo 26:59 – Búsqueda de falso testimonio contra Jesús.
Tetrarca

Príncipe subalterno, a quien se le atribuyó el gobierno de una fracción (¼ parte) de territorio, sin el título oficial de rey (Lucas 3:1; Mateo 14:1; Hechos 13:1).

Tiempo

Medida del tiempo: los hebreos dividían el año en meses lunares y en semanas; un día se contaba de un anochecer al otro, no de medianoche a medianoche (Génesis 1:5).

Según la costumbre romana, los judíos dividían la duración del día solar, desde el amanecer hasta el anochecer, en 12 «horas» (Juan 11:9). Más largas en verano, más cortas en invierno, estas horas corresponden a las nuestras solo aproximadamente:

1ª hora: el comienzo del día

3ª hora: alrededor de las 9 de la mañana

6ª hora: hacia el mediodía

9ª hora: hacia las 15 horas (Mateo 27:45-46)

11ª hora: aproximadamente una hora antes de la puesta del sol (Mateo 20:1-12).

La noche se dividía en 4 vigilias:

  • desde el atardecer hasta las 9 o 10 de la noche,
  • la segunda hasta la medianoche,
  • la tercera hasta las 2 o 3 de la mañana,
  • la última hasta el amanecer (Mateo 14:25; Marcos 6:48; 13:35; Lucas 12:38).

En el Evangelio según Juan, las horas parecen haber sido contadas a la manera romana (como en Hechos 23:23), pero tampoco cuadran con los otros evangelios cuando son citadas en lo que concierne al Señor Jesús (véase 1:39; 4:6; 19:14).

Significado especial: Tiempo de refrigerio, tiempo de restablecimiento de todas las cosas (Hechos 3:19, 21): estos tiempos se refieren al tiempo futuro cuando la creación será liberada de la esclavitud de la corrupción (Romanos 8:20-22) y cuando Cristo traerá justicia a toda la tierra. Estos tiempos fueron anunciados por los profetas del Antiguo Testamento que invitaron al pueblo de Israel al arrepentimiento como nación (Deuteronomio 30:1-3; Amós 9:14-15; Hechos 1:6; Romanos 11:25-26).

Véase > Sábado

Transgresión

El hecho de infringir una ley, de desobedecer a una orden.

Véase > Pecado

Tratado

Discurso, escrito (esta palabra traduce el término griego «logos». Lucas habla de su primer relato en la introducción de su evangelio (véase Lucas 1:1-4). El libro de los Hechos de los Apóstoles, será su segundo tratado, en el cual relata los actos de los Apóstoles también llamado los Actos del Espíritu Santo (comp. Hechos 1:1-5).

Tribulación

Traducción de una palabra griega que viene de una raíz que significa presionar, apretar, oprimir (compare Marcos 3:9). Se trata de las aflicciones, de las angustias que pueden afectar a los hombres, entre otros creyentes (Juan 16:33) en este mundo, a veces en una forma particularmente grave y dolorosa (Mateo 24:21; Apocalipsis 7:14).

Troas

Véase > Asia

Tropezar
  • Caída: En sentido moral, caer en pecado desobedeciendo a la voluntad de Dios; ejemplo: Adán y Eva.
  • Ocasión de caída: Hacer que alguien caiga, guiarlo a hacer el mal.

Mateo 18:6-7 – Para los niños

Marcos 9:42 – ídem

Romanos 14:13-15 – Piedra de tropiezo

1 Corintios 8:9-13 – Para un hermano

1 Juan 2:9-11 – ¿Cómo evitarlo?

Véase > Escándalo / Escandalizar, Piedra de tropiezo

Vaso

Designa cualquier objeto de uso u ornamento.

En Romanos 9:20ss el apóstol compara los creyentes a vasos de barro.

Venida

Véase > Venida del Señor

Venida del Señor

Prometió: «Volveré» (Juan 14:3), y «Volveré pronto». (Apocalipsis 3:11).

  • Su segunda venida tendrá lugar en dos fases:

- Primeramente, para arrebatar a él a sus redimidos, que serán resucitados o cambiados (1 Corintios 15:51-52; Filipenses 3:20-21; 1 Tesalonicenses 4:15-18).

- Más tarde vendrá con ellos, en su aparición a este mundo, para juzgar y reinar (2 Tesalonicenses 1:7-10; 2:8; Apocalipsis 19:11-16).

Verdad

Efesios 4:25 – La verdad es lo que está en conformidad con la realidad y se opone a la mentira.

Juan 1:17 – La verdad vino por medio de Jesucristo.

Juan 14:6 – Jesús es la verdad.

Juan 16:13 – El Espíritu es la verdad y nos conduce a toda la verdad.

1 Juan 5:6 – ídem.

Juan 17:17 – La Palabra de Dios es verdad.

Santiago 1:18 – Los creyentes engendrados por la verdad.

Juan 3:3 – «De cierto, de cierto os digo» precede a una enseñanza esencial.

Vida

En Juan 1:4, (en el texto original griego) falta el artículo delante de vida, por lo cual el verbo «estar» no tiene sentido. Debería traducirse con el verbo «ser», como los versículos que lo preceden (1 y 2), que evoca esencia o naturaleza, como modo de existir. Para dar un ejemplo de traducción literal, deberíamos escribir: «1 En principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios y el Verbo era Dios. 2 Este era en principio con Dios… 4 En él vida era; y la vida era la luz de los hombres». Este versículo 4 nos presenta la eterna naturaleza del Verbo, esto se confirma también con la forma verbal empleada, al utilizar el imperfecto, que indica una permanencia continua, es decir eterna.

El Nuevo Testamento emplea dos vocablos distintos cuando habla de «vida»:

  • El que tenemos en el versículo 4 (vida = zoe), se refiere a la vida divina, a la vida de Dios, a la vida del Señor de toda eternidad, a la vida que él comunica cuando un pecador viene a creer en Él.
  • El otro vocablo (vida = psuche) que es utilizado, se refiere a la existencia física o biológica de la criatura, de la persona, de todo ser creado, incluso del alma, vida que se acaba con la muerte del cuerpo.
Viejo hombre

Todo hombre que viene al mundo nace pecador, porque desciende de Adán, cuya desobediencia trajo el pecado al mundo. Tiene la vida y la naturaleza de sus padres.

Pero «Dios ha enviado a su Hijo unigénito al mundo para que vivamos por él» (1 Juan 4:9). El que cree en su nombre es «nacido de Dios», «nacido de nuevo», para ser un hombre nuevo, «participante de la naturaleza divina» (2 Pedro 1:4). Dios no mejora lo que es viejo. El viejo hombre fue crucificado con Cristo, para recibir en la cruz la sentencia justa que merecía. De ahora en adelante, Dios considera al creyente como un nuevo hombre, responsable de caminar como tal.

La expresión «viejo hombre» (Romanos 6:6; Efesios 4:22; Colosenses 3:9-10), en contraste con la expresión «nuevo hombre», parece abarcar todo lo que éramos, hombres pecadores responsables, en nuestra vieja condición antes de creer.

Véase > Carne, Pecado

Vigilia

La noche estaba dividida en varios períodos de tiempo, llamados vigilias: tres entre los antiguos israelitas (Éxodo 14:24; Jueces 7:19), cuatro en el período romano del Nuevo Testamento. (Marcos 13:35 los menciona de la siguiente manera: tarde, media noche, canto de gallo, mañana). Cada uno de ellos duraba tres horas, desde las 6 de la tarde hasta las 6 de la mañana. Durante el día se contaba por horas.

Véase > Tiempo

Vinagre

La bebida provista a los soldados romanos era vino amargo que mezclaban con agua (Salmo 69:21; Mateo 27:34, 48; Marcos 15:36; Lucas 23:36; Juan 19:28-30).

Virgen

Persona soltera que no ha conocido ni tenido relación con un marido o mujer.

María era una virgen comprometida con José (Lucas 1:27 (2x)). La virgen se quedaría embarazada y daría a luz un hijo (Mateo 1:23). Jesús dio la parábola de las diez vírgenes (Mateo 25:1, 7, 11). Felipe tuvo cuatro hijas vírgenes que profetizaron (Hechos 21:9). En cuanto a las vírgenes, Pablo no había recibido una orden del Señor (1 Cor. 7:25). Si la virgen se casa, no ha pecado (1 Cor. 7:28). Pablo hace una diferencia entre la mujer casada y la virgen en cuanto a la ocupación de las cosas del Señor (1 Cor. 7:34). Pablo había desposado a los corintios con un marido, para presentarlos a Cristo como una virgen casta (2 Cor. 11:2). Los que siguen al Cordero son vírgenes (Apocalipsis 14:4). El vocablo «vírgenes» (1 Cor. 7:25) se puede atribuir tanto a la mujer como al hombre.

Zelote

Un apodo asociado al nombre del apóstol Simón, para distinguirlo de Simón Pedro; el equivalente: «el cananeo» (o cananita) significa «celoso» en arameo (Mateo 10:4; Marcos 3:18; Lucas 6:15). Los zelotes eran patriotas judíos que llevaron a cabo acciones violentas contra el ocupante romano.