La Buena Semilla
Versículos de marzo 2022
Vino, pues, palabra del Señor a mí, diciendo: Antes que te formase en el vientre te conocí.
(Jeremías 1:4-5)
Jesús… les dijo: ¿Qué buscáis? Ellos le dijeron… Maestro, ¿dónde moras? Les dijo: Venid y ved. Fueron, y vieron donde moraba, y se quedaron con él aquel día.
(Juan 1:38-39)
La ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo.
(Juan 1:17)
No estamos bajo la ley, sino bajo la gracia.
(Romanos 6:15)
Aclamad a Dios con alegría, toda la tierra. Cantad la gloria de su nombre; poned gloria en su alabanza… Venid, oíd todos los que teméis a Dios, y contaré lo que ha hecho a mi alma.
(Salmo 66:1, 2, 16)
Las palabras del Señor son palabras limpias, como plata refinada en horno de tierra, purificada siete veces.
(Salmo 12:6)
Ninguna diferencia hizo entre nosotros y ellos, purificando por la fe sus corazones.
(Hechos 15:9)
El Señor lo sustentará sobre el lecho del dolor; mullirás toda su cama en su enfermedad. Yo dije: Señor, ten misericordia de mí; sana mi alma.
(Salmo 41:3-4)
Cercano está el día grande del Señor, cercano y muy próximo… Día de ira aquel día, día de angustia y de… asolamiento.
(Sofonías 1:14-15)
Prepárate para venir al encuentro de tu Dios.
(Amós 4:12)
Estáis… llamados a ser de Jesucristo.
(Romanos 1:6)
Vosotros sois la sal de la tierra.
(Mateo 5:13)
Yo en muy poco tengo el ser juzgado por vosotros… el que me juzga es el Señor… El Señor… aclarará también lo oculto de las tinieblas, y manifestará las intenciones de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de Dios.
(1 Corintios 4:3-5)
Estaba yo postrado, y (Dios) me salvó.
(Salmo 116:6)
Vida y misericordia me concediste.
(Job 10:12)
Mandó el Señor Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.
(Génesis 2:16-17)
Así como en Adán todos mueren… en Cristo todos serán vivificados.
(1 Corintios 15:22)
Todo tiene su tiempo… tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado… tiempo de llorar, y tiempo de reír.
(Eclesiastés 3:1, 2, 4)
Cantaré al Señor, porque me ha hecho bien.
(Salmo 13:6)
Nos acordamos del pescado que comíamos en Egipto de balde, de los pepinos, los melones, los puerros… y ahora nuestra alma se seca…
(Números 11:5, 6)
El Dios de toda gracia… después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca.
(1 Pedro 5:10)
He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos (no moriremos); pero todos seremos transformados.
(1 Corintios 15:51)
El Señor… es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.
(2 Pedro 3:9)
(Tomás dijo del Señor:) Si no viere en sus manos la señal de los clavos… no creeré… Jesús le dijo: Porque me has visto, Tomás, creíste; bienaventurados los que no vieron, y creyeron.
(Juan 20:25, 29)
Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.
(Hebreos 11:1)
Su confianza es tela de araña. Se apoyará él en su casa, mas no permanecerá ella en pie; se asirá de ella, mas no resistirá.
(Job 8:14-15)
Tejen telas de arañas… Sus telas no servirán para vestir, ni de sus obras serán cubiertos.
(Isaías 59:5-6)
El publicano, estando en pie allá lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo; sino que se daba golpes de pecho, diciendo: ¡Dios, ten misericordia de mí, pecador!
(Lucas 18:13, V. M.)
Cristo Jesús, a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre.
(Romanos 3:24-25)
Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo; echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.
(1 Pedro 5:7)
(El rey Salomón dijo:) Gozarás de bienes. Mas he aquí esto también era vanidad.
(Eclesiastés 2:1)
(El apóstol Pablo dijo:) He aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación.
(Filipenses 4:11)
Anduvieron perdidos por el desierto… hambrientos y sedientos, su alma desfallecía en ellos. Entonces clamaron al Señor en su angustia, y los libró de sus aflicciones. Los dirigió por camino derecho… Alaben la misericordia del Señor, y sus maravillas para con los hijos de los hombres.
(Salmo 107:4-8)
El Señor te bendiga, y te guarde; el Señor haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; el Señor alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz.
(Números 6:24-26)
Padre de misericordias y Dios de toda consolación… nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios.
(2 Corintios 1:3-4)
Aunque… tengáis que ser afligidos… para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo.
(1 Pedro 1:6-7)
(Jesús dijo:) La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.
(Juan 14:27)
Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.
(Filipenses 4:6-7)
Padre de huérfanos y defensor de viudas es Dios en su santa morada.
(Salmo 68:5)
Bienaventurado el hombre que puso en el Señor su confianza.
(Salmo 40:4)
Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
(Gálatas 2:20)
Soy como el búho de las soledades; velo, y soy como el pájaro solitario sobre el tejado… Mis días son como sombra que se va, y me he secado como la hierba.
(Salmo 102:6, 7, 11)
Tú, oh Señor, no desamparaste a los que te buscaron.
(Salmo 9:10)
Nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero, y para los gentiles locura; mas para los llamados, así judíos como griegos, Cristo poder de Dios, y sabiduría de Dios.
(1 Corintios 1:23-24)
Mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.
(2 Corintios 3:18)
(Jesús dijo:) Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador… todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto.
(Juan 15:1, 2)
(Jesús dijo:) Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres… Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.
(Juan 8:31-32, 36)