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Inédito En desarrollo

Los Salmos


person Autor: Hamilton SMITH 89


Believer’s Bookshelf, Canadá y EBLC, Suiza, 2011

La palabra gentil(es) ha sido preservada en todas partes; significa solo «no judío».

1 - Prefacio de la editorial

Los Salmos no son el primer libro de Hamilton Smith que publicamos. Sin embargo, este libro requiere alguna explicación por parte del editor.

El manuscrito en nuestro poder se compone de dos partes que ha sido mantenido en la edición francesa como en la española:

  • La primera, presenta un doble resumen de los Salmos, uno por libro con una indicación de las secciones principales y su contenido; el otro por salmo.
  • La segunda ofrece un comentario sobre cada salmo, en el estilo conciso y claro de Hamilton Smith.

El libro fue publicado en 1992 por Believer’s Bookshelf en Canadá, sin la primera parte. Anteriormente, solo porciones de los salmos 1 al 105 habían aparecido en la revista inglesa “Precious Things” (1957 al 1962).

No nos fue posible saber si la intención del autor era publicar la primera parte o si se trataba de documentos de trabajo. A pesar de algunas lagunas menores en el manuscrito, pensamos que sería útil poner estas páginas a disposición del lector hispanófono, que ofrecen una rápida visión general de todos los Salmos, o que pueden ser un feliz recordatorio de esta lectura, si se leen después de la segunda parte.

Pedimos la bendición del Señor sobre este libro que trata de una porción tan preciosa de su Palabra.

2 - Resumen de las secciones (grupos) de los salmos

2.1 - Resumen de las secciones (grupos) de los salmos del Primer libro: Salmos 1 al 41

Las circunstancias, experiencias y ejercicios del alma del piadoso remanente de la nación judía en la tierra de Israel, como resultado del rechazo de Cristo por parte del pueblo, en los últimos días de la economía actual. Las bendiciones en las que los fieles serán introducidos en virtud de la identificación de Cristo con ellos en sus sufrimientos y su muerte por ellos en la cruz.

Sección 1: Salmos 1 y 2

El carácter de los fieles que heredarán la bendición terrenal a través del juicio de los malvados, ejecutado por Cristo –el Hijo de Dios– rechazado por los hombres, pero ungido por Dios para ser Rey.

Sección 2: Salmos 3 al 8

Las experiencias del piadoso remanente judío en presencia de sus enemigos, desde el momento en que Cristo es rechazado como el Hijo de Dios, hasta el día en que reina como Hijo del hombre.

Sección 3: Salmos 9 y 10

Una visión profética de las circunstancias experimentadas por el piadoso remanente judío en la tierra de Israel en los días inmediatamente anteriores a la venida de Cristo al poder.

Sección 4: Salmos 11 al 15

Un anuncio de las experiencias que el piadoso remanente judío hará durante el reinado del Anticristo.

Sección 5: Salmos 16 al 18

Cristo ocupa su lugar entre los hombres, identificándose con los fieles de Israel.

Sección 6: Salmos 19 al 21

Los diferentes testimonios presentados por Dios a los hombres.

Sección 7: Salmos 22 al 24

Los sufrimientos expiatorios de Cristo y los resultados que fluyen de ellos, para la bendición del hombre y para la gloria de Dios.

Sección 8: Salmos 25 al 39

El alma ejercitada del piadoso remanente judío en los últimos días. Resultado del conocimiento de la gracia de Dios, actuando en justicia en virtud de la muerte expiatoria de Cristo.

Sección 9: Salmos 40 y 41

La bendición asegurada al pueblo de Dios por la identificación de Cristo con los fieles en sus aflicciones.

2.2 - Resumen de las secciones (grupos) de los salmos del Segundo libro: Salmos 42 al 72

El Segundo libro de los salmos presenta los ejercicios de los judíos piadosos, expresando proféticamente las experiencias del remanente fiel de la nación, cuando su ciudad es pisoteada por los gentiles y ellos mismos son rechazados. Este libro presenta la confianza de los fieles en Dios durante este tiempo de prueba y sufrimiento. También muestra a Cristo identificándose con los sufrimientos de su pueblo, y la liberación final que trabajará por su pueblo para su elevación; esto lleva al establecimiento en gloria del reino de Cristo, cuando reine, durante el Milenio, para la bendición del hombre, la gloria de su propio nombre y la alabanza de Dios.

Sección 1: Salmos 42 y 43

Los ejercicios de los judíos que forman el remanente fiel cuando son expulsados de la tierra de Israel.

Sección 2: Salmos 44 y 48

La liberación final de Israel de todos sus enemigos a través de la intervención de Cristo.

Sección 3: Salmos 49 al 51

Advertencias a los hombres para que no pongan su confianza en las riquezas o en las formas externas de la religión, con exhortaciones al arrepentimiento, en vista de los juicios de Dios que vendrán sobre los malvados.

Sección 4: Salmos 52 al 55

Las experiencias de los judíos pertenecientes al remanente piadoso. Ellos exponen las angustias de sus almas en presencia del mal durante el reinado del Anticristo, en el día por llegar.

Sección 5: Salmos 56 al 63

Las experiencias de los judíos del remanente piadoso, mostrando los consuelos y la seguridad que encuentran en Dios durante las pruebas de la gran tribulación.

Sección 6: Salmos 64 al 68

Dios revelado en toda la tierra a través de su juicio.

Sección 7: Salmos 69 al 72

Cristo entrando en los sufrimientos de su pueblo por parte de los hombres, y la respuesta a sus sufrimientos en su reino de gloria por venir.

2.3 - Resumen de las secciones (grupos) de los salmos del Tercer libro: Samos 73 al 89

Sección 1: Salmos 73 al 83

(El resumen de la sección 1 (salmos 73 al 83) falta en el manuscrito del autor).

Sección 2: Salmos 84 al 87

Los caminos del Señor para liberar a su pueblo de la cautividad y establecerlo en Sion, por medio de Cristo, su Ungido.

Sección 3: Salmos 88 y 89

Los defectos del hombre y la fidelidad de Dios. Colocado bajo el juicio de Dios debido a sus pecados, Israel es salvado del juicio e introducido en la bendición a través de la bondad y fidelidad de Dios.

2.4 - Resumen de las secciones (grupos) de los salmos del Cuarto libro: Salmos 90 al 106

Jehová, único recurso del hombre caído, dando liberación a Israel y bendición al mundo por medio de Cristo el hombre perfecto.

Sección 1: Salmos 90 al 92

La bendición para el hombre a través de Cristo, el hombre perfecto.

Sección 2: Salmos 93 al 100

El reino de Cristo.

Sección 3: Salmos 101 y 102

Los principios del reino.

Sección 4: Salmos 103 y 104

La alabanza milenaria de Israel restaurado.

Sección 5: Salmos 105 y 106

La fidelidad del Señor que introduce a Israel en el reino.

2.5 - Resumen de las secciones (grupos) de los salmos del Quinto libro: Salmos 107 al 150

Los caminos y los propósitos de Dios para la bendición del hombre por medio de Cristo, así como las experiencias y ejercicios, que conducen a la restauración final y a la bendición del pueblo, por los que pasará Israel, y a la alabanza universal de Jehová.

Sección 1: Salmos 107 al 110

Los caminos de Dios hacia el hombre, en vista de su propósito para la gloria de Cristo y la bendición de los suyos.

Sección 2: Salmos 111 al 113

Jehová celebrado por sus magníficas obras, por la bendición dada a su pueblo y para la gloria de su nombre.

Sección 3: Salmos 114 al 118

Jehová en medio del Israel restaurado, liberando a los fieles de todos sus enemigos y asegurando, para Él, la alabanza universal para siempre.

Sección 4: Salmo 119

La Palabra de Dios escrita en el corazón y expresada en la vida de los fieles.

Sección 5: Salmos 120 al 134

Las experiencias de los fieles en Israel con ocasión de la liberación definitiva del cautiverio y durante su restauración en el país.

Sección 6: Salmos 135 y 136

La alabanza dada a Jehová por Israel restaurado.

Sección 7: Salmos 137 al 145

Las experiencias del remanente fiel, pasando de las lágrimas en la tierra del cautiverio a la entonación del cántico nuevo y eterno en el reino sin fin de Jehová.

Sección 8: Salmos 146 al 150

Jehová, viviendo en medio del Israel restaurado, une la alabanza de la tierra y del cielo.

3 - Resumen de los salmos individuales, agrupados en secciones

3.1 - Resumen de los salmos individuales del Primer libro

3.1.1 - Sección 1: Salmos 1 y 2

Las bendiciones del pueblo terrenal de Dios aseguradas por el juicio de los malvados, que es ejecutado por Cristo, el Rey ungido.

Salmo 1: El hombre piadoso, en medio de un mundo impío, esperando que Dios se ocupe, en su gobierno, de los malvados e introduzca a los justos en la bendición.

Salmo 2: El consejo de Dios al Mesías, rechazado por los hombres, pero elegido por Dios para ejercer su gobierno. A través de él, los malvados serán juzgados y los creyentes serán introducidos en la bendición.

3.1.2 - Sección 2: Salmos 3 al 8

La confianza en Dios, adquirida a través de los ejercicios espirituales y de las experiencias que el piadoso remanente está llamado a conocer durante el período del rechazo de Cristo (Sal. 2), hasta el día de su gloria real como Hijo del hombre (Sal. 8).

Salmo 3: Confianza del alma en la presencia de sus enemigos, basada en su fe en Dios cuando, externamente, todo está en su contra.

Salmo 4: Confianza en la presencia de los enemigos, siendo consciente el fiel de su integridad y habiendo experimentado la gracia de Dios.

Salmo 5: Confianza en Dios, basada en el conocimiento de su gobierno justo e inmutable.

Salmo 6: La confianza de un alma piadosa que, identificándose con el pueblo de Dios bajo el castigo, prueba el favor personal de Dios.

Salmo 7: La confianza del alma en Dios, cuando sufre a causa de la justicia.

Salmo 8: Los fieles en Israel conduciendo las alabanzas de toda la tierra, cuando Cristo, como Hijo del hombre, es establecido sobre toda la creación. Todos sus enemigos son entonces puestos bajo sus pies y su nombre es embellecido por toda la tierra.

3.1.3 - Sección 3: Salmos 9 y 10

Una visión profética de las circunstancias del piadoso remanente de los judíos en la tierra de Israel en los días que inmediatamente precederán a la venida de Cristo al poder.

Salmo 9: La condición y las circunstancias en que se encontrarán los fieles cuando Cristo venga a reinar.

Salmo 10: La confianza en Dios del remanente judío, en los días de su profunda angustia, bajo el reinado del Anticristo.

3.1.4 - Sección 4: Salmos 11 al 15

Un anuncio de los ejercicios del piadoso remanente, en medio de la nación judía apóstata, durante el reinado del Anticristo.

Salmo 11: Los ejercicios de los fieles que se encuentran en un mundo cuyos fundamentos morales son destruidos.

Salmo 12: Jehová y sus palabras, el recurso del justo cuando los fieles han desaparecido de entre los hombres, y prevalece la iniquidad.

Salmo 13: La fe de los fieles en circunstancias en las que, en apariencia, son olvidados por Dios.

Salmo 14: La fe de los fieles cuando la maldad del mundo alcanza su apogeo, justo antes de la aparición del juicio.

Salmo 15: El carácter moral de los que heredarán las bendiciones milenarias, después de la ejecución del juicio sobre el mundo.

3.1.5 - Sección 5: Salmos 16 al 18

Cristo ocupando su lugar entre los hombres, identificándose con los fieles de Israel.

Salmo 16: Cristo identificándose con los excelentes de la tierra, en el camino de la vida ante Dios.

Salmo 17: Cristo identificándose con los fieles en el camino de la justicia ante los hombres.

Salmo 18: Cristo identificándose con los sufrimientos de Israel, en la muerte, durante la travesía del desierto y en conflicto con el enemigo, hasta las bendiciones que caracterizan su reinado.

3.1.6 - Sección 6: Salmos 19 al 21

Los diferentes testimonios presentados por Dios sobre la responsabilidad de los hombres.

Salmo 19: El testimonio de la creación y la ley dada a los gentiles y a los judíos.

Salmo 20: El testimonio de Cristo, Persona viva, testigo fiel en medio de hombres impíos.

Salmo 21: El testimonio de Cristo como Rey, exaltado por encima de todos sus enemigos.

3.1.7 - Sección 7: Salmos 22 al 24

Los sufrimientos expiatorios de Cristo y sus resultados en gloria y bendición.

Salmo 22: Cristo, la víctima santa, abandonado por Dios cuando llevaba los pecados de su pueblo.

Salmo 23: Cristo, el Pastor, guiando a su pueblo en la peregrinación por el desierto.

Salmo 24: Cristo, el Rey, introduciendo a su pueblo en las glorias de su reino.

3.1.8 - Sección 8: Salmos 25 al 39

Los ejercicios de alma del piadoso remanente en Israel en los últimos días. Resultan del conocimiento de la gracia de Dios actuando en justicia sobre la base de la obra de Cristo, y revelan el estado moral de los fieles, antes que las circunstancias particulares en las que se encontrarán.

Salmo 25: A la luz de la bondad y de la justicia de Dios, los fieles confiesan sus pecados.

Salmo 26: Los justos piden ser sondeados por Dios, para que todos los obstáculos para la adoración y el testimonio ante el mundo sean juzgados.

Salmo 27: La confianza del creyente en presencia de los enemigos, y los ejercicios que el alma conoce ante Jehová.

Salmo 28: La oración del creyente, que pide ser guardado en la separación de un mundo que va hacia el juicio.

Salmo 29: Los fieles aprenden que el que cuida de ellos es más poderoso que los poderosos de este mundo.

Salmo 30: Los fieles experimentan la liberación de Jehová cuando se encuentran en las profundidades de la angustia.

Salmo 31: La confianza de los fieles cuando parecen estar abandonados, por un tiempo, en manos de sus enemigos.

Salmo 32: La bendición del hombre cuyo pecado es perdonado.

Salmo 33: Los fieles invitados a celebrar a Jehová por adelantado por su intervención en favor de ellos.

Salmo 34: Las experiencias por las cuales los fieles aprenden a someterse a Dios en todo momento.

Salmo 35: Una llamada a Dios para que actúe contra los enemigos de su pueblo de la misma manera que actuaron contra los fieles.

Salmo 36: Los impíos, presentados en contraste con Dios, y la bendición de los que confían en Jehová.

Salmo 37: Los fieles advertidos para que no se dejen perturbar por la prosperidad temporal de los malvados.

Salmo 38: El alma piadosa abandonada por sus amigos y culpada por sus enemigos, cuando está bajo el castigo de Jehová.

Salmo 39: El fiel mudo en presencia de sus enemigos, porque está bajo el castigo de Dios.

3.1.9 - Sección 9: Salmos 40 y 41

Las bendiciones del pueblo de Dios, que resultan del hecho de que Cristo entró en las aflicciones causadas por los pecados de los fieles o por el oprobio de sus enemigos.

Salmo 40: Cristo, habiendo cumplido perfectamente la voluntad de Dios, es escuchado y liberado de todas las aflicciones en las que había entrado por causa de su pueblo.

Salmo 41: La felicidad que consiste en pensar en los pobres del rebaño de Dios, con los que Cristo se identificó cuando estaban bajo el oprobio de sus enemigos.

3.2 - Resumen de los salmos individuales del Segundo libro

3.2.1 - Sección 1: Salmos 42 y 43

Los ejercicios espirituales del piadoso remanente, cuando es expulsado del país durante la gran tribulación de los últimos días.

Salmo 42: La confianza de los judíos piadosos en el Dios vivo, cuando son expulsados del país en los últimos días.

Salmo 43: El remanente piadoso esperando a Dios para ser liberado de sus enemigos y devuelto al lugar santo, al monte santo de Dios.

3.2.2 - Sección 2: Salmos 44 al 48

La liberación final de Israel de todos sus enemigos a través de la intervención de Cristo.

Salmo 44: Confiando por fe en lo que Dios ha hecho en el pasado, el fiel lo llama para que venga en ayuda de su pueblo liberándolo de sus enemigos.

Salmo 45: Cristo presentado como la respuesta al grito de fe, como aquel por quien Dios librará a su pueblo.

Salmo 46: Confianza en Dios adquirida por el remanente piadoso a través de la experiencia de la bondad divina en el día de la angustia.

Salmo 47: La celebración de la liberación hecha por Dios. Israel está puesta por encima de las naciones que se unen al pueblo para alabar a Jehová.

Salmo 48: El rey estableció en Sion, el centro del gobierno y de la bendición para toda la tierra.

3.2.3 - Sección 3: Salmos 49 al 51

Advertencias a los hombres para que no confíen en las riquezas (49), o en la forma externa de la piedad (50), con una exhortación al arrepentimiento (51), en vista de los juicios de Dios que van a venir sobre la tierra.

Salmo 49: En vista de los juicios inminentes de Dios, se advierte al hombre del mundo que no debe confiarse en las riquezas.

Salmo 50: Un testimonio de Dios que advierte al hombre religioso a no confiarse en las formas externas de la religión.

Salmo 51: La confesión de pecado del hombre arrepentido; reconociendo que la forma externa de la religión es inútil, se confía en la bondad de Dios.

3.2.4 - Sección 4: Salmos 52 al 55

Las experiencias del piadoso remanente de los judíos bajo el reinado del Anticristo, en un día por venir.

Salmo 52: La fe del remanente piadoso que discierne el carácter del Anticristo y su inminente juicio. Los fieles confían en la bondad de Dios y esperan la liberación.

Salmo 53: La condición del mundo bajo la dirección del Anticristo (el insensato) que niega la existencia de Dios.

Salmo 54: La oración del justo pidiendo a Dios que actúe de acuerdo con su nombre, salvando a los fieles de sus enemigos.

Salmo 55: La oración del justo cuando es perseguido por el Anticristo. Sí mismo se levantó en Jerusalén, negó a Dios y rompió su pacto.

3.2.5 - Sección 5: Salmos 56 al 63

El consuelo y la seguridad del justo, en la confianza que ha puesto en Dios. Los Salmos 52 al 55 presentan la angustia del alma fiel en presencia del mal. Los Salmos 56 al 63 hablan de la bondad de Dios que sostiene el alma en tiempos de angustia.

Salmo 56: La confianza del salmista en Dios y en su palabra, frente a la oposición diaria.

Salmo 57: Dios, el refugio del alma hasta que pasen las calamidades.

Salmo 58: El remanente espera que Dios establezca su gobierno en la tierra a través del juicio de los malvados.

Salmo 59: El remanente espera que Dios juzgue a las naciones que han oprimido a su pueblo sin causa, para que se sepa que Dios domina en Jacob hasta los confines de la tierra.

Salmo 60: Aunque está bajo el castigo de Dios por sus iniquidades, el remanente de los judíos lo espera como su única esperanza. Solo Dios puede traer de vuelta a su pueblo y reparar las brechas.

Salmo 61: La confianza de un alma abrumada que clama a Dios desde los confines de la tierra.

Salmo 62: La confianza de un alma apacible que confía solo en Dios en todo momento.

Salmo 63: La confianza de un alma sedienta que se regocija en Dios en una tierra árida y alterada.

3.2.6 - Sección 6: Salmos 64 al 68

Dios manifestado al mundo entero a través de sus juicios.

Salmo 64: El justo juicio que caerá sobre los impíos, llevará al mundo a temer a Dios, y a los justos a regocijarse.

Salmo 65: Habiendo caído el juicio sobre los impíos, Sion se convierte en el centro de alabanza y oración para toda la tierra.

Salmo 66: Dios manifestado a toda la tierra por los terribles juicios ejecutados sobre sus enemigos.

Salmo 67: Dios manifestado a toda la tierra a través de sus medios gubernamentales hacia Israel.

Salmo 68: Dios manifestado a toda la tierra por el despliegue de su bondad a lo largo de la historia de Israel.

3.2.7 - Sección 7: Salmos 69 al 72

Los sufrimientos de Cristo por parte de los hombres, y la respuesta a estos sufrimientos por parte de Dios.

Salmo 69: Los sufrimientos de Cristo por parte de los hombres.

Salmo 70: Los deseos de Cristo cuando sufría por parte de los hombres.

Salmo 71: La restauración de Israel en respuesta a los deseos de Cristo.

Salmo 72: Las glorias del reino de Cristo; la respuesta a sus sufrimientos infligidos por los hombres.

3.3 - Resumen de los salmos individuales del Tercer libro

3.3.1 - Sección 1: Salmos 73 al 83

Salmo 73: La bondad de Dios para con Israel, aunque por un tiempo, en los caminos santos de Dios, su pueblo debe sufrir mientras que los malvados prosperan.

Salmo 74: Una llamada a Dios, para que intervenga en el juicio contra los impíos, en favor de su pueblo y para su propia gloria.

Salmo 75: El anuncio de que el tiempo fijado por Dios para su intervención en juicio está cerca. Esta es la respuesta a la llamada de los fieles del Salmo 74 que preguntan: «¿Hasta cuándo?» (v. 9-10).

Salmo 76: La anticipación del juicio de las naciones y la celebración de sus resultados.

Salmo 77: Confianza en Dios en el día de la angustia.

Salmo 78: El camino de Dios en medio de las faltas de Israel, para su gloria y la bendición de su pueblo.

Salmo 79: La confesión, por el hombre piadoso, del pecado y de la miseria total del pueblo de Dios. Una llamada a Dios para que actúe en favor de los suyos, según sus tiernas misericordias y para la gloria de su gran nombre.

Salmo 80: Un triple llamado a Dios para que restaure a los suyos y los libere de sus enemigos (v. 3, 7, 19).

Salmo 81: Israel restaurado, introducido a la luz del favor de Dios, discierne el camino que Jehová ha seguido para llevar a los suyos a la bendición.

Salmo 82: La condenación de los líderes injustos del pueblo de Dios –de aquellos que fueron establecidos en un lugar de autoridad para representar a Dios.

Salmo 83: El juicio de las naciones reunidas contra Dios y contra su pueblo Israel.

3.3.2 - Sección 2: Salmos 84 al 87

Los caminos de Jehová para liberar a su pueblo de la cautividad y establecerlo en Sion, por medio de Cristo, su Ungido.

Salmo 84: El camino del sufrimiento que conduce a Sion, caracterizado por la gracia y que termina en gloria, asegurado por Cristo, el Ungido de Dios

Salmo 85: La bendición de Israel restaurado, cuando se encontraron la bondad y la verdad, y se abrazaron la justicia y la paz.

Salmo 86: El siervo que espera ser instruido en el camino de Jehová y salvado de todos sus enemigos.

Salmo 87: La gloria de Sion –la ciudad de Dios.

3.3.3 - Sección 3: Salmos 88 y 89

Las faltas del hombre y la fidelidad de Dios. Colocado bajo el juicio de Dios debido a sus pecados, Israel es salvado del juicio e introducido en la bendición a través de la bondad y fidelidad de Dios.

Salmo 88: Las infracciones del pueblo y la ira de Dios contra el pecado.

Salmo 89: La fidelidad de Dios y su bondad para con su pueblo.

3.4 - Resumen de los salmos individuales del Cuarto libro

3.4.1 - Sección 1: Salmos 90 al 92

La bendición para el hombre mortal a través de Cristo, el hombre perfecto.

Salmo 90: El Dios eterno, en contraste con el hombre mortal, morada y recurso de su pueblo en todas las generaciones.

Salmo 91: Cristo, el hombre dependiente, que se encuentra bajo las circunstancias del hombre mortal, y que vive en la morada secreta del Altísimo.

Salmo 92: Cristo, entrando en las circunstancias del hombre mortal, introduce el descanso milenario.

3.4.2 - Sección 2: Salmos 93 al 100

La segunda sección del Cuarto libro de los Salmos presenta el reino milenario de Cristo. Este reino implica el juicio de sus enemigos, la restauración de la nación de Israel, la bendición de toda la tierra y la gloria de Jehová.

Salmo 93: El reinado de Jehová y el carácter de su trono.

Salmo 94: La intercesión de los fieles, antes de la venida del Rey.

Salmo 95: La nación de Israel llamada a volverse hacia Jehová, como el Rey que está por encima de todos.

Salmo 96: Los gentiles llamados a volverse a Jehová, como Aquel que viene a reinar en justicia sobre toda la tierra.

Salmo 97: El reinado de Jehová, caracterizado por el juicio de los impíos, la bendición del pueblo de Dios y la gloria de Jehová.

Salmo 98: La intervención de Jehová en favor de su pueblo suscita un nuevo cántico, y llega a ser un testimonio para todos los confines de la tierra.

Salmo 99: El Rey reinante, sentado entre los querubines. La respuesta a la llamada del remanente fiel.

Salmo 100: Jehová reinando en sus atrios se convierte en el centro de reunión de toda la tierra.

3.4.3 - Sección 3: Salmos 101 y 102

Los principios que gobiernan el reinado de Cristo, y el camino seguido por Cristo para establecer su reino.

Salmo 101: Cristo como Rey presentando los principios de su reino.

Salmo 102: Cristo estableciendo su reino, identificándose como hombre con los fieles y como Dios con Jehová.

3.4.4 - Sección 4: Salmos 103 y 104

La alabanza milenaria de Israel restaurada.

Salmo 103: La alabanza milenaria de Israel a Jehová como Redentor.

Salmo 104: La alabanza milenaria de Israel a Jehová como Creador.

3.4.5 - Sección 5: Salmos 105 y 106

La fidelidad de Jehová para con su pueblo.

Salmo 105: La fidelidad de Jehová a su pacto, presentada en el cuidado de su pueblo y en el cumplimiento de su promesa.

Salmo 106: La fidelidad del Señor a su pueblo a pesar de la infidelidad de su pueblo.

3.5 - Resumen de los salmos individuales del Quinto libro

3.5.1 - Sección 1: Salmos 107 al 110

Los caminos de Dios con los hombres en vista de su propósito para la gloria de Cristo y la bendición de su pueblo.

Salmo 107: Los caminos de Dios hacia Israel y la humanidad, proclamando la bondad de Jehová.

Salmo 108: El propósito de Dios para Israel, al cual están dirigidos todos sus caminos.

Salmo 109: Los caminos de Dios hacia Cristo en la humillación.

Salmo 110: El propósito de Dios para Cristo en la gloria.

3.5.2 - Sección 2: Salmos 111 al 113

Jehová celebrado por sus magníficas obras, por la bendición dada a su pueblo y por la gloria de su nombre.

Salmo 111: Jehová celebrado en medio de la asamblea por sus magníficas obras.

Salmo 112: Jehová celebrado por las bendiciones dadas al hombre que le teme.

Salmo 113: Jehová celebrado por la grandeza de su nombre.

3.5.3 - Sección 3: Salmos 114 al 118

La presencia de Jehová en medio de Israel restaurado, trayendo a los fieles la liberación de todos sus enemigos y asegurando para siempre, para Él, la alabanza universal.

Salmo 114: La presencia de Jehová en medio de su pueblo, protegiendo a los fieles de sus enemigos y asegurando su bendición.

Salmo 115: Toda la gloria atribuida a Jehová por las bendiciones que su presencia trae a su pueblo, ya sea en el pasado o en el futuro.

Salmo 116: La respuesta del pueblo a la bondad de Dios en la liberación.

Salmo 117: Israel restaurado llama a las naciones a alabar a Jehová.

Salmo 118: Israel restaurado reconoce que sus pruebas son la consecuencia del rechazo de Cristo por parte de la nación, y que su restauración debe ser precedida por la confesión a Cristo. Después de su restauración, los fieles son invitados a celebrar a Jehová por su bondad que permanece para siempre.

3.5.4 - Sección 4: Salmo 119

La Palabra de Dios escrita en el corazón y expresada en la vida de un hombre que teme a Dios.

Divisiones del Salmo 119

1. La bendición del hombre íntegro en el camino.

2. El deseo del hombre piadoso de gozar de la bendición de aquel que es íntegro.

3. El siervo de Jehová, un extranjero en el mundo.

4. Jehová, el único recurso en tiempos de angustia.

5. Petición a ser enseñado por Dios y tener la inteligencia abierta.

6. Petición a ser liberados por Jehová, para silenciar a los malvados.

7. Confianza en la Palabra de Jehová, a pesar de la burla del mundo.

8. Bendición que resulta de tener a Jehová por la porción de su alma.

9. Bendición que resulta del castigo de Jehová.

10. Dios reconocido como Creador y justificado en sus caminos.

11. Ejercicios de aquel cuya oración no es respondida por un tiempo.

12. La fidelidad constante de Dios a su Palabra inmutable.

13. El efecto de la Palabra cuando es amada por sí misma.

14. El efecto de la Palabra en el camino del creyente.

15. Dios y su Palabra, el recurso de quien rechaza los vanos pensamientos del hombre.

16. Dios y su Palabra, el recurso del creyente en un mundo maduro para el juicio.

17. El efecto de la Palabra de Dios como luz en el alma.

18. El mantenimiento de los derechos de Dios en un mundo malvado.

19. Dependencia total de Jehová en presencia de los adversarios.

20. Fidelidad en la persecución, odio al mal y amor a la verdad.

21. Las bendiciones del que es guiado por la autoridad suprema de la Palabra.

22. Alabanza a Dios y testimonio al hombre por parte de un alma restaurada.

3.5.5 - Sección 5: Salmos 120 al 134

Las experiencias de los fieles en Israel en el último día, durante la liberación final del cautiverio y la restauración de su país.

Los quince salmos que componen esta serie llevan la mención «cánticos graduales». En Esdras 7:7, la palabra hebrea para «graduales» se traduce como «ascender» (más exactamente, «subir»); se usa en este versículo para describir el trayecto (el ascenso) de Babilonia a Jerusalén por un remanente judío de la cautividad.

El propósito principal de estos salmos parecería ser la presentación profética de los ejercicios del piadoso remanente de Israel, en la futura liberación de los fieles de las manos de sus enemigos, y en la restauración de su país, su ciudad y su templo. El retorno parcial a Esdras y Nehemías puede haber sido una anticipación momentánea de este restablecimiento final, pero de ninguna manera representa el cumplimiento de las predicciones de estos salmos (véase Sal. 125:2, 5; 128:5-6; 132:13-18; 133; 134).

El Salmo 126:1, aclara que el gran tema es la liberación de Israel de su larga cautividad. Otros pasajes mostrarán que la liberación de los fieles es con el propósito de regresar a la casa de Jehová en Jerusalén (Sal. 122:1-2; 127:1; 132:5-7; 134:1-2). El uso frecuente del nombre «Israel» indica que estos salmos están destinados no solo a la restauración de las dos tribus, sino también a la recuperación y reunión de toda la nación.

Salmo 120: El remanente piadoso de Israel encuentra su recurso en Jehová, en medio de las angustias de la cautividad.

Salmo 121: Los fieles asegurados del apoyo de Jehová cuando quitarán la tierra de la cautividad para subir a la casa de Jehová.

Salmo 122: La alegría de los fieles al subir a la casa de Jehová.

Salmo 123: Los ejercicios de los fieles ante los insultos y el desprecio de los soberbios.

Salmo 124: Los fieles celebran Jehová que los ha liberado del cautiverio.

Salmo 125: Los fieles experimentan la fidelidad de Jehová cuando salen del cautiverio.

Salmo 126: Los redimidos de Jehová vuelven a Sion con cánticos y alegría eterna.

Salmo 127: Jehová, el constructor de la casa y el guardián de la ciudad.

Salmo 128: Los fieles anticipan la bendición milenaria de los que temen a Jehová.

Salmo 129: Los fieles reconocen la justicia de Jehová en sus caminos hacia Israel y los enemigos del pueblo.

Salmo 130: Los fieles expresan la angustia de sus almas por los pecados de Israel.

Salmo 131: Los fieles manifiestan un espíritu de sumisión después de la confesión de su pecado.

Salmo 132: Un llamado a Jehová para que recuerde las aflicciones de David y la promesa de Jehová.

Salmo 133: La bendición de Israel restaurado y reunido.

Salmo 134: Los fieles de Israel, al final de su peregrinación, celebran a Jehová en su lugar santo, y son bendecidos por Jehová de Sion.

3.5.6 - Sección 6: Salmos 135 y 136

Las alabanzas dadas a Jehová en un día venidero por Israel restaurado, como resultado de las experiencias de los fieles. Estas se describen en los cánticos graduales.

Salmo 135: Llamados a Israel para que celebren a Jehová.

Salmo 136: La respuesta de Israel a los llamados para la alabanza.

3.5.7 - Sección 7: Salmos 137 al 145

Las experiencias y ejercicios del piadoso remanente de Israel en los últimos días. Estas pruebas harán que los fieles pasen de llorar durante el cautiverio a cantar «eternamente y para siempre» en el reino de Jehová.

Salmo 137: Los cautivos de Jehová solo pueden llorar, sus afectos estando ligados a Sion, a sus himnos y a su alegría.

Salmo 138: Jehová celebrado por responder al grito de los fieles en medio de la angustia.

Salmo 139: El hombre piadoso desea ser indagado y liberado de todo camino de dolor, para ser conducido al camino eterno.

Salmo 140: El hombre piadoso encuentra en Jehová su recurso todo suficiente frente a los enemigos de afuera.

Salmo 141: El hombre piadoso desea que sus oraciones sean agradables a Dios y rápidamente respondidas.

Salmo 142: El hombre piadoso espera a Jehová, su refugio cuando faltan todos los demás refugios.

Salmo 143: El hombre piadoso, en profunda angustia de alma, invoca la justicia de Jehová, pidiéndole que actúe a su favor.

Salmo 144: El hombre piadoso encuentra su recurso en la grandeza de Jehová, en contraste con la fragilidad del hombre que se le opone.

Salmo 145: El hombre piadoso celebra el poder, la gracia y la gloria del reino de Jehová.

3.5.8 - Sección 8: Salmos 146 al 150

Jehová, morando en medio de su pueblo terrenal, une las alabanzas del cielo y de la tierra.

Salmo 146: Israel restaurado, liberado de todos sus enemigos, reconoce la insensatez de confiar en el hombre, y la bendición de tener a Jehová para su ayuda y esperanza.

Salmo 147: Israel, reunido, llamado a celebrar a Jehová por su gracia restauradora, su bondad providencial y sus cuidados.

Salmo 148: Los cielos y la tierra llamados a celebrar a Jehová, el Creador.

Salmo 149: Israel restaurado llamado a celebrar a Jehová, su Rey, como participante de su gloria y gobierno.

Salmo 150: Los cielos y la tierra están llamados a unirse en la alabanza de Jehová.

Continuará próximamente