La Buena Semilla
Versículos de julio 2018
Su íntimo pensamiento es que sus casas serán eternas… dan sus nombres a sus tierras. Mas el hombre no permanecerá en honra.
(Salmo 49:11-12)
Todos nosotros nos descarriamos como ovejas… mas el Señor cargó en él el pecado de todos nosotros.
(Isaías 53:6)
El hombre nacido de mujer… sale como una flor y es cortado, y huye como la sombra y no permanece.
(Job 14:1-2)
Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.
(Salmo 90:12)
¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande ? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron.
(Hebreos 2:3)
Oh Dios… lávame más y más de mi maldad, y límpiame de mi pecado.
(Salmo 51:1-2)
El Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
(Gálatas 2:20)
Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados ; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.
(Isaías 53:5)
Bienaventurados aquellos cuyas iniquidades son perdonadas, y cuyos pecados son cubiertos.
(Romanos 4:7)
(Jesús dijo :) Pedid, y se os dará ; buscad, y hallaréis ; llamad, y se os abrirá.
(Lucas 11:9)
(Jesús les dijo :) Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a pecadores.
(Marcos 2:17)
Hazme saber, Señor, mi fin, y cuánta sea la medida de mis días ; sepa yo cuán frágil soy. He aquí, diste a mis días término corto, y mi edad es como nada delante de ti.
(Salmo 39:4-5)
Hijos, obedeced a vuestros padres… porque esto agrada al Señor.
(Colosenses 3:20)
Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo.
(Efesios 6:1)
Limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios.
(2 Corintios 7:1)
Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
(Romanos 5:8)
Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero.
(1 Juan 4:19)
Amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro.
(1 Pedro 1:22)
Creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
(2 Pedro 3:18)
Vamos adelante a la perfección.
(Hebreos 6:1)
En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia.
(Efesios 1:7)
Si vosotros permaneciereis en mi palabra… conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
(Juan 8:31-32)
Éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás. Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo.
(Efesios 2:3-5)
Fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir… no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación.
(1 Pedro 1:18-19)
Jesús, quien nos libra de la ira venidera.
(1 Tesalonicenses 1:10)
No temas, cree solamente.
(Marcos 5:36)
Ni temáis lo que ellos temen, ni tengáis miedo.
(Isaías 8:12)
El hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.
(1 Corintios 2:14)
Jesús le dijo… El que me ha visto a mí, ha visto al Padre.
(Juan 14:9)
Para que los que creen en Dios procuren ocuparse en buenas obras. Estas cosas son buenas y útiles a los hombres.
(Tito 3:8)
Que sostengáis a los débiles.
(1 Tesalonicenses 5:14)
Oísteis que fue dicho : Ojo por ojo, y diente por diente. Pero yo (Jesús) os digo : No resistáis al que es malo… al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa… Amad a vuestros enemigos… para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos.
(Mateo 5:38-45)
En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo : Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
(Mateo 3:1-2)
Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir : Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
(Mateo 4:17)
Pilato les dijo : ¿Qué, pues, haré de Jesús, llamado el Cristo ? Todos le dijeron : ¡Sea crucificado !
(Mateo 27:22)
Vosotros negasteis al Santo y al Justo, y pedisteis que se os diese un homicida, y matasteis al Autor de la vida.
(Hechos 3:14-15)
No hay diferencia, por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios.
(Romanos 3:22-23)
Palabra fiel y digna de ser recibida por todos : que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores.
(1 Timoteo 1:15)
Ella es mi consuelo en mi aflicción, porque tu dicho me ha vivificado.
(Salmo 119:50)
Tu palabra me fue por gozo y por alegría de mi corazón.
(Jeremías 15:16)
Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros ; os rogamos en nombre de Cristo : Reconciliaos con Dios.
(2 Corintios 5:20)
Está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio.
(Hebreos 9:27)
Le dijo Jesús : Yo soy la resurrección y la vida ; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.
(Juan 11:25)
Creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó ; varón y hembra los creó. Y los bendijo Dios.
(Génesis 1:27-28)
Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios.
(1 Juan 3:1)
Tú dices : Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad ; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo.
(Apocalipsis 3:17)
(Jesús dijo :) Si alguno tiene sed, venga a mí y beba.
(Juan 7:37)
Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.
(1 Pedro 5:7)
Bienaventurados todos los que en él confían.
(Salmo 2:12)
Si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.
(Mateo 18:3)
Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación.
(1 Pedro 2:2)
Cristo Jesús… se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo… para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla… y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.
(Filipenses 2:5-11)