PAZ
A - Nombres
Shalôm (7965, שָָלום), «paz, integridad, bienestar, salud». Esta es una raíz semítica muy común cuyo significado es «paz» en acádico, ugarítico, fenicio, arameo, siríaco, arábigo y etiópico.
Shalôm es un término muy importante en el Antiguo Testamento que se ha conservado en hebreo mishnáico, rabínico y moderno. Hoy en Israel la gente saluda a un visitante con las palabras mah shlomka (¿cuál es su paz, cómo está?) y le preguntan acerca de la «paz» («bienestar») de su familia.
El uso de shalôm es frecuente (237 veces) y su gama semántica variada. Desde las dos primeras ocasiones en que se usa el término en Génesis, se puede constatar este hecho: «Pero tú irás a tus padres en paz [shalôm en el sentido de «tranquilo», «a gusto», «despreocupado»] y serás sepultado en buena vejez» (Gén. 15:15 RVA). O bien, «de que no nos harás daño, como nosotros no te hemos tocado y como solo te hemos hecho bien y te despedimos en paz [shalôm con el significado de «incólume», «ileso»]» (Gén. 26:29 RVA). No obstante, ambos usos son en esencia los mismos, puesto que expresan el significado raíz de «integridad», «bienestar». Îsh shelomî («hombre de mi paz») indica un estado de ánimo que le permite a uno sentirse a sus anchas, cómodo, con otra persona: «Aun mi amigo íntimo [«hombre de mi paz» RVR, NRV], en quien yo confiaba y quien comía de mi pan, ha levantado contra mí el talón» (Sal. 41:9 RVA, LBA; cf. Jer. 20:10). Es una relación de armonía y bienestar, todo lo contrario a un estado de conflicto o guerra: «Yo amo la paz, pero si hablo de paz, ellos hablan de guerra» (Sal. 120:7 NVI). Shalôm es una condición del alma y de la mente que incentiva el desarrollo de facultades y capacidades. Este estado de bienestar se experimenta tanto en el interior como en el exterior del ser. En hebreo, esta condición se expresa con la frase beshalôm («en paz»): «En paz [beshalôm] me acostaré, y asimismo dormiré; porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado» (Sal. 4:8).
En estrecha relación con lo anterior se encuentra el significado de «bienestar», sobre todo el «bienestar» o la «salud» personal. Esta acepción se puede encontrar en la pregunta de Joab a Amasa: «¿Te va bien, hermano mío? Y tomó con la mano derecha la barba de Amasa para besarlo» (2 Sam. 20:9 RVA). O en la frase preposicional leshalôm junto con el verbo preguntar: «Entonces les preguntó José cómo estaban, y dijo: ¿Vuestro padre, el anciano que me dijisteis, lo pasa bien? ¿vive todavía?» (Gén. 43:27).
Shalôm también quiere decir «paz» en el sentido de una relación próspera entre dos o más personas. En esta acepción, shalôm no pasa de ser palabrería: «Saeta mortífera es su lengua, engaño habla; con su boca habla cada uno de paz a su prójimo, pero dentro de sí le tiende emboscada» (Jer. 9:8 LBA); diplomacia: «Sísara huyó a pie a la tienda de Jael, mujer de Heber el queneo, porque había paz entre Jabín, rey de Hazor, y la casa de Heber el queneo» (Jueces 4:17 RVA); o estrategia bélica: «Si te responde con paz y te abre sus puertas, toda la gente que se halla en ella te rendirá tributo laboral, y ellos te servirán» (Deut. 20:11 RVA).
Isaías profetizó acerca del «Príncipe de paz» (Isa. 9:6), cuyo reino introduciría un gobierno de «paz» (Isa. 9:7). Ezequiel habló en cuanto al nuevo pacto de «paz»: «Haré con ellos un pacto de paz; será un pacto eterno con ellos. Los multiplicaré y pondré mi santuario entre ellos para siempre» (Ezeq. 37:26 RVA). El salmo 122 es uno de los grandes salmos de celebración y oración por la «paz de Jerusalén»: «Pedid por la paz de Jerusalén» (Sal. 122:6). En las bendiciones israelitas se comunicaba la paz de Dios a su pueblo: «¡Sea la paz sobre Israel!» (Sal. 125:5 RVA).
En la Septuaginta se encuentran las siguientes traducciones: eirene («paz; bienestar; salud»), eirenikos («apacible; pacífico»); soteria («liberación; preservación; salvación») y hugiainein («estar en buena salud; sano»).
Otro nombre hebreo relacionado es shelem, que se encuentra 87 veces y que significa «ofrenda de paz»: «Y envió jóvenes de los hijos de Israel, que ofrecieron holocaustos y sacrificaron novillos como ofrendas [«sacrificios» RVR] de paz al Señor» (Éx. 24:5 LBA).
B - Verbos
Shalem (7999, שָלֵֵם), «estar completo, sano». El verbo, que aparece 103 veces, significa «estar completo» en 1 Reyes 9:25 (LBA): «Después que terminó la casa».
Otro verbo, shalam, quiere decir «hacer las paces»: «Cuando los caminos del hombre son agradables a Jehová, aun a sus enemigos hace estar en paz con él» (Prov. 16:7).
C - Adjetivo
Shalem (8003, שָלֵֵם), «completo; perfecto». Este vocablo se encuentra en Gén. 15:16 con el significado de «no del todo completo»: «En la cuarta generación volverán acá, pues hasta ahora no ha llegado al colmo [«aun no está cumplida» RV] la maldad de los amorreos» (RVA). En Deut. 25:15 el vocablo significa «perfecto».